Se profundiza caída industrial global, pedidos bajan
Londres, Reuters
La contracción en la producción industrial se expandió aún más alrededor del mundo en agosto, dado que los problemas en la zona euro generaron más daño sobre la economía global, mostraron el lunes sondeos.
La crisis de deuda soberana que ya lleva tres años probablemente ha sumergido nuevamente a las 17 naciones de la zona euro en recesión en el actual trimestre. Sin señales claras de ninguna resolución, las familias y las empresas se muestran reticentes a gastar y la demanda de bienes se está congelando.
Un dato preocupante para los diseñadores de políticas del Banco Central Europeo que se reúnen esta semana es que la desaceleración económica que comenzó en las economías más pequeñas de la zona euro ahora está afectando a Alemania y Francia. Eso, en tanto, está dañando muchas de las economías asiáticas que dependen de la exportación.
"El panorama general es que estamos perdiendo ritmo", dijo Peter Dixon, economista de Commerzbank.
"El crecimiento enfrentará problemas, no sólo en la zona euro sino en todo el mundo en los próximos meses, hasta que las autoridades encuentren una forma de inyectar cierto optimismo", agregó.
El índice final de gerentes de compra (PMI) del sector manufacturero de la zona euro recopilado por Markit cayó desde una lectura anterior de 45,3 a 45,1, por encima del mínimo de tres años registrado en julio de 44,0, pero en su decimotercer mes por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
Gran Bretaña fue la excepción con un sorpresivo incremento en su PMI -aunque aún mostró contracción- y se pronostica que datos similares que se esperan para el martes de parte del Instituto de Gerencia y Abastecimiento de Estados Unidos mostrarán una lectura de 50.
En Suecia, que ha superado constantemente al resto de Europa, el PMI se desplomó inesperadamente a un mínimo en tres años, en momentos en que la resistencia de los exportadores comenzó a erosionarse.
El PMI oficial de China cayó por debajo de 50 por primera vez desde noviembre, mientras que un sondeo similar de Markit -patrocinado por HSBC- mostró que la economía china se está achicando a su ritmo más acelerado desde marzo del 2009.
Los PMI de HSBC que cubren a otros exportadores importantes de Asia contaron historias similares. El indicador en Corea del Sur se ubicó por debajo de 50 por tercer mes consecutivo y el PMI de Taiwán retrocedió a su nivel más bajo desde noviembre.
Los informes mostraron que los nuevos pedidos están bajo presión mientras crece el temor por la entrada en recesión en la zona euro y los problemas de Estados Unidos para superar cualquier desaceleración económica.
Incluso en India, donde el sector manufacturero se ha expandido sin pausa por más de 13 años, los nuevos pedidos de exportación cayeron en agosto a su ritmo más lento desde octubre. La actividad fabril de Indonesia también se expandió en agosto, pero las nuevas órdenes de exportación cayeron por quinto mes consecutivo.
El PMI de China reforzó la idea de que el ritmo de crecimiento en la segunda mayor economía del mundo se está debilitando. El peor de los temores entre los industriales es la desaceleración de los nuevos pedidos a medida que la demanda escasea, particularmente desde la zona euro.
Pekín está tomando lo que describe como una postura política "prudente" para respaldar su economía, por temor a reactivar riesgos en el sector inmobiliario y de inflación.
China recortó las tasas de interés en junio y julio y ha estado inyectando liquidez en los mercados monetarios para aliviar las condiciones crediticias para apoyar a la economía después de que registró un sexto trimestre consecutivo de crecimiento más lento en el periodo abril-junio.
Los últimos datos generan dudas sobre si Pekín ha hecho lo suficiente para evitar que la desaceleración en el ritmo de crecimiento se extienda a un séptimo trimestre.
"Las autoridades parecen estar llevando adelante un experimento político riesgoso para ver cuán bien puede mantenerse la economía sin ninguna dosis de estímulo grande", dijo Wei Yao, economista de Societe Generale.
"Aunque creemos que es algo bueno que el umbral de dolor de Pekín sea bastante alto, este enfoque tiende a que se enfrenten riesgos amplios en el corto plazo", añadió.
CUENTA REGRESIVA PARA EL BCE
Después de haberse contraído un 0,2 por ciento entre abril y junio, se observa que la economía de la zona euro podría mostrar resultados similares en el trimestre en curso, sin que se espere crecimiento hasta el inicio del próximo año.
En su batalla por apoyar una economía devastada por una crisis de deuda que ya se extiende por dos años y medio, se espera que el Banco Central Europeo (BCE) recorte las tasas de interés a un nuevo mínimo de un 0,5 por ciento, ya sea el jueves o el próximo mes.
"El panorama para la economía de la zona euro se mantiene extremadamente complicado. Por ello, será bastante fácil de justificar un recorte de la tasa al 0,5 por ciento", dijo Annalisa Piazza de Newedge Strategy.
La inflación en el bloque se aceleró más de lo esperado en agosto, según datos divulgados el viernes, un factor que podría desalentar el BCE a actuar esta semana, pero la encuesta PMI mostró que las fábricas habían reducido los precios de sus productos por tercer mes consecutivo.
La contracción en la producción industrial se expandió aún más alrededor del mundo en agosto, dado que los problemas en la zona euro generaron más daño sobre la economía global, mostraron el lunes sondeos.
La crisis de deuda soberana que ya lleva tres años probablemente ha sumergido nuevamente a las 17 naciones de la zona euro en recesión en el actual trimestre. Sin señales claras de ninguna resolución, las familias y las empresas se muestran reticentes a gastar y la demanda de bienes se está congelando.
Un dato preocupante para los diseñadores de políticas del Banco Central Europeo que se reúnen esta semana es que la desaceleración económica que comenzó en las economías más pequeñas de la zona euro ahora está afectando a Alemania y Francia. Eso, en tanto, está dañando muchas de las economías asiáticas que dependen de la exportación.
"El panorama general es que estamos perdiendo ritmo", dijo Peter Dixon, economista de Commerzbank.
"El crecimiento enfrentará problemas, no sólo en la zona euro sino en todo el mundo en los próximos meses, hasta que las autoridades encuentren una forma de inyectar cierto optimismo", agregó.
El índice final de gerentes de compra (PMI) del sector manufacturero de la zona euro recopilado por Markit cayó desde una lectura anterior de 45,3 a 45,1, por encima del mínimo de tres años registrado en julio de 44,0, pero en su decimotercer mes por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción.
Gran Bretaña fue la excepción con un sorpresivo incremento en su PMI -aunque aún mostró contracción- y se pronostica que datos similares que se esperan para el martes de parte del Instituto de Gerencia y Abastecimiento de Estados Unidos mostrarán una lectura de 50.
En Suecia, que ha superado constantemente al resto de Europa, el PMI se desplomó inesperadamente a un mínimo en tres años, en momentos en que la resistencia de los exportadores comenzó a erosionarse.
El PMI oficial de China cayó por debajo de 50 por primera vez desde noviembre, mientras que un sondeo similar de Markit -patrocinado por HSBC- mostró que la economía china se está achicando a su ritmo más acelerado desde marzo del 2009.
Los PMI de HSBC que cubren a otros exportadores importantes de Asia contaron historias similares. El indicador en Corea del Sur se ubicó por debajo de 50 por tercer mes consecutivo y el PMI de Taiwán retrocedió a su nivel más bajo desde noviembre.
Los informes mostraron que los nuevos pedidos están bajo presión mientras crece el temor por la entrada en recesión en la zona euro y los problemas de Estados Unidos para superar cualquier desaceleración económica.
Incluso en India, donde el sector manufacturero se ha expandido sin pausa por más de 13 años, los nuevos pedidos de exportación cayeron en agosto a su ritmo más lento desde octubre. La actividad fabril de Indonesia también se expandió en agosto, pero las nuevas órdenes de exportación cayeron por quinto mes consecutivo.
El PMI de China reforzó la idea de que el ritmo de crecimiento en la segunda mayor economía del mundo se está debilitando. El peor de los temores entre los industriales es la desaceleración de los nuevos pedidos a medida que la demanda escasea, particularmente desde la zona euro.
Pekín está tomando lo que describe como una postura política "prudente" para respaldar su economía, por temor a reactivar riesgos en el sector inmobiliario y de inflación.
China recortó las tasas de interés en junio y julio y ha estado inyectando liquidez en los mercados monetarios para aliviar las condiciones crediticias para apoyar a la economía después de que registró un sexto trimestre consecutivo de crecimiento más lento en el periodo abril-junio.
Los últimos datos generan dudas sobre si Pekín ha hecho lo suficiente para evitar que la desaceleración en el ritmo de crecimiento se extienda a un séptimo trimestre.
"Las autoridades parecen estar llevando adelante un experimento político riesgoso para ver cuán bien puede mantenerse la economía sin ninguna dosis de estímulo grande", dijo Wei Yao, economista de Societe Generale.
"Aunque creemos que es algo bueno que el umbral de dolor de Pekín sea bastante alto, este enfoque tiende a que se enfrenten riesgos amplios en el corto plazo", añadió.
CUENTA REGRESIVA PARA EL BCE
Después de haberse contraído un 0,2 por ciento entre abril y junio, se observa que la economía de la zona euro podría mostrar resultados similares en el trimestre en curso, sin que se espere crecimiento hasta el inicio del próximo año.
En su batalla por apoyar una economía devastada por una crisis de deuda que ya se extiende por dos años y medio, se espera que el Banco Central Europeo (BCE) recorte las tasas de interés a un nuevo mínimo de un 0,5 por ciento, ya sea el jueves o el próximo mes.
"El panorama para la economía de la zona euro se mantiene extremadamente complicado. Por ello, será bastante fácil de justificar un recorte de la tasa al 0,5 por ciento", dijo Annalisa Piazza de Newedge Strategy.
La inflación en el bloque se aceleró más de lo esperado en agosto, según datos divulgados el viernes, un factor que podría desalentar el BCE a actuar esta semana, pero la encuesta PMI mostró que las fábricas habían reducido los precios de sus productos por tercer mes consecutivo.