Mueren en Colombia dos jefes de FARC antes de negociación de paz
Bogotá, Reuters
Dos jefes guerrilleros, incluido un familiar de uno de los máximos comandantes de las FARC, murieron el jueves en un bombardeo en una zona selvática de Colombia, en una nueva demostración de que la ofensiva militar contra la insurgencia continúa pese a una negociación de paz.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, informó que Efrayn González Ruiz, comandante de los frentes 35 y 37 de las izquierdistas Fuerzas Amadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y Jonathan Lascarro, quien dirigía una compañía móvil del grupo guerrillero, murieron cerca al municipio de El Bagre, en el departamento de Antioquia.
El funcionario dijo que Lascarro era sobrino de alias Pastor Alape, uno de los siete integrantes del secretariado de las FARC, el máximo órgano de dirección política y militar del grupo rebelde activo más antiguo del hemisferio.
Además de González y Lascarro, en el bombardeo murieron otros seis guerrilleros, cinco más fueron capturados y uno se entregó a las tropas.
"La Fuerza Pública tendrá que seguir haciendo los esfuerzos, con todo el compromiso, para perseguir a todas las organizaciones criminales que hayan actuado contra el pueblo colombiano, eso es un deber constitucional y en la instrucción del presidente", dijo el ministro de Defensa.
A comienzos de septiembre, Alias "Danilo García", un líder guerrillero cercano a Rodrigo Londoño, alias "Timochenko", murió en un bombardeo en el noroeste del país.
Las operaciones militares contra la guerrilla continúan, pese al anuncio del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y de las FARC de iniciar en octubre próximo una negociación de paz para buscar poner fin al conflicto interno de casi cinco décadas.
La negociación de paz no considera un cese al fuego, por lo que analistas y el propio Gobierno temen un aumento de los ataques de la guerrilla y de la violencia.
La última negociación de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC, que cuentan con unos 8.000 combatientes, se realizó durante la presidencia del conservador Andrés Pastrana y se extendió entre 1999 y el 2002, pero fracasó por la intensidad de la ofensiva militar y los secuestros del grupo rebelde.
Dos jefes guerrilleros, incluido un familiar de uno de los máximos comandantes de las FARC, murieron el jueves en un bombardeo en una zona selvática de Colombia, en una nueva demostración de que la ofensiva militar contra la insurgencia continúa pese a una negociación de paz.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, informó que Efrayn González Ruiz, comandante de los frentes 35 y 37 de las izquierdistas Fuerzas Amadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y Jonathan Lascarro, quien dirigía una compañía móvil del grupo guerrillero, murieron cerca al municipio de El Bagre, en el departamento de Antioquia.
El funcionario dijo que Lascarro era sobrino de alias Pastor Alape, uno de los siete integrantes del secretariado de las FARC, el máximo órgano de dirección política y militar del grupo rebelde activo más antiguo del hemisferio.
Además de González y Lascarro, en el bombardeo murieron otros seis guerrilleros, cinco más fueron capturados y uno se entregó a las tropas.
"La Fuerza Pública tendrá que seguir haciendo los esfuerzos, con todo el compromiso, para perseguir a todas las organizaciones criminales que hayan actuado contra el pueblo colombiano, eso es un deber constitucional y en la instrucción del presidente", dijo el ministro de Defensa.
A comienzos de septiembre, Alias "Danilo García", un líder guerrillero cercano a Rodrigo Londoño, alias "Timochenko", murió en un bombardeo en el noroeste del país.
Las operaciones militares contra la guerrilla continúan, pese al anuncio del Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y de las FARC de iniciar en octubre próximo una negociación de paz para buscar poner fin al conflicto interno de casi cinco décadas.
La negociación de paz no considera un cese al fuego, por lo que analistas y el propio Gobierno temen un aumento de los ataques de la guerrilla y de la violencia.
La última negociación de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC, que cuentan con unos 8.000 combatientes, se realizó durante la presidencia del conservador Andrés Pastrana y se extendió entre 1999 y el 2002, pero fracasó por la intensidad de la ofensiva militar y los secuestros del grupo rebelde.