Le Pen defiende la prohibición de llevar velo en espacios públicos en Francia
París, EP
La líder del ultraderechista Frente Nacional, Marine Le Pen, se ha mostrado partidaria de que se prohíba el uso del velo islámico pero también de la 'kippa' judía en las calles de Francia, al tiempo que ha prometido que si gobernara expulsaría del país a "todos los integristas extranjeros".
En una entrevista concedida al diario 'Le Monde', Le Pen ha defendido la prohibición de llevar velo "en los transportes, en las tiendas, en la calle". "Es evidente que si se suprime el velo, se suprime la 'kippa' en el espacio público", ha agregado.
En cuanto a la polémica por la publicación de caricaturas de Mahoma por parte del semanario satírico 'Charlie Hebdo', que ha provocado protestas de la comunidad musulmana en Francia, Le Pen ha defendido que "no hay negociación posible" ya que "cada vez que se ha negociado, reculado, se ha preparado el terreno a los acontecimientos que sacuden el mundo hoy en día".
"O bien decimos que la libertad de expresión existe con las reservas impuestas por la ley, o bien se vuelve a imponer la censura sobre internet, se someten los periódicos a una lectura previa del Gobierno, se restablece el delito de blasfemia", ha subrayado la política ultraderechista.
Para la líder del Frente Popular, "el laicismo es un valor no negociable, como la libertad", y "cada vez que lo hemos dejado debilitarse, se ha creado el terreno para reivindicaciones nuevas" en materia religiosa como poder rezar en las calles o la creación de mezquitas.
En cuanto a las últimas caricaturas publicadas, ha subrayado que "la libertad de expresión, de la que depende la libertad de prensa, no se negocia", si bien ha subrayado que su límite es "la difamación y la injuria".
Le Pen ha criticado que en la clase política francesa hay una "indignación de geometría variable" que lleva a condenar cualquier profanación a una mezquita o un símbolo musulmán y a que "no haya ni una sola línea" cuando las profanaciones son contra lugares de culto o tumbas católicas, que representan, según ella, el 95 por ciento de los casos.
Por otra parte, ha asegurado que si llegara al poder "pondría en la puerta a todos los integristas extranjeros" que hay en Francia, a los que "conocemos muy bien".
La líder del ultraderechista Frente Nacional, Marine Le Pen, se ha mostrado partidaria de que se prohíba el uso del velo islámico pero también de la 'kippa' judía en las calles de Francia, al tiempo que ha prometido que si gobernara expulsaría del país a "todos los integristas extranjeros".
En una entrevista concedida al diario 'Le Monde', Le Pen ha defendido la prohibición de llevar velo "en los transportes, en las tiendas, en la calle". "Es evidente que si se suprime el velo, se suprime la 'kippa' en el espacio público", ha agregado.
En cuanto a la polémica por la publicación de caricaturas de Mahoma por parte del semanario satírico 'Charlie Hebdo', que ha provocado protestas de la comunidad musulmana en Francia, Le Pen ha defendido que "no hay negociación posible" ya que "cada vez que se ha negociado, reculado, se ha preparado el terreno a los acontecimientos que sacuden el mundo hoy en día".
"O bien decimos que la libertad de expresión existe con las reservas impuestas por la ley, o bien se vuelve a imponer la censura sobre internet, se someten los periódicos a una lectura previa del Gobierno, se restablece el delito de blasfemia", ha subrayado la política ultraderechista.
Para la líder del Frente Popular, "el laicismo es un valor no negociable, como la libertad", y "cada vez que lo hemos dejado debilitarse, se ha creado el terreno para reivindicaciones nuevas" en materia religiosa como poder rezar en las calles o la creación de mezquitas.
En cuanto a las últimas caricaturas publicadas, ha subrayado que "la libertad de expresión, de la que depende la libertad de prensa, no se negocia", si bien ha subrayado que su límite es "la difamación y la injuria".
Le Pen ha criticado que en la clase política francesa hay una "indignación de geometría variable" que lleva a condenar cualquier profanación a una mezquita o un símbolo musulmán y a que "no haya ni una sola línea" cuando las profanaciones son contra lugares de culto o tumbas católicas, que representan, según ella, el 95 por ciento de los casos.
Por otra parte, ha asegurado que si llegara al poder "pondría en la puerta a todos los integristas extranjeros" que hay en Francia, a los que "conocemos muy bien".