Futbolistas y apagafuegos
Mientras el Real Madrid sigue sin aclarar qué le sucede a Ronaldo y el ruido no cesa por ese silencio institucional, sus compañeros se ven obligados a responder por él y por el club
LADISLAO J. MOÑINO
Madrid, El País
Doce días después de que Cristiano Ronaldo confesará públicamente su “tristeza” tras haberla trasladado previamente al club, el Real Madrid, como institución, sigue sin aclarar a sus socios qué le sucede a su estrella. No se han manifestado ni el presidente, Florentino Pérez ni José Ángel Sánchez, director general, que escucharon directamente los lamentos por boca del futbolista. Tampoco se ha pronunciado José Mourinho, entrenador y mánager general. En esta última función se incluyen las relaciones de los futbolistas con el club y se desconoce si Ronaldo obró con el consentimiento de Mourinho o si se saltó el organigrama.
Al calor de ese silencio institucional, el club, intencionadamente o no, no ha logrado apagar el ruido mediático que aún generan esas palabras de su jugador bandera, cuyos comunicados, desmintiendo que su estado de ánimo tenga que ver con aspectos contractuales, no han clarificado el porqué de su bajo estado anímico.
Una de las quejas que aireaba Mourinho en los días de su enfrentamiento con el ex director general Jorge Valdano era precisamente la existencia de una estructura añeja, ministerial y paquidérmica, que impedía al Real Madrid desenvolverse en los parámetros que demanda el siglo XXI. Despejado Valdano, el club no ha sido capaz de frenar y evitar la crecida en los medios y en la calle de un asunto que deja en un segundo plano la actualidad deportiva del equipo a un día de jugar en Sevilla y a cuatro del complicado estreno en la Liga de Campeones ante el Manchester City. En esta última cita, Cristiano comparecerá por primera vez ante el madridismo, que aún no sabe si tiene que perdonar y aplaudir, como si nada hubiera sucedido, a un futbolista que demanda un contrato más suculento o un mayor apoyo propagandístico institucional y del vestuario en su lucha por los premios individuales.
Los principales perjudicados de esa ausencia de respuestas por parte de la cabeza del organigrama institucional están siendo los propios compañeros de Cristiano, que se ven obligados a responder a las constantes baterías de preguntas de los periodistas cada vez que comparecen en público. Ayer, sin ir más lejos, durante dos actos publicitarios en los que intervinieron el capitán Iker Casillas, Arbeloa y Xabi Alonso, las preguntas sobre la tristeza de su compañero monopolizaron sus comparecencias. Alguno, incluso masculló entre dientes su malestar por el monotema en el que se ha convertido el asunto y la insistencia de la prensa. Mientras el club calla, son sus jugadores los que tratan de apagar como buenamente pueden un incendio que ellos no provocaron y que la estructura de la entidad ha sido incapaz de sofocar hasta el momento.
En ese ejercicio de apagafuegos al que se ven obligados sus compañeros, incluso se genera más confusión como sucedió con la primera intervención de Xabi Alonso. “Los protagonistas ya lo han zanjado, hay que dar normalidad a la situación, centrarse en el partido de Sevilla y en la Champions. Por lo tanto, cuanto más comunicación mucho mejor para todos, y la ha habido entre los afectados”, dijo el mediocentro tolosarra. De esa respuesta se podía interpretar que había existido una reunión de Cristiano con Marcelo, cuya relación se ha enfriado, o con los capitanes. A la pregunta sobre quiénes eran esos protagonistas que habían “zanjado” ya el asunto, Alonso ya generalizó: “No hubo reunión, sino que cuando llegamos de la selección nos saludamos, nos preguntamos qué tal les había ido, qué tal estaban ante el partido de Sevilla... En ese sentido todo fue muy cotidiano como suele suceder siempre. Con total naturalidad se habló del tema”. “Yo llegué al vestuario y no hubo ninguna reunión, entre otras cosas porque no creo que hubiera un motivo para tenerla”, aclaró posteriormente Casillas. Cuando Arbeloa y Alonso aseguraron que le darían el Balón de Oro se les inquirió por si su contestación respondía a consignas. “No hay consignas, ni le hacemos la pelota a Cristiano”.
Por la tarde, Florentino Pérez coincidió con Cristiano en la sesión de la foto oficial. En las imágenes que el club colgó en su web no aparecen juntos presidente y estrella. Un directivo aseguró a última hora de la noche que durante el día de ayer no hubo encuentro alguno en privado entre el portugués y el presidente.
El Madrid supera los 500 millones de ingresos
Mientras la mayoría de clubes profesionales se las ven y se las desean a la hora de cerrar sus ejercicios económicos, el Real Madrid ha cerrado sus cuentas de la temporada 2011/2012 superando la barrera de los 500 millones de ingresos, en concreto 514, un 7% más que en el año anterior, la cantidad más alta de cualquier institución deportiva del mundo. La contribución de los socios, en concepto de cuota y abono, representa un 9,5% de la cifra total de ingresos. El beneficio neto asciende a 24,2 millones de euros, un 23,3% menos que el ejercicio pasado.
Para el presupuesto de la temporada actual, el club blanco contempla alcanzar unos ingresos de 516,6 millones de euros y la obtención de un beneficio neto de 24,4 millones de euros.
LADISLAO J. MOÑINO
Madrid, El País
Doce días después de que Cristiano Ronaldo confesará públicamente su “tristeza” tras haberla trasladado previamente al club, el Real Madrid, como institución, sigue sin aclarar a sus socios qué le sucede a su estrella. No se han manifestado ni el presidente, Florentino Pérez ni José Ángel Sánchez, director general, que escucharon directamente los lamentos por boca del futbolista. Tampoco se ha pronunciado José Mourinho, entrenador y mánager general. En esta última función se incluyen las relaciones de los futbolistas con el club y se desconoce si Ronaldo obró con el consentimiento de Mourinho o si se saltó el organigrama.
Al calor de ese silencio institucional, el club, intencionadamente o no, no ha logrado apagar el ruido mediático que aún generan esas palabras de su jugador bandera, cuyos comunicados, desmintiendo que su estado de ánimo tenga que ver con aspectos contractuales, no han clarificado el porqué de su bajo estado anímico.
Una de las quejas que aireaba Mourinho en los días de su enfrentamiento con el ex director general Jorge Valdano era precisamente la existencia de una estructura añeja, ministerial y paquidérmica, que impedía al Real Madrid desenvolverse en los parámetros que demanda el siglo XXI. Despejado Valdano, el club no ha sido capaz de frenar y evitar la crecida en los medios y en la calle de un asunto que deja en un segundo plano la actualidad deportiva del equipo a un día de jugar en Sevilla y a cuatro del complicado estreno en la Liga de Campeones ante el Manchester City. En esta última cita, Cristiano comparecerá por primera vez ante el madridismo, que aún no sabe si tiene que perdonar y aplaudir, como si nada hubiera sucedido, a un futbolista que demanda un contrato más suculento o un mayor apoyo propagandístico institucional y del vestuario en su lucha por los premios individuales.
Los principales perjudicados de esa ausencia de respuestas por parte de la cabeza del organigrama institucional están siendo los propios compañeros de Cristiano, que se ven obligados a responder a las constantes baterías de preguntas de los periodistas cada vez que comparecen en público. Ayer, sin ir más lejos, durante dos actos publicitarios en los que intervinieron el capitán Iker Casillas, Arbeloa y Xabi Alonso, las preguntas sobre la tristeza de su compañero monopolizaron sus comparecencias. Alguno, incluso masculló entre dientes su malestar por el monotema en el que se ha convertido el asunto y la insistencia de la prensa. Mientras el club calla, son sus jugadores los que tratan de apagar como buenamente pueden un incendio que ellos no provocaron y que la estructura de la entidad ha sido incapaz de sofocar hasta el momento.
En ese ejercicio de apagafuegos al que se ven obligados sus compañeros, incluso se genera más confusión como sucedió con la primera intervención de Xabi Alonso. “Los protagonistas ya lo han zanjado, hay que dar normalidad a la situación, centrarse en el partido de Sevilla y en la Champions. Por lo tanto, cuanto más comunicación mucho mejor para todos, y la ha habido entre los afectados”, dijo el mediocentro tolosarra. De esa respuesta se podía interpretar que había existido una reunión de Cristiano con Marcelo, cuya relación se ha enfriado, o con los capitanes. A la pregunta sobre quiénes eran esos protagonistas que habían “zanjado” ya el asunto, Alonso ya generalizó: “No hubo reunión, sino que cuando llegamos de la selección nos saludamos, nos preguntamos qué tal les había ido, qué tal estaban ante el partido de Sevilla... En ese sentido todo fue muy cotidiano como suele suceder siempre. Con total naturalidad se habló del tema”. “Yo llegué al vestuario y no hubo ninguna reunión, entre otras cosas porque no creo que hubiera un motivo para tenerla”, aclaró posteriormente Casillas. Cuando Arbeloa y Alonso aseguraron que le darían el Balón de Oro se les inquirió por si su contestación respondía a consignas. “No hay consignas, ni le hacemos la pelota a Cristiano”.
Por la tarde, Florentino Pérez coincidió con Cristiano en la sesión de la foto oficial. En las imágenes que el club colgó en su web no aparecen juntos presidente y estrella. Un directivo aseguró a última hora de la noche que durante el día de ayer no hubo encuentro alguno en privado entre el portugués y el presidente.
El Madrid supera los 500 millones de ingresos
Mientras la mayoría de clubes profesionales se las ven y se las desean a la hora de cerrar sus ejercicios económicos, el Real Madrid ha cerrado sus cuentas de la temporada 2011/2012 superando la barrera de los 500 millones de ingresos, en concreto 514, un 7% más que en el año anterior, la cantidad más alta de cualquier institución deportiva del mundo. La contribución de los socios, en concepto de cuota y abono, representa un 9,5% de la cifra total de ingresos. El beneficio neto asciende a 24,2 millones de euros, un 23,3% menos que el ejercicio pasado.
Para el presupuesto de la temporada actual, el club blanco contempla alcanzar unos ingresos de 516,6 millones de euros y la obtención de un beneficio neto de 24,4 millones de euros.