Tormenta Ernesto se debilita camino a Golfo de México

Chetumal, Reuters
La tormenta tropical Ernesto, que descargó torrenciales lluvias y obligó a evacuar a unas 2,500 personas en su paso por la península mexicana de Yucatán, se dirigía debilitada el miércoles al Golfo de México, donde los tres grandes puertos petroleros fueron cerrados.

Ernesto ingresó a la Bahía de Campeche, donde la petrolera estatal Pemex tiene instalaciones portuarias y plataformas mar adentro, pero ya con pocas posibilidades de volver a convertirse en huracán, según un reporte del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos.

La tormenta llevaba vientos máximos sostenidos de 75 kilómetros por hora (kph) y se ubicaba a 95 kilómetros al este de Ciudad del Carmen, en el estado de Campeche, dijo el organismo.

En esta región, la tormenta había dejado poblaciones sin electricidad y derribado árboles, mientras provocaba fuertes lluvias también en los estados cercanos de Tabasco y Chiapas.

Los puertos de Dos Bocas, Cayo Arcas y Coatzacoalcos, localizados en el Golfo de México y a través de los cuales el país embarca la mayor parte de su producción de crudo, fueron cerrados a la navegación el miércoles debido al mal clima, informó la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).

Pese al debilitamiento de la tormenta, funcionarios de Protección Civil dijeron que en Veracruz se habían habilitado albergues en caso de inundaciones, debido a que el estado tiene varios ríos muy caudalosos que se desbordan en pocas horas.

CANCUN SIN DAÑOS

Ernesto tocó tierra la noche del martes como huracán de categoría 1 cerca del poblado de Mahahual, donde cientos de turistas fueron evacuados y trasladados a Chetumal, capital del estado de Quintana Roo.

Un total de 2,500 personas, entre pobladores y turistas, fueron desalojados y pasaron la noche en albergues, incluyendo el centro turístico de Tulum y la población de Felipe Carrillo Puerto, Chetumal y otras más pequeñas, dijo el portavoz del gobierno estatal, Rangel Rosado.

Ester Mendoza, de 78 años, que pasó la noche con toda su familia en una escuela de Chetumal convertida en albergue, contó: "Pasamos con miedo, (hubo) vientos muy fuertes toda la noche".

"Me imagino que hubo daños (en la casa). No todos tenemos casas buenas aquí", agregó.

El famoso balneario de Cancún, ubicado al norte de Quintana Roo, no sufrió daños pero soplaba viento fuerte en la mañana del miércoles y las playas estaban con banderas rojas debido al fuerte oleaje.

Se realizaban allí labores de limpieza para retirar algunos árboles y palmeras caídas.

Un portavoz de Pemex dijo que las instalaciones de la compañía operaban con normalidad. Entre ellas se encuentran las refinerías de Minatitlán y Madero, y los yacimientos Cantarell y Ku Maloob Zaap.

Ernesto es el segundo de la temporada de huracanes en el Atlántico, que comenzó el 1 de junio y finaliza el 30 de noviembre.

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