La ofensiva del Ejército turco en el sureste del país deja 21 miembros del PKK muertos
Diarbakir, EP
El Ejército turco ha matado a cinco rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en respuesta a varios ataqes contra varios edificios oficiales ocurridos en la ciudad turca de Semdinli, lo que eleva a 21 el número de guerrilleros fallecidos por la ofensiva lanzada por el Gobierno en la zona sureste del país.
El PKK atentó este jueves por la tarde contra una comisaría de Policía y oficinas estatales en el centro de Semdinli (provincia de Hakkari) y los militares, en respuesta, mataron a cinco de los presuntos autores de estos ataques, según fuentes oficiales.
Horas antes, 16 milicianos del PKK habían muerto también a manos del Ejército turco, que ha lanzado una ofensiva en represalia por el ataque con bomba perpetrado ayer, miércoles, contra un convoy militar en Semdinli. Dicho atentado provocó la muerte de cinco soldados.
En el marco de estas agresiones cruzadas, supuestos miembros del PKK atacaron de forma coordinada dos puestos militares en la zona y causaron la muerte de al menos un soldado.
El comandante de las tropas terrestres, general Hayri Kivrikoglu, ha visitado este jueves Hakkari, desde donde ha subrayado que la ofensiva contra el PKK seguirá "sin pausa". "Siempre estamos junto a nuestro pueblo", ha apostillado, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Anatolia.
Más de 40.000 personas han muerto desde que comenzó el conflicto entre el PKK y el Gobierno, hace 28 años. La guerrilla reivindica una mayor autonomía política y derechos para los 14 millones de kurdos que se calcula viven en Turquía.
Desde junio del año pasado, alrededor de 800 personas han muerto por la violencia, incluidos 500 miembros del PKK, más de 200 policías y militares y unos 85 civiles, según los cálculos del 'think tank' International Crisis Group.
El Ejército turco ha matado a cinco rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en respuesta a varios ataqes contra varios edificios oficiales ocurridos en la ciudad turca de Semdinli, lo que eleva a 21 el número de guerrilleros fallecidos por la ofensiva lanzada por el Gobierno en la zona sureste del país.
El PKK atentó este jueves por la tarde contra una comisaría de Policía y oficinas estatales en el centro de Semdinli (provincia de Hakkari) y los militares, en respuesta, mataron a cinco de los presuntos autores de estos ataques, según fuentes oficiales.
Horas antes, 16 milicianos del PKK habían muerto también a manos del Ejército turco, que ha lanzado una ofensiva en represalia por el ataque con bomba perpetrado ayer, miércoles, contra un convoy militar en Semdinli. Dicho atentado provocó la muerte de cinco soldados.
En el marco de estas agresiones cruzadas, supuestos miembros del PKK atacaron de forma coordinada dos puestos militares en la zona y causaron la muerte de al menos un soldado.
El comandante de las tropas terrestres, general Hayri Kivrikoglu, ha visitado este jueves Hakkari, desde donde ha subrayado que la ofensiva contra el PKK seguirá "sin pausa". "Siempre estamos junto a nuestro pueblo", ha apostillado, en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Anatolia.
Más de 40.000 personas han muerto desde que comenzó el conflicto entre el PKK y el Gobierno, hace 28 años. La guerrilla reivindica una mayor autonomía política y derechos para los 14 millones de kurdos que se calcula viven en Turquía.
Desde junio del año pasado, alrededor de 800 personas han muerto por la violencia, incluidos 500 miembros del PKK, más de 200 policías y militares y unos 85 civiles, según los cálculos del 'think tank' International Crisis Group.