Hockey masculino: Alemania evita el doblete de Holanda

Londres, EFE
Alemania repitió el oro de Pekín 2008 y evitó el primer doblete en el torneo olímpico de hockey al derrotar a Holanda en la final masculina (1-2) de Londres, donde Australia volvió a colgarse el bronce, España acabó en sexta posición y "Las Leonas" argentinas sumaron su segunda plata en la competición de féminas.

Gran Bretaña, anfitrión, cerró sus Juegos con un cuarto puesto que mejora el quinto de hace cuatro años, aunque prolonga la sequía de medallas que vive desde el oro de Seúl'88. Sí celebró el tercer puesto que las chicas lograron ante Nueva Zelanda, la revelación del cuadro femenino, que por primera vez tuvo opción de medalla.

En el cuadro masculino Alemania fue superior en el choque por el oro, pese a tener más problemas que Holanda para entrar en semifinales.

Con tres victorias, un empate y una derrota, los germanos -subcampeones del mundo y campeones de Europa- se deshicieron de Australia -campeona mundial- en semifinales y quitaron el oro a Holanda con dos goles de Jan Philipp Rabente, el héroe de la final.

Los holandeses, impecables en la primera fase -cinco victorias de cinco- endosaron un 9-2 a Gran Bretaña para estar en la final, pero se quedaron sin doblete y regresan con su cuarta plata.

Australia se volvió a llevar el bronce, pero fue un premio de consolación para un equipo que buscaba la "triple corona" y que acabó con un 3-1 sobre Gran Bretaña. Los británicos buscan su espacio entre los grandes y condicionaron en gran parte la suerte de España, en su contra nada más empezar los Juegos.

En el primer partido con Pakistán (1-1) Santi Freixa, el capitán, se fracturó el cúbito y en el segundo con australia (0-5) a Pol Amat, en sus quintos Juegos, se le salió un hombro. España perdió algo más que dos jugadores.

El equipo, que quería demostrar en Londres que el segundo puesto del "Champions" 2011 no fue casualidad tras el quinto y el sexto del Mundial 2010 y el Europeo 2011, tuvo todo en contra.

Tampoco ayudó el interés mediático que despertó la vocación religiosa de Carlos Balbé, ni las preferencias de Alex Fábregas, olímpico desde 2004, por "Els Segadors" en vez del himno nacional, publicadas por un diario catalán en plenos Juegos.

Cumplida la profecía de jugarse las semifinales con Gran Bretaña, los locales llegaron al choque con necesidad de un punto. Y eso fue lo que se llevaron con un controvertido empate (1-1) por la actuación del árbitro sudafricano John Wright, muy protestada por España.

Wright no volvió a pitar, pero España no tuvo semifinal y pinchó con Bélgica para acabar en un sexto puesto como en Montreal'76 y México'68 que abre interrogantes sobre el futuro de un equipo con jugadores que llevan tres juegos y que no estará en el Trofeo de Campeones por motivos económicos.

En féminas Holanda repitió el oro de Pekín y volvió a privar a "Las Leonas" de su primer oro, metal que habría completado su triple corona y que Luciana Aymar no se podrá colgar.

Lucha, siete veces mejor jugadora del mundo, jugó "posiblemente" su último partido en la final contra Holanda (2-0), la segunda de su carrera después de la de Sydney 2000.

El bronce se lo colgó Gran Bretaña, el anfitrión apeado de la final por Argentina, que superó en el partido decisivo a Nueva Zelanda. Las neozelandesas fueron la sorpresa del torneo con una gran primera fase en la que superaron a Alemania y Australia para entrar por primera vez en la lucha por medalla.

Australia se llevó el quinto puesto por delante de China, subcampeón en Pekín, y Alemania terminó en la sexta plaza, muy lejos de las aspiraciones del subcampeón de Europa.

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