El húngaro Pars se lleva su primer gran título de martillo
Londres, EFE
El húngaro Kristztian Pars encontró por fin ese gran día para coronarse nuevo campeón olímpico de lanzamiento de martillo en Londres 2012 con una marca de 80,59 metros. Pars, que había sido quinto en Atenas''04 y cuarto en Pekín''08, el pasado año se proclamó subcampeón mundial en Daegu, pero esta temporada ha alcanzado la cima tanto en los Europeos de Helsinki como en el Olímpico londinense, donde destronó al defensor del título, el esloveno Primoz Kozmus, y al campeón universal, el japonés Koji Murofushi. Ha sido quizá el más regular y más consistente lanzador de martillo durante la temporada e incluso fue el mejor en la clasificación.
Como estaba previsto, este trío se jugó el podio. Pars, que ya mandaba desde el primer tiro, sentenció la final en el tercero con los 80,59, porque Kozmus solo pudo alcanzar los 79,36 metros para colgarse la plata y Murofushi los 78,71 parta adjudicarse el bronce.
Para ambos era su mejor marca de la temporada, pero les fue insuficiente para apear del oro al lanzador húngaro, de treinta años y que recupera el triunfo en esta prueba para su país, que no lo lograba desde Gyula Zsivotzky en México''68. El ucraniano Olexiy Sokyrskiyy por momentos soñó con medalla, pero se quedó con la cuarta plaza con 78,25 y el ruso Kirill Ikonnikov fue quinto con 77,86.
El húngaro Kristztian Pars encontró por fin ese gran día para coronarse nuevo campeón olímpico de lanzamiento de martillo en Londres 2012 con una marca de 80,59 metros. Pars, que había sido quinto en Atenas''04 y cuarto en Pekín''08, el pasado año se proclamó subcampeón mundial en Daegu, pero esta temporada ha alcanzado la cima tanto en los Europeos de Helsinki como en el Olímpico londinense, donde destronó al defensor del título, el esloveno Primoz Kozmus, y al campeón universal, el japonés Koji Murofushi. Ha sido quizá el más regular y más consistente lanzador de martillo durante la temporada e incluso fue el mejor en la clasificación.
Como estaba previsto, este trío se jugó el podio. Pars, que ya mandaba desde el primer tiro, sentenció la final en el tercero con los 80,59, porque Kozmus solo pudo alcanzar los 79,36 metros para colgarse la plata y Murofushi los 78,71 parta adjudicarse el bronce.
Para ambos era su mejor marca de la temporada, pero les fue insuficiente para apear del oro al lanzador húngaro, de treinta años y que recupera el triunfo en esta prueba para su país, que no lo lograba desde Gyula Zsivotzky en México''68. El ucraniano Olexiy Sokyrskiyy por momentos soñó con medalla, pero se quedó con la cuarta plaza con 78,25 y el ruso Kirill Ikonnikov fue quinto con 77,86.