Bomberos rescatan a un perro que estuvo 5 días sin alimentos
La Paz, ANF
Un pequeño perro que permaneció sin agua ni comida durante los últimos cinco días abandonado en un barranco de la zona de Vino Tinto, fue rescatado este domingo por un equipo de la Unidad de Bomberos Antofagasta de La Paz.
Al mando del teniente Jorge Ramírez, la Brigada Especial de Rescate (BERSA), acudió en auxilio del can de marrón pelaje y luego de realizar acciones de descenso en cuerdas, se consiguió alcanzar un pequeño resquicio donde el animal soportó el sol y frío de esta zona montañosa.
Los vecinos del lugar que llamaron a Bomberos, presumen que cayó de manera accidental hasta un sitio inaccesible y sólo sus aullidos nocturnos alertaron de su presencia.
El teniente Ramírez y el suboficial segundo, Walter Acarapi, ambos experimentados rescatistas, descendieron al profundo barranco usando cuerdas hasta hallar al debilitado y deshidratado animal.
Sin mayor resistencia, el can de raza criolla permitió su traslado desde la profundidad del accidentado sitio rodeado de árboles de pino, y recibió de sus rescatistas los primeros sorbos de agua.
Aparentemente sin propietario y en estado de abandono, fue recibido por una humilde mujer en su hogar de adobe de barro y calamina, con la promesa de ayudarlo en su recuperación.
Un pequeño perro que permaneció sin agua ni comida durante los últimos cinco días abandonado en un barranco de la zona de Vino Tinto, fue rescatado este domingo por un equipo de la Unidad de Bomberos Antofagasta de La Paz.
Al mando del teniente Jorge Ramírez, la Brigada Especial de Rescate (BERSA), acudió en auxilio del can de marrón pelaje y luego de realizar acciones de descenso en cuerdas, se consiguió alcanzar un pequeño resquicio donde el animal soportó el sol y frío de esta zona montañosa.
Los vecinos del lugar que llamaron a Bomberos, presumen que cayó de manera accidental hasta un sitio inaccesible y sólo sus aullidos nocturnos alertaron de su presencia.
El teniente Ramírez y el suboficial segundo, Walter Acarapi, ambos experimentados rescatistas, descendieron al profundo barranco usando cuerdas hasta hallar al debilitado y deshidratado animal.
Sin mayor resistencia, el can de raza criolla permitió su traslado desde la profundidad del accidentado sitio rodeado de árboles de pino, y recibió de sus rescatistas los primeros sorbos de agua.
Aparentemente sin propietario y en estado de abandono, fue recibido por una humilde mujer en su hogar de adobe de barro y calamina, con la promesa de ayudarlo en su recuperación.