Ashthon deplora las "escandalosas y aborrecibles" palabras vertidas por Irán contra Israel

Bruselas, Reuters
La Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashthon, ha deplorado las "escandalosas y aborrecibles" declaraciones realizadas por el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, que calificó a Israel como un "tumor cancerígeno" sin futuro en Oriente Próximo, y por el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei.

En un comunicado, un portavoz de la jefa de la diplomacia europea "condena enérgicamente las escandalosas y aborrecibles declaraciones amenazando la existencia de Israel por parte del líder supremo iraní y el presidente de Irán".

Asthon insta a Irán a que desempeñe "un papel constructivo" en la región y a que sus líderes contribuyan a "la rebaja de las tensiones y no las insuflan". Además, censura cualquier intento de cuestionar el derecho de existencia de Israel.

El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, también condenó este viernes las últimas declaraciones vertidas por Jamenei y Ahmadineyad, contra Israel, tildándolas de "ofensivas e inflamatorias".

El jueves, Jamenei afirmó que "el superfluo y falso régimen sionista --en referencia a Israel-- desaparecerá de la geografía mundial y esa tierra islámica retornará a la nación palestina" durante un encuentro con cientos de veteranos de la guerra que enfrentó a Irak e Irán entre 1980 y 1988.

Asimismo, describió la creación del Estado de Israel como "la raíz del mal" en Oriente Próximo. "Si esta conspiración no hubiera tenido lugar, las guerras, divisiones e intervenciones colonialistas no hubieran tenido lugar", valoró, tal y como informó la agencia de noticias iraní Mehr.

Por su parte, Ahmadineyad ha señalado este viernes que no hay lugar para Israel en el futuro de Oriente Próximo. "Salvar la existencia del régimen sionista (Israel) es un compromiso conjunto de los gobiernos occidentales más arrogantes", clamó Ahmadineyad, entre gritos de "muerte a América, muerte a Israel" de la multitud que se agolpaba para escuchar sus palabras.