Los beneficios de Apple suben un 21%, pero decepcionan a Wall Street
-Las ventas del iPhone entre abril y junio fueron menores de lo que esperaban los analistas
-Los títulos de la compañía cayeron un 6% en el parqué neoyorquino
Sandro Pozzi
Nueva York, El País
Esta vez, el ambiente que precedió en el parqué a la presentación de resultados de Apple era más bien sobrio. Hasta el punto de que se esperaba que no cumpliera con las expectativas, algo inusual para una compañía que tiene muy mal acostumbrada a Wall Street. Y así fue. Falló y lo hizo en tres cosas: del lado del beneficio, de los ingresos y de las ventas del iPhone, donde se centró toda la atención a la hora de valor su rendimiento.
Apple cerró el trimestre fiscal con un beneficio neto de 8.800 millones de dólares, tras registrar una ventas en ese periodo de 35.000 millones. Cifras que mejoraron en un 21% las ganancias de hace un un año, cuando registro ventas por valor de 28.600 millones. El problema es que en ambos casos se quedó corta sobre lo anticipado y eso provocó que su títulos cayeran cerca de un 6%.
Los resultados corresponden al tercer trimestre de su ejercicio fiscal 2012, que concluye a final de septiembre. El problema mayor está en el iPhone. Se vendieron 26 millones de unidades del dispositivo, lo que representa un incremento del 28% comparando con los resultados de hace un año. Entonces, se vendieron 20,34 millones de unidades del iPhone, lo que representó un incremento del 142% comparado con el ejercicio 2010.
La moderación en el crecimiento es destacada y marca una clara diferencia entre la era de Steve Jobs y la de su sucesor Tim Cook. Los números se tornan negativos cuando se hace la comparación con los 35,1 millones de dispositivos vendidos en el segundo trimestre. Los analistas lo anticipaban, al poner el listón en 28 millones de unidades para el periodo que acabó en junio.
La activación de estas terminales por parte de Verizon Wireless y AT&T sirvieron de anticipo, al caer un 15% en los últimos tres meses. El crecimiento del iPad ayudó a compensar lo que no llegó por vía del iPhone. Apple vendió 17 millones de tabletas, un 84% más que hace un año. El dispositivo se abre camino con rapidez en el mundo de las empresas y prueba fortuna en China. Respecto a los ordenadores Mac, fueron cuatro millones de unidades.
Todo esto se refleja en el rendimiento bursátil de la sociedad. En el último año, las acciones de Apple se movieron en un rango de 353 dólares hasta un máximo de 644 dólares. Ese techo se tocó a mediados de abril, lo que colocó la capitalización bursátil de la tecnológica por encima de los 600.000 millones de dólares, una marca que solo había alcanzado antes Microsoft. Pero desde entonces, el valor progresó con dudas.
Los últimos días las acciones de Apple rondaron los 600 dólares. Tras los resultados bajaron a los 570 dólares la unidad. Aunque se esperaba que cumpliera con las previsiones del mercado y las indicaciones que dio hace tres meses, cada vez se examinan sus números con más cautela por la competencia de Google, Samsung y Amazon, por el efecto de una economía incierta en el consumo y sus futuros dispositivos.
Se espera que Apple lance el nuevo iPhone en septiembre o en octubre. Eso podría estar provocando que potenciales compradores se mantengan al margen hasta conocer el nuevo modelo, lo que inevitablemente podría reducir las ventas de su dispositivo más popular entre los consumidores. Es lo que pasó hace un año, cuando cayeron un 16% antes de lanzarse el iPhone 4S.
Eso, por tanto, no quiere decir que sus clientes estén emigrando hacia los rivales. Aunque también es cierto que el nuevo Samsung está teniendo una gran aceptación entre el público y que la presentación del nuevo iPhone coincidiría en el tiempo con la llegada al mercado del teléfono interactivo de Microsoft, que estrenará el sistema operativo Windows 8.
La semana que viene comienza además en California el juicio que enfrenta a Apple y a Samsung, en la que la estadounidense acusa a los surcoreanos de copiar el diseño de su teléfono y su tableta. Le pide una compensación de 2.525 millones. Por su parte, la asiática alega en su contraataque que es la firma de Cupertino la que está violando sus patentes tecnológicas.
-Los títulos de la compañía cayeron un 6% en el parqué neoyorquino
Sandro Pozzi
Nueva York, El País
Esta vez, el ambiente que precedió en el parqué a la presentación de resultados de Apple era más bien sobrio. Hasta el punto de que se esperaba que no cumpliera con las expectativas, algo inusual para una compañía que tiene muy mal acostumbrada a Wall Street. Y así fue. Falló y lo hizo en tres cosas: del lado del beneficio, de los ingresos y de las ventas del iPhone, donde se centró toda la atención a la hora de valor su rendimiento.
Apple cerró el trimestre fiscal con un beneficio neto de 8.800 millones de dólares, tras registrar una ventas en ese periodo de 35.000 millones. Cifras que mejoraron en un 21% las ganancias de hace un un año, cuando registro ventas por valor de 28.600 millones. El problema es que en ambos casos se quedó corta sobre lo anticipado y eso provocó que su títulos cayeran cerca de un 6%.
Los resultados corresponden al tercer trimestre de su ejercicio fiscal 2012, que concluye a final de septiembre. El problema mayor está en el iPhone. Se vendieron 26 millones de unidades del dispositivo, lo que representa un incremento del 28% comparando con los resultados de hace un año. Entonces, se vendieron 20,34 millones de unidades del iPhone, lo que representó un incremento del 142% comparado con el ejercicio 2010.
La moderación en el crecimiento es destacada y marca una clara diferencia entre la era de Steve Jobs y la de su sucesor Tim Cook. Los números se tornan negativos cuando se hace la comparación con los 35,1 millones de dispositivos vendidos en el segundo trimestre. Los analistas lo anticipaban, al poner el listón en 28 millones de unidades para el periodo que acabó en junio.
La activación de estas terminales por parte de Verizon Wireless y AT&T sirvieron de anticipo, al caer un 15% en los últimos tres meses. El crecimiento del iPad ayudó a compensar lo que no llegó por vía del iPhone. Apple vendió 17 millones de tabletas, un 84% más que hace un año. El dispositivo se abre camino con rapidez en el mundo de las empresas y prueba fortuna en China. Respecto a los ordenadores Mac, fueron cuatro millones de unidades.
Todo esto se refleja en el rendimiento bursátil de la sociedad. En el último año, las acciones de Apple se movieron en un rango de 353 dólares hasta un máximo de 644 dólares. Ese techo se tocó a mediados de abril, lo que colocó la capitalización bursátil de la tecnológica por encima de los 600.000 millones de dólares, una marca que solo había alcanzado antes Microsoft. Pero desde entonces, el valor progresó con dudas.
Los últimos días las acciones de Apple rondaron los 600 dólares. Tras los resultados bajaron a los 570 dólares la unidad. Aunque se esperaba que cumpliera con las previsiones del mercado y las indicaciones que dio hace tres meses, cada vez se examinan sus números con más cautela por la competencia de Google, Samsung y Amazon, por el efecto de una economía incierta en el consumo y sus futuros dispositivos.
Se espera que Apple lance el nuevo iPhone en septiembre o en octubre. Eso podría estar provocando que potenciales compradores se mantengan al margen hasta conocer el nuevo modelo, lo que inevitablemente podría reducir las ventas de su dispositivo más popular entre los consumidores. Es lo que pasó hace un año, cuando cayeron un 16% antes de lanzarse el iPhone 4S.
Eso, por tanto, no quiere decir que sus clientes estén emigrando hacia los rivales. Aunque también es cierto que el nuevo Samsung está teniendo una gran aceptación entre el público y que la presentación del nuevo iPhone coincidiría en el tiempo con la llegada al mercado del teléfono interactivo de Microsoft, que estrenará el sistema operativo Windows 8.
La semana que viene comienza además en California el juicio que enfrenta a Apple y a Samsung, en la que la estadounidense acusa a los surcoreanos de copiar el diseño de su teléfono y su tableta. Le pide una compensación de 2.525 millones. Por su parte, la asiática alega en su contraataque que es la firma de Cupertino la que está violando sus patentes tecnológicas.