El Ejército israelí se prepara para una posible intervención en Siria
Jerusalén, EP
El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, ha señalado que ha dado órdenes al Ejército para que se prepare para una posible intervención militar en Siria en caso de que el Gobierno sirio intente entregar armas al partido-milicia chií libanés Hezbolá, aliado de Damasco.
"He instruido al Ejército para que incremente las preparaciones de Inteligencia y lo todo lo necesario para que, si es necesario, podamos considerar llevar a cabo una operación (militar)", ha dicho Barak durante una entrevista concedida a la cadena de televisión israelí Channel 10.
"Estamos siguiendo (...) la posible transferencia de sistemas avanzados, especialmente misiles antiaéreos o misiles tierra-tierra, pero también existe la posibilidad de la transferencia de armas químicas de Siria a Líbano", ha agregado.
Este ha sido uno de los principales temores expresados por las autoridades israelíes desde el inicio del levantamiento contra el Gobierno de Bashar al Assad, por lo que Tel Aviv ha advertido en varias ocasiones sobre la supuesta posibilidad de que Damasco entregue parte de su armamento a Hezbolá de cara a un ataque futuro contra territorio israelí.
Desde el inicio del conflicto armado en Siria, Hezbolá ha mostrado su apoyo a Damasco, aunque ha solicitado en reiteradas ocasiones a Damasco la introducción de reformas democráticas en el país y el lanzamiento de un proceso de unidad nacional para superar la situación. Sin embargo, en todo momento se ha opuesto a una intervención militar extranjera en el país, al considerar que la situación ha de ser resuelta de forma interna.
El jueves, el Ejército israelí elevó su nivel de alerta y suspendió los permisos de salida de fin de semana a oficiales y soldados a causa de la preocupación de Tel Aviv en torno al recrudecimiento de los combates en Siria.
A finales de abril, el Ejército israelí comenzó a construir un muro en la frontera con Líbano que tendrá algo más de un kilómetro de largo y entre cinco y siete metros de alto con el objetivo de impedir que los disparos que se puedan efectuar desde localidades libanesas alcancen la localidad de Metula (norte de Israel).
El ministro de Defensa de Israel, Ehud Barak, ha señalado que ha dado órdenes al Ejército para que se prepare para una posible intervención militar en Siria en caso de que el Gobierno sirio intente entregar armas al partido-milicia chií libanés Hezbolá, aliado de Damasco.
"He instruido al Ejército para que incremente las preparaciones de Inteligencia y lo todo lo necesario para que, si es necesario, podamos considerar llevar a cabo una operación (militar)", ha dicho Barak durante una entrevista concedida a la cadena de televisión israelí Channel 10.
"Estamos siguiendo (...) la posible transferencia de sistemas avanzados, especialmente misiles antiaéreos o misiles tierra-tierra, pero también existe la posibilidad de la transferencia de armas químicas de Siria a Líbano", ha agregado.
Este ha sido uno de los principales temores expresados por las autoridades israelíes desde el inicio del levantamiento contra el Gobierno de Bashar al Assad, por lo que Tel Aviv ha advertido en varias ocasiones sobre la supuesta posibilidad de que Damasco entregue parte de su armamento a Hezbolá de cara a un ataque futuro contra territorio israelí.
Desde el inicio del conflicto armado en Siria, Hezbolá ha mostrado su apoyo a Damasco, aunque ha solicitado en reiteradas ocasiones a Damasco la introducción de reformas democráticas en el país y el lanzamiento de un proceso de unidad nacional para superar la situación. Sin embargo, en todo momento se ha opuesto a una intervención militar extranjera en el país, al considerar que la situación ha de ser resuelta de forma interna.
El jueves, el Ejército israelí elevó su nivel de alerta y suspendió los permisos de salida de fin de semana a oficiales y soldados a causa de la preocupación de Tel Aviv en torno al recrudecimiento de los combates en Siria.
A finales de abril, el Ejército israelí comenzó a construir un muro en la frontera con Líbano que tendrá algo más de un kilómetro de largo y entre cinco y siete metros de alto con el objetivo de impedir que los disparos que se puedan efectuar desde localidades libanesas alcancen la localidad de Metula (norte de Israel).