Moody's sube la calificación de riesgo de Bolivia con perspectiva estable
La Paz, Abi
La agencia calificadora de riesgo internacional Mood's Investors Service elevó la calificación de Bolivia de B1 a Ba3, con perspectiva estable, porque en cerca de siete años logró un descenso de la deuda, un sólido crecimiento económico, superávit fiscales consecutivos, incremento de la inversión pública y extranjera, además de un importante aumento de las Reservas Internacionales y de las recaudaciones fiscales.
"La calificación otorgada hoy a Bolivia por Moody's (Ba3) tiene un rango similar a la de Standard and Poor's (BB-)", señala una nota de prensa del Ministerio de Economía y Finanzas.
Es la segunda vez, en menos de 30 días, que una calificadora de riesgo internacional eleva la calificación a Bolivia por los logros económicos obtenidos desde 2006.
El pasado 18 de mayo, Standard and Poor's otorgó, por primera vez, al país una calificación de BB- (superior a B ), con perspectiva estable, porque Bolivia redujo el nivel de su deuda externa a 15% respecto del Producto Interno Bruto (PIB) y obtuvo un crecimiento económico sostenido, aumento de los ingresos fiscales y una prudente política monetaria.
"En esta ocasión, Moody's subió la calificación a Bolivia porque los indicadores de la deuda del Estado disminuyeron de manera notoria con respecto al PIB: de 75% (2005) a 31% (2011). Además, por el crecimiento sostenido del Producto Interno Bruto (PIB) real en un promedio de 4,7% en el periodo 2005-2011, un incremento impulsado por un aumento de la inversión pública", sostiene esa nota.
Asimismo, señala que la posición de liquidez externa del país mejoró como resultado del superávit de cuenta corriente a lo largo de nueve años consecutivos y el aumento de la inversión extranjera directa.
También contribuyó al mejoramiento de la calificación, el incremento de las Reservas Internacionales -excluyendo el oro-, que creció de 1.244 millones de dólares (2005) a 9.909 de dólares (2011), monto que provee un importante colchón financiero contra choques externos derivados de bajas en los precios de los materias primas, argumentó el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.
La agencia calificadora de riesgo internacional Mood's Investors Service elevó la calificación de Bolivia de B1 a Ba3, con perspectiva estable, porque en cerca de siete años logró un descenso de la deuda, un sólido crecimiento económico, superávit fiscales consecutivos, incremento de la inversión pública y extranjera, además de un importante aumento de las Reservas Internacionales y de las recaudaciones fiscales.
"La calificación otorgada hoy a Bolivia por Moody's (Ba3) tiene un rango similar a la de Standard and Poor's (BB-)", señala una nota de prensa del Ministerio de Economía y Finanzas.
Es la segunda vez, en menos de 30 días, que una calificadora de riesgo internacional eleva la calificación a Bolivia por los logros económicos obtenidos desde 2006.
El pasado 18 de mayo, Standard and Poor's otorgó, por primera vez, al país una calificación de BB- (superior a B ), con perspectiva estable, porque Bolivia redujo el nivel de su deuda externa a 15% respecto del Producto Interno Bruto (PIB) y obtuvo un crecimiento económico sostenido, aumento de los ingresos fiscales y una prudente política monetaria.
"En esta ocasión, Moody's subió la calificación a Bolivia porque los indicadores de la deuda del Estado disminuyeron de manera notoria con respecto al PIB: de 75% (2005) a 31% (2011). Además, por el crecimiento sostenido del Producto Interno Bruto (PIB) real en un promedio de 4,7% en el periodo 2005-2011, un incremento impulsado por un aumento de la inversión pública", sostiene esa nota.
Asimismo, señala que la posición de liquidez externa del país mejoró como resultado del superávit de cuenta corriente a lo largo de nueve años consecutivos y el aumento de la inversión extranjera directa.
También contribuyó al mejoramiento de la calificación, el incremento de las Reservas Internacionales -excluyendo el oro-, que creció de 1.244 millones de dólares (2005) a 9.909 de dólares (2011), monto que provee un importante colchón financiero contra choques externos derivados de bajas en los precios de los materias primas, argumentó el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.