Grandes economías de la UE acuerdan impulsar crecimiento
Roma, Reuters
Los líderes de Alemania, Francia, Italia y España acordaron el viernes un paquete de 130.000 millones de euros (156.000 millones de dólares) para intentar reactivar el crecimiento de la economía europea, pero difirieron sobre cómo lanzar bonos conjuntos para combatir la crisis de deuda de la región.
Tras la cumbre de líderes de los cuatro países en Roma, el primer ministro italiano Mario Monti dijo que la Unión Europea debería adoptar una serie de medidas de crecimiento equivalentes a casi el 1 por ciento del Producto Interno Bruto del bloque en un encuentro la próxima semana.
"El crecimiento sólo puede tener raíces sólidas si existe una disciplina fiscal, pero esta puede ser mantenida sólo si hay crecimiento y creación de empleos", dijo Monti en una rueda de prensa conjunta tras las negociaciones que se prolongaron por más de una hora y media.
Las medidas de crecimiento, que ya están en marcha en Bruselas, incluyen incrementar el capital del Banco Europeo de Inversión, redirigir los fondos regionales de la UE que no fueron utilizados y emitir bonos para cofinanciar importantes programas de inversión pública.
No se anunciaron nuevas medidas el viernes.
En el encuentro, la canciller alemana Angela Merkel, que dirige a la economía más poderosa de Europa y el principal contribuyente de sus fondos de rescate, aprobó el paquete de crecimiento económico pero no hizo mención de ninguna acción para mutualizar la deuda pasada de la zona euro o nuevos realizar préstamos.
El presidente de Francia Francois Hollande pareció expresar su impaciencia ante la reticencia de Berlín, al referir que no debería tomar 10 años para crear eurobonos conjuntos como instrumento financiero vital para Europa.
El mandatario sostuvo que se necesita una mayor solidaridad entre los estados miembro antes de que renuncien a una mayor soberanía a las instituciones europeas. La posición alemana esencialmente apunta a lo contrario.
"Considero que los eurobonos sean una opción (...) pero no en 10 años", dijo Hollande, al desafiar directamente a la canciller alemana. "No puede haber una transferencia de la soberanía si no hay una mejora en la solidaridad", agregó.
Merkel ha sostenido que los miembros del bloque de 17 naciones deben transferir el control sobre políticas económicas y presupuesto nacional a Bruselas antes de que Alemania considere emitir una deuda común.
Sus comentarios contrastantes dejaron mucho trabajo a los diplomáticos para elaborar un anteproyecto convincente y cercano a una unión bancaria y fiscal en una cumbre de la UE el 28 y 29 de junio, que Monti ha calificado como un momento decisivo para la crisis.
Se espera que el plan incluya las primeras medidas hacia una unión del sistema bancario, comenzando por poner al Banco Central Europeo a cargo de supervisar a grandes bancos de la zona euro que operan también en el extranjero.
¿RESCATE ESPAÑOL?
Los niveles de financiación peligrosamente altos de España han disminuido en algo ante las esperanzas del mercado de que surjan iniciativas políticas en la cumbre de Bruselas. Si no se cumplen esas expectativas, Madrid puede ser presionado aún más a solicitar eventualmente un rescate soberano.
Sin un éxito en la cumbre, "se producirían ataques especulativos cada vez mas grandes en contra de cada país, encarnizándose contra los más débiles", dijo Mario Monti en una entrevista que divulgaron varios diarios europeos antes de la cumbre.
"Gran parte de Europa se vería obligada a seguir soportando tasas de interés muy altas que impactarían en los estados e indirectamente en las empresas. Todo esto es justo lo contrario de lo que se necesita para el crecimiento", agregó Monti.
El tecnócrata Monti, que necesita fortalecer su debilitada autoridad en Italia, sonó un tanto más optimista tras las negociaciones, al referir que la cumbre de la próxima semana debería "calmar las expectativas de los mercados financieros (...) el euro está aquí para quedarse y todos lo decimos en serio".
El primer ministro español Mariano Rajoy, que está a punto de solicitar 100.000 millones de euros en fondos de rescate de la zona euro para recapitalizar a su abatido sistema bancario, dijo que los líderes de los cuatro países acordaron "utilizar cualquier mecanismo necesario para obtener estabilidad financiera en la zona euro".
Una auditoría difundida el jueves reveló que los bancos españoles necesitarían hasta 62.000 millones de euros en capital adicional para capear circunstancias adversas.
Tras una reunión de ministros de finanzas de la zona euro el jueves, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional Christine Lagarde demandó un rápido progreso sobre varios otros frentes, incrementando la presión sobre Merkel.
Lagarde dijo que la unión bancaria era una prioridad, junto con la unión fiscal y el principio de deuda recíproca. Alemania rechaza la emisión de bonos comunes y no suavizará su postura hasta que se complete la unión económica. También se opone a la introducción de un esquema de garantía de depósitos bancarios de todo el bloque.
Los líderes de Alemania, Francia, Italia y España acordaron el viernes un paquete de 130.000 millones de euros (156.000 millones de dólares) para intentar reactivar el crecimiento de la economía europea, pero difirieron sobre cómo lanzar bonos conjuntos para combatir la crisis de deuda de la región.
Tras la cumbre de líderes de los cuatro países en Roma, el primer ministro italiano Mario Monti dijo que la Unión Europea debería adoptar una serie de medidas de crecimiento equivalentes a casi el 1 por ciento del Producto Interno Bruto del bloque en un encuentro la próxima semana.
"El crecimiento sólo puede tener raíces sólidas si existe una disciplina fiscal, pero esta puede ser mantenida sólo si hay crecimiento y creación de empleos", dijo Monti en una rueda de prensa conjunta tras las negociaciones que se prolongaron por más de una hora y media.
Las medidas de crecimiento, que ya están en marcha en Bruselas, incluyen incrementar el capital del Banco Europeo de Inversión, redirigir los fondos regionales de la UE que no fueron utilizados y emitir bonos para cofinanciar importantes programas de inversión pública.
No se anunciaron nuevas medidas el viernes.
En el encuentro, la canciller alemana Angela Merkel, que dirige a la economía más poderosa de Europa y el principal contribuyente de sus fondos de rescate, aprobó el paquete de crecimiento económico pero no hizo mención de ninguna acción para mutualizar la deuda pasada de la zona euro o nuevos realizar préstamos.
El presidente de Francia Francois Hollande pareció expresar su impaciencia ante la reticencia de Berlín, al referir que no debería tomar 10 años para crear eurobonos conjuntos como instrumento financiero vital para Europa.
El mandatario sostuvo que se necesita una mayor solidaridad entre los estados miembro antes de que renuncien a una mayor soberanía a las instituciones europeas. La posición alemana esencialmente apunta a lo contrario.
"Considero que los eurobonos sean una opción (...) pero no en 10 años", dijo Hollande, al desafiar directamente a la canciller alemana. "No puede haber una transferencia de la soberanía si no hay una mejora en la solidaridad", agregó.
Merkel ha sostenido que los miembros del bloque de 17 naciones deben transferir el control sobre políticas económicas y presupuesto nacional a Bruselas antes de que Alemania considere emitir una deuda común.
Sus comentarios contrastantes dejaron mucho trabajo a los diplomáticos para elaborar un anteproyecto convincente y cercano a una unión bancaria y fiscal en una cumbre de la UE el 28 y 29 de junio, que Monti ha calificado como un momento decisivo para la crisis.
Se espera que el plan incluya las primeras medidas hacia una unión del sistema bancario, comenzando por poner al Banco Central Europeo a cargo de supervisar a grandes bancos de la zona euro que operan también en el extranjero.
¿RESCATE ESPAÑOL?
Los niveles de financiación peligrosamente altos de España han disminuido en algo ante las esperanzas del mercado de que surjan iniciativas políticas en la cumbre de Bruselas. Si no se cumplen esas expectativas, Madrid puede ser presionado aún más a solicitar eventualmente un rescate soberano.
Sin un éxito en la cumbre, "se producirían ataques especulativos cada vez mas grandes en contra de cada país, encarnizándose contra los más débiles", dijo Mario Monti en una entrevista que divulgaron varios diarios europeos antes de la cumbre.
"Gran parte de Europa se vería obligada a seguir soportando tasas de interés muy altas que impactarían en los estados e indirectamente en las empresas. Todo esto es justo lo contrario de lo que se necesita para el crecimiento", agregó Monti.
El tecnócrata Monti, que necesita fortalecer su debilitada autoridad en Italia, sonó un tanto más optimista tras las negociaciones, al referir que la cumbre de la próxima semana debería "calmar las expectativas de los mercados financieros (...) el euro está aquí para quedarse y todos lo decimos en serio".
El primer ministro español Mariano Rajoy, que está a punto de solicitar 100.000 millones de euros en fondos de rescate de la zona euro para recapitalizar a su abatido sistema bancario, dijo que los líderes de los cuatro países acordaron "utilizar cualquier mecanismo necesario para obtener estabilidad financiera en la zona euro".
Una auditoría difundida el jueves reveló que los bancos españoles necesitarían hasta 62.000 millones de euros en capital adicional para capear circunstancias adversas.
Tras una reunión de ministros de finanzas de la zona euro el jueves, la directora gerente del Fondo Monetario Internacional Christine Lagarde demandó un rápido progreso sobre varios otros frentes, incrementando la presión sobre Merkel.
Lagarde dijo que la unión bancaria era una prioridad, junto con la unión fiscal y el principio de deuda recíproca. Alemania rechaza la emisión de bonos comunes y no suavizará su postura hasta que se complete la unión económica. También se opone a la introducción de un esquema de garantía de depósitos bancarios de todo el bloque.