El avión solar cumple con éxito su primer vuelo intercontinental
Suiza, AFP
El avión solar suizo Solar Impulse aterrizó la noche del martes a este miércoles en Rabat, Marruecos, culminando de este modo su primer vuelo intercontinental, constató un periodista de AFP.
Pilotado por el suizo Bertrand Piccard, la nave aterrizó, con Luna llena, a las 23H30 locales (22H00 GMT) en el aeropuerto de Rabat-Salé, donde fue recibido por funcionarios de la Agencia Marroquí de Energía Solar (MASEN).
Una gran carpa fue levantadas cerca de la pista para recibir a los organizadores del vuelo, transmitido en vivo por el sitio 'web' 'solarimpulse.com'.
Según responsables del aeropuerto, la pista en la que aterrizó Solar Impulse tiene 3,8 kilómetros de largo.
El avión "descansará en Rabat cinco días antes de volar a Uarzazate", sur de Marruecos, en la víspera de la inauguración por el rey Mohamed VI de la más grande instalación termo-solar construida nunca en el mundo.
El avión solar despegó del aeropuerto Madrid-Barajas el martes a las 05H22 (03H22 GMT).
"Estoy muy emocionado. Los marroquíes han preparado tan bien el vuelo... Me alegro por ellos y les doy las gracias", le dijo el piloto tras detener el avión a su hija, que siguió el vuelo desde Suiza.
Al bajar del avión, el piloto suizo parecía exhausto pero sonreía. En tierra fue recibido por su esposa Michelle y decenas de organizadores del vuelo y funcionarios marroquíes.
Muy sonriente, Piccard dijo a un grupo de periodistas: "¡Hola a Marruecos! ¡Y gracias por la bienvenida!", antes de ser llevado a la gran carpa instalada cerca de la pista.
"Marruecos se ha comprometido con mucha ambición en el desarrollo de las energías renovables. Admiramos a este esfuerzo", agregó.
Solar Impulse es el primer avión diseñado para volar día y noche sin combustible ni emisiones contaminantes, gracias a la energía solar.
El avión, hecho de fibra de carbono, es impulsado por cuatro motores eléctricos, con una potencia de 10 caballos de fuerza cada uno, alimentados por 12.000 células fotoeléctricas que cubren su ala inmensa.
La energía es almacenada durante el día en las baterías, lo que le permite volar de noche al avión.
Solar Impulse tiene la envergadura de un Airbus A340 (63,4 metros), pero sólo pesa 1,6 tonelada, o sea el peso promedio de un automóvil.
El avión solar suizo Solar Impulse aterrizó la noche del martes a este miércoles en Rabat, Marruecos, culminando de este modo su primer vuelo intercontinental, constató un periodista de AFP.
Pilotado por el suizo Bertrand Piccard, la nave aterrizó, con Luna llena, a las 23H30 locales (22H00 GMT) en el aeropuerto de Rabat-Salé, donde fue recibido por funcionarios de la Agencia Marroquí de Energía Solar (MASEN).
Una gran carpa fue levantadas cerca de la pista para recibir a los organizadores del vuelo, transmitido en vivo por el sitio 'web' 'solarimpulse.com'.
Según responsables del aeropuerto, la pista en la que aterrizó Solar Impulse tiene 3,8 kilómetros de largo.
El avión "descansará en Rabat cinco días antes de volar a Uarzazate", sur de Marruecos, en la víspera de la inauguración por el rey Mohamed VI de la más grande instalación termo-solar construida nunca en el mundo.
El avión solar despegó del aeropuerto Madrid-Barajas el martes a las 05H22 (03H22 GMT).
"Estoy muy emocionado. Los marroquíes han preparado tan bien el vuelo... Me alegro por ellos y les doy las gracias", le dijo el piloto tras detener el avión a su hija, que siguió el vuelo desde Suiza.
Al bajar del avión, el piloto suizo parecía exhausto pero sonreía. En tierra fue recibido por su esposa Michelle y decenas de organizadores del vuelo y funcionarios marroquíes.
Muy sonriente, Piccard dijo a un grupo de periodistas: "¡Hola a Marruecos! ¡Y gracias por la bienvenida!", antes de ser llevado a la gran carpa instalada cerca de la pista.
"Marruecos se ha comprometido con mucha ambición en el desarrollo de las energías renovables. Admiramos a este esfuerzo", agregó.
Solar Impulse es el primer avión diseñado para volar día y noche sin combustible ni emisiones contaminantes, gracias a la energía solar.
El avión, hecho de fibra de carbono, es impulsado por cuatro motores eléctricos, con una potencia de 10 caballos de fuerza cada uno, alimentados por 12.000 células fotoeléctricas que cubren su ala inmensa.
La energía es almacenada durante el día en las baterías, lo que le permite volar de noche al avión.
Solar Impulse tiene la envergadura de un Airbus A340 (63,4 metros), pero sólo pesa 1,6 tonelada, o sea el peso promedio de un automóvil.