Disparos contra manifestantes y temor a guerra civil en Siria
Damasco, AFPLas fuerzas de seguridad sirias dispararon este viernes, en particular en Damasco, para dispersar a manifestantes movilizados contra la masacre en Hula (centro), en un país donde Rusia ve emerger elementos "precursores" de una guerra civil y la ONU teme un "conflicto total".
Al menos 16 personas murieron en actos violentos en todo el país, entre las cuales dos manifestantes alcanzados por las balas, según el opositor Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
Las víctimas de la represión y de los combates entre soldados e insurgentes se cuentan por decenas todos los días: más de 13.400 muertos desde mediados de marzo de 2011, cuando comenzó la revuelta contra el régimen de Bashar al Asad.
En su página de Facebook los militantes contra el régimen habían convocado a manifestar luego de la oración semanal, en homenaje a las víctimas de la matanza cometida en Hula, que dejó el 25 de mayo 108 muertos, de los cuales 49 niños.
Se registraron manifestaciones en las provincias de Damasco, Deraa (sur), Homs y Hama (centro), Alepo (norte), Deir Ezzor (este), Hasake (noreste) y Latakia (oeste), "a pesar del despliegue masivo de las fuerzas de seguridad", según el OSDH.
"Las fuerzas gubernamentales dispararon para dispersar a los manifestantes en las regiones de Damasco, Deraa y la ciudad de Alepo", precisó.
En la capital, numerosos manifestantes desfilaron en el barrio de Eseily: "Árabes, exigimos más que la expulsión de los embajadores (de Siria), exigimos también la expulsión de los embajadores de Rusia y de China", se podía leer en el cartel de un manifestante, según un video publicado en internet por militantes.
Los manifestantes hacían referencia a la expulsión, por numerosos países occidentales, de diplomáticos sirios después de la matanza de Hula, y a los dos aliados de Siria, Moscú y Pekín.
En otro barrio de Damasco, en Tadamun, los manifestantes llevaban símbolos religiosos para denunciar disensiones confesionales, llamando a la unidad entre cristianos y musulmanes.
La rebelión y las autoridades se acusaron mutuamente de la matanza de Hula. Un alto responsable de la ONU dijo que pesan "fuertes sospechas" sobre las milicias del régimen.
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó el viernes una resolución instando a la comisión de investigación independiente internacional sobre Siria a llevar a cabo "una investigación especial" sobre la matanza de Hula para que los responsables comparezcan ante la justicia.
La resolución fue aceptada por 41 votos. China, Rusia y Cuba votaron en contra, mientras que Uganda y Ecuador se abstuvieron.
Horas antes, la Alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, estimó que esta matanza "podría constituir un crimen contra la humanidad".
Pillay pidió a la comunidad internacional que investigue las violaciones de derechos humanos en Siria y que apoye el plan de seis puntos del enviado especial de la ONU y de la Liga Árabe Kofi Annan.
"Si ello no ocurre -advierte- la situación en Siria corre el riesgo de degenerar en un conflicto total y el futuro del país y de la región en su conjunto podrían estar en grave peligro".
Responsables del Ejército Sirio Libre (ESL), compuesto esencialmente de desertores, habían dado de plazo hasta el viernes a las 09H00 GMT para que el régimen cese la represión porque de lo contrario se retiraban del plan de paz internacional. A última hora de la tarde ninguna de las partes había hecho declaraciones al respecto.
En visita a Berlín, el presidente ruso Vladimir Putin estimó que en Siria se veían elementos "precursores" de una guerra civil. Pero consideró imposible resolver la crisis "por la fuerza" y se pronunció, junto con la canciller alemana Angela Merkel, en favor de una "solución política".
También dijo que no apoyaba a "ninguna de las partes" en Siria, y desmintió el suministro por su país de armas utilizables en una guerra civil.
Los países occidentales buscan un cambio en la posición de Rusia y China, que bloquean toda resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU que condene al régimen sirio.
El jefe de la diplomacia británica William Hague advirtió que Siria estaba "al borde de una guerra civil total", después de entrevistarse en Estambul con la oposición siria y el secretario general de la ONU Ban Ki-moon que le había advertido contra el riesgo de una "guerra civil catastrófica".
El alto el fuego en el marco del plan de Annan entró en vigor el 12 de abril. En los primeros días los actos violentos fueron esporádicos, pero luego se recrudecieron.
Imagen divulgada por la cadena opositora Shaam News Network que muestra a un supuesto miliciano del Ejército Libre Sirio el jueves 31 de mayo en Daraya, a las afueras de Damasco. La AFP, no autorizada a cubrir los hechos, está usando imágenes de fuentes alternativas, por lo que no es responsable de posibles alteraciones en su contenido, fecha o data, que no ha podido confirmar por sí misma.
Imagen divulgada por la cadena opositora Shaam News Network que muestra una manifestación contra el régimen el jueves por la noche en Jobar, a las afueras de Damasco. La AFP, no autorizada a cubrir los hechos, está usando imágenes de fuentes alternativas, por lo que no es responsable de posibles alteraciones en su contenido, fecha o data, que no ha podido confirmar por sí misma.
