Del Potro pasó a octavos en Wimbledon
Londres, EFE
El argentino Juan Martín Del Potro, cabeza de serie número nueve en Wimbledon, derrotó este sábado al japonés Kei Nishikori por 6-3, 7-6(3) y 6-1 en dos horas y 26 minutos y pasó a cuarta ronda en el Grand Slam británico, donde se medirá al español David Ferrer. También ganó el crédito local y número cuatro del mundo, Andy Murray.
Del Potro conectó 12 aces y ganó el 74 por ciento de los puntos con su primer servicio, además de conseguir 4 quiebres en 11 oportunidades y perder su saque sólo una vez en las tres oportunidades que tuvo su rival. Fue la tercera victoria en igual número de enfrentamientos de Del Potro sobre el japonés de 22 años.
Para Del Potro es la segunda edición seguida que jugará en la cuarta ronda de Wimbledon, luego de caer el año pasado en esa ronda ante Rafael Nadal. El tandilense de 23 años llegó a 40 triunfos esta temporada (récord de 40-9) donde tiene dos títulos ATP y además sumó su triunfo 50 en Grand Slams (marca de 50-20).
Nishikori, segundo japonés al que se enfrentaba Delpo en la ronda británica tras Go Soeda, opuso más resistencia de lo que indica el marcador, al que el argentino venció en poco más de dos horas.
El primer set, en el que el de Tandil se impuso por 6-3, parecía indicar lo que supondría un encuentro sencillo para el tenista argentino.
Sin embargo, un combativo Nishikori sacó su mejor tenis en la segunda manga, en la que Delpo se acabó imponiendo en un ajustado desempate.
El tercer set fue más sencillo para el argentino, que acabó sacando su mejor derecha y servicio para superar al nipón por un contundente 6-1 en apenas 44 minutos.
Tras esta victoria, el campeón del Abierto de Estados Unidos en 2009, pasa a la cuarta ronda de Wimbledon, donde se verá las caras con el vencedor del duelo entre el español David Ferrer, cabeza de serie número siete, y el estadounidense Andy Roddick.
"Estoy contento de haber llegado a la cuarta ronda, ha sido un partido difícil, a estas alturas cada rival es complicado. Me siento bien con mi tenis y espero llegar lejos en el torneo. Si mantengo este nivel de saque creo que puedo tener oportunidades", aseguró el argentino al término del partido.
En octavos de final, Del Potro se cruzará con David Ferrer, 7º sembrado, que completó una trabajada victoria ante el estadounidense Andy Roddick, por 2-6, 7-6(8), 6-4 y 6-3, en 2 horas y 38 minutos.
El de Jávea vio cómo su rival, de 30 años y ganador del US Open hace nueve, se imponía tanto al saque como al resto en los cuatro primeros juegos de la manga inicial.
El dominio del estadounidense duró hasta que Ferrer superó los nervios iniciales, se sacudió el polvo de encima y materializó un juego en blanco que bajo los humos a un Roddick que encandilaba al público de la central con algunos gestos exagerados para alcanzar bolas.
La reacción de Ferrer no fue suficiente para hacerse con una primera manga que ya estaba perdida, pero sí supuso un punto de inflexión en un encuentro que estaba tomando un cariz tenebroso para el único español en el torneo.
El de Nebraska, veinte puestos por debajo de Ferrer en el ránking de la ATP, encaró sin complejos un duelo en el que lograba imponerse en los intercambios y trataba una y otra vez de arrinconar al español desde la red.
La segunda manga tampoco resultó sencilla para el español, pero entre el acierto y la decisión que mostró en algunos puntos, y la fortuna que le sonrió en otros, Ferrer, con media melena y cinta a la cabeza, se impuso en un abrumador desempate en el que el estadounidense, con la gorra bien ajustada, desaprovechó dos bolas de set.
Golpe a golpe, Ferrer se abría paso con su raqueta a través de un duelo trabado, en el que el juego de Roddick iba dejando entrever lentamente minúsculas fisuras que el último español vivo en Wimbledon se afanaba por explotar.
Con las ideas cada vez más claras, el de Jávea volvió a imponerse al resto hasta en dos ocasiones en una tercera manga en la que su rival vio como se esfumaba la ventaja que había abierto al inicio del choque.
Las dudas que pudieran quedar sobre el pase de Ferrer se desvanecieron al final del cuarto set, cuando el español derribó las últimas defensas del estadounidense al resto y encaró con una ventaja psicológicamente insalvable los últimos intercambios antes de los octavos de final de Wimbledon.
En tanto, el escocés Andy Murray, número cuatro del mundo y local aquí, se deshizo de un rival complicado al ganarle en cuatro sets al chipriota Marcos Baghdatis (43º) con parciales de 7-5, 3-6, 7-5 y 6-1
Murray venció en tres horas y 13 minutos a un chipriota que mostró su calidad de siempre, aunque también su repetida inconsistencia.
No tuvo las cosas fáciles el británico en una central de nuevo con la cubierta echada, por falta de luz, en el tramo final del duelo, en el que sudó para apuntarse cada uno de los tres sets que le arrebató al chipriota.
Tardó el local casi una hora en anotarse la primera manga ante un rival que le desquiciaba desde el fondo de la pista, y aflojó el ritmo en un segundo set en el que Baghdatis sorprendió al público británico con un 6-3 que volvió a recordar lo que ocurrió hace dos días con Nadal, que quedó apeado del torneo mucho antes de lo previsto.
Tras un parón de casi media hora para cerrar el techo de la central y encender las luz artificial, como ocurrió en el encuentro del mallorquín frente al checo Lukas Rosol, Murray saltó a la hierba con fuerzas renovadas.
En un encuentro impredecible, en el que parecía que sacar daba tanta ventaja como defenderse al resto, los espectadores de la central vieron como su jugador preferido luchaba punto a punto para acabar anotándose el tercer set.
En el cuarto set, el ritmo del partido varió, y Murray aceleró su victoria, que se produjo unos minutos después de las 22.00 GMT, el horario que Wimbledon había marcado como hora límite para jugar en la pista central.
Tras esta victoria, en octavos de final Murray se las verá con el croata Marin Cilic que viene de ganarle al estadounidense Sam Querrey el segundo partido más largo de la historia del torneo británico, con tanteador de 7-6(6), 6-4, 6-7(2), 6-7(3) y 17-15, tras 5 horas y 31 minutos de juego.
El partido más largo de la historia del tenis profesional lo disputaron en Wimbledon, en 2010, el estadounidense John Isner y el francés Nicolas Mahut, y tras 11 horas y 05 minutos ganó el primero con resultado de 70-68 en el quinto y decisivo set.
El francés Jo-Wilfried Tsonga, 5º cabeza de serie, no dejó lugar para la sorpresa y derrotó al eslovaco Lukas Lacko por 6-4, 6-3 y 6-3 en una hora y 36 minutos.
Tsonga no tuvo mayores problemas para superar a Lacko, número sesenta en la clasificación mundial de la ATP. El semifinalista del pasado año cumplió fácilmente con los pronósticos ante un rival que nunca había pasado de la tercera ronda en Wimbledon y que iguala así su mejor resultado en el Grand Slam británico.
Tsonga hizo valer su excelente servicio y su gran derecha para derrotar a Lacko en poco más de una hora y media de partido y sellar su pase para la cuarta ronda, donde se verá las caras con el estadounidense Mardy Fish, verdugo del belga David Goffin por 6-3, 7-6(6) y 7-6(6).
El clasificado estadounidense Brian Baker siguió su increíble regreso tras sus lesiones para llegar por primera vez a cuarta ronda de Wimbledon el sábado.
Baker, de 27 años, que sufrió cinco operaciones entre noviembre de 2005 y julio de 2011, venció al francés Benoit Paire por 6-4, 4-6, 6-1 y 6-3 en 2 horas y 21 minutos.
Este año lo comenzó Nº 458 en el ránking ATP, pero podría saltar alrededor del Nº 78 del mundo como resultado de la victoria de este sábado.
Ahora tendrá como desafío al alemán sembrado Nº 27 Philipp Kohlschreiber, quien sacó del camino al verdugo de Rafael Nadal, el checo Lukas Rosol por 6-2, 6-3 y 7-6(6) en una hora y 37 minutos para llegar por quinta vez a los octavos de final de un major en su carrera.
El argentino Juan Martín Del Potro, cabeza de serie número nueve en Wimbledon, derrotó este sábado al japonés Kei Nishikori por 6-3, 7-6(3) y 6-1 en dos horas y 26 minutos y pasó a cuarta ronda en el Grand Slam británico, donde se medirá al español David Ferrer. También ganó el crédito local y número cuatro del mundo, Andy Murray.
Del Potro conectó 12 aces y ganó el 74 por ciento de los puntos con su primer servicio, además de conseguir 4 quiebres en 11 oportunidades y perder su saque sólo una vez en las tres oportunidades que tuvo su rival. Fue la tercera victoria en igual número de enfrentamientos de Del Potro sobre el japonés de 22 años.
Para Del Potro es la segunda edición seguida que jugará en la cuarta ronda de Wimbledon, luego de caer el año pasado en esa ronda ante Rafael Nadal. El tandilense de 23 años llegó a 40 triunfos esta temporada (récord de 40-9) donde tiene dos títulos ATP y además sumó su triunfo 50 en Grand Slams (marca de 50-20).
Nishikori, segundo japonés al que se enfrentaba Delpo en la ronda británica tras Go Soeda, opuso más resistencia de lo que indica el marcador, al que el argentino venció en poco más de dos horas.
El primer set, en el que el de Tandil se impuso por 6-3, parecía indicar lo que supondría un encuentro sencillo para el tenista argentino.
Sin embargo, un combativo Nishikori sacó su mejor tenis en la segunda manga, en la que Delpo se acabó imponiendo en un ajustado desempate.
El tercer set fue más sencillo para el argentino, que acabó sacando su mejor derecha y servicio para superar al nipón por un contundente 6-1 en apenas 44 minutos.
Tras esta victoria, el campeón del Abierto de Estados Unidos en 2009, pasa a la cuarta ronda de Wimbledon, donde se verá las caras con el vencedor del duelo entre el español David Ferrer, cabeza de serie número siete, y el estadounidense Andy Roddick.
"Estoy contento de haber llegado a la cuarta ronda, ha sido un partido difícil, a estas alturas cada rival es complicado. Me siento bien con mi tenis y espero llegar lejos en el torneo. Si mantengo este nivel de saque creo que puedo tener oportunidades", aseguró el argentino al término del partido.
En octavos de final, Del Potro se cruzará con David Ferrer, 7º sembrado, que completó una trabajada victoria ante el estadounidense Andy Roddick, por 2-6, 7-6(8), 6-4 y 6-3, en 2 horas y 38 minutos.
El de Jávea vio cómo su rival, de 30 años y ganador del US Open hace nueve, se imponía tanto al saque como al resto en los cuatro primeros juegos de la manga inicial.
El dominio del estadounidense duró hasta que Ferrer superó los nervios iniciales, se sacudió el polvo de encima y materializó un juego en blanco que bajo los humos a un Roddick que encandilaba al público de la central con algunos gestos exagerados para alcanzar bolas.
La reacción de Ferrer no fue suficiente para hacerse con una primera manga que ya estaba perdida, pero sí supuso un punto de inflexión en un encuentro que estaba tomando un cariz tenebroso para el único español en el torneo.
El de Nebraska, veinte puestos por debajo de Ferrer en el ránking de la ATP, encaró sin complejos un duelo en el que lograba imponerse en los intercambios y trataba una y otra vez de arrinconar al español desde la red.
La segunda manga tampoco resultó sencilla para el español, pero entre el acierto y la decisión que mostró en algunos puntos, y la fortuna que le sonrió en otros, Ferrer, con media melena y cinta a la cabeza, se impuso en un abrumador desempate en el que el estadounidense, con la gorra bien ajustada, desaprovechó dos bolas de set.
Golpe a golpe, Ferrer se abría paso con su raqueta a través de un duelo trabado, en el que el juego de Roddick iba dejando entrever lentamente minúsculas fisuras que el último español vivo en Wimbledon se afanaba por explotar.
Con las ideas cada vez más claras, el de Jávea volvió a imponerse al resto hasta en dos ocasiones en una tercera manga en la que su rival vio como se esfumaba la ventaja que había abierto al inicio del choque.
Las dudas que pudieran quedar sobre el pase de Ferrer se desvanecieron al final del cuarto set, cuando el español derribó las últimas defensas del estadounidense al resto y encaró con una ventaja psicológicamente insalvable los últimos intercambios antes de los octavos de final de Wimbledon.
En tanto, el escocés Andy Murray, número cuatro del mundo y local aquí, se deshizo de un rival complicado al ganarle en cuatro sets al chipriota Marcos Baghdatis (43º) con parciales de 7-5, 3-6, 7-5 y 6-1
Murray venció en tres horas y 13 minutos a un chipriota que mostró su calidad de siempre, aunque también su repetida inconsistencia.
No tuvo las cosas fáciles el británico en una central de nuevo con la cubierta echada, por falta de luz, en el tramo final del duelo, en el que sudó para apuntarse cada uno de los tres sets que le arrebató al chipriota.
Tardó el local casi una hora en anotarse la primera manga ante un rival que le desquiciaba desde el fondo de la pista, y aflojó el ritmo en un segundo set en el que Baghdatis sorprendió al público británico con un 6-3 que volvió a recordar lo que ocurrió hace dos días con Nadal, que quedó apeado del torneo mucho antes de lo previsto.
Tras un parón de casi media hora para cerrar el techo de la central y encender las luz artificial, como ocurrió en el encuentro del mallorquín frente al checo Lukas Rosol, Murray saltó a la hierba con fuerzas renovadas.
En un encuentro impredecible, en el que parecía que sacar daba tanta ventaja como defenderse al resto, los espectadores de la central vieron como su jugador preferido luchaba punto a punto para acabar anotándose el tercer set.
En el cuarto set, el ritmo del partido varió, y Murray aceleró su victoria, que se produjo unos minutos después de las 22.00 GMT, el horario que Wimbledon había marcado como hora límite para jugar en la pista central.
Tras esta victoria, en octavos de final Murray se las verá con el croata Marin Cilic que viene de ganarle al estadounidense Sam Querrey el segundo partido más largo de la historia del torneo británico, con tanteador de 7-6(6), 6-4, 6-7(2), 6-7(3) y 17-15, tras 5 horas y 31 minutos de juego.
El partido más largo de la historia del tenis profesional lo disputaron en Wimbledon, en 2010, el estadounidense John Isner y el francés Nicolas Mahut, y tras 11 horas y 05 minutos ganó el primero con resultado de 70-68 en el quinto y decisivo set.
El francés Jo-Wilfried Tsonga, 5º cabeza de serie, no dejó lugar para la sorpresa y derrotó al eslovaco Lukas Lacko por 6-4, 6-3 y 6-3 en una hora y 36 minutos.
Tsonga no tuvo mayores problemas para superar a Lacko, número sesenta en la clasificación mundial de la ATP. El semifinalista del pasado año cumplió fácilmente con los pronósticos ante un rival que nunca había pasado de la tercera ronda en Wimbledon y que iguala así su mejor resultado en el Grand Slam británico.
Tsonga hizo valer su excelente servicio y su gran derecha para derrotar a Lacko en poco más de una hora y media de partido y sellar su pase para la cuarta ronda, donde se verá las caras con el estadounidense Mardy Fish, verdugo del belga David Goffin por 6-3, 7-6(6) y 7-6(6).
El clasificado estadounidense Brian Baker siguió su increíble regreso tras sus lesiones para llegar por primera vez a cuarta ronda de Wimbledon el sábado.
Baker, de 27 años, que sufrió cinco operaciones entre noviembre de 2005 y julio de 2011, venció al francés Benoit Paire por 6-4, 4-6, 6-1 y 6-3 en 2 horas y 21 minutos.
Este año lo comenzó Nº 458 en el ránking ATP, pero podría saltar alrededor del Nº 78 del mundo como resultado de la victoria de este sábado.
Ahora tendrá como desafío al alemán sembrado Nº 27 Philipp Kohlschreiber, quien sacó del camino al verdugo de Rafael Nadal, el checo Lukas Rosol por 6-2, 6-3 y 7-6(6) en una hora y 37 minutos para llegar por quinta vez a los octavos de final de un major en su carrera.