Dávila denuncia que continúan acciones políticas para desestabilizar al Gobierno y exhorta a deponer violencia
La Paz, ABI
La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, exhortó el domingo a los grupos de policías de baja graduación, que rechazaron el convenio firmado por el Gobierno y sus representantes, a deponer los actos de violencia y ratificó la denuncia de que grupos políticos continúan "azuzando" para desestabilizar al Gobierno y agudizar un escenario de golpe de Estado, como advirtió el sábado, horas antes de lograra el acuerdo de 8 puntos.
Alarmada por la actitud de los policías que rechazaron el acuerdo y de la representante de las esposas de los policías que rubricó el convenio, Guadalupe Cárdenas, que aseguró haber sido amenazada para estampar su firma, Dávila informó que ese escenario de golpe significa esos graves indicios de vinculaciones políticas con personas y partidos que no se han pronunciado frente a los desmanes y a la violencia.
"Tiene que ver con las pruebas fehacientes de movilizaciones policiales llevando armamento de un lugar a otro a unidades que no tienen porque utilizar armamento, sacando a la fuerza armamento de otros lugares, como sucedió en Cochabamba, mientras se estaba negociando y se llegaba a un acuerdo", justificó,
La Ministra de Comunicación afirmó que esas actitudes configuran una situación "absolutamente delicada" y agudiza el escenario de golpe de Estado que, a su juico, el Gobierno pensaba que podía frenarse con el acuerdo.
A su juicio, el acuerdo podía demostrar que ese era un movimiento solamente económico salarial y que lo otro podría dejarse atrás.
No obstante, dijo que con los reportes de todo el país se constata que esos afanes de desestabilización continúan, que no ha se han frenado, lo que aseguró que el acuerdo económico no era el objetivo, "sino que hay un objetivo político" que continua en marcha.
"Esa es la situación delicada en este momento", complementó y reveló que Cárdenas firmó el acuerdo convencida de ese riesgo de máxima violencia, posición que dijo le "hicieron cambiar" algunos oficiales.
En esa línea, exhortó a los sectores movilizados y a los "partidos políticos que los están apoyando" a asumir su responsabilidad histórica ante el riesgo de que ese escenario de golpe continúe creciendo y de lo que "pase más adelante".
"Exhorto a todas las esposas para que este movimiento no concluya con un derramamiento de sangre, interrumpiendo el proceso democrático porque las bases sociales, las organizaciones sociales, lo hemos escuchado con preocupación que dijeron públicamente que defenderán el proceso democrático y al presidente Evo Morales, que no va a suceder en Bolivia lo que sucedió en Paraguay", complemento.
La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, exhortó el domingo a los grupos de policías de baja graduación, que rechazaron el convenio firmado por el Gobierno y sus representantes, a deponer los actos de violencia y ratificó la denuncia de que grupos políticos continúan "azuzando" para desestabilizar al Gobierno y agudizar un escenario de golpe de Estado, como advirtió el sábado, horas antes de lograra el acuerdo de 8 puntos.
Alarmada por la actitud de los policías que rechazaron el acuerdo y de la representante de las esposas de los policías que rubricó el convenio, Guadalupe Cárdenas, que aseguró haber sido amenazada para estampar su firma, Dávila informó que ese escenario de golpe significa esos graves indicios de vinculaciones políticas con personas y partidos que no se han pronunciado frente a los desmanes y a la violencia.
"Tiene que ver con las pruebas fehacientes de movilizaciones policiales llevando armamento de un lugar a otro a unidades que no tienen porque utilizar armamento, sacando a la fuerza armamento de otros lugares, como sucedió en Cochabamba, mientras se estaba negociando y se llegaba a un acuerdo", justificó,
La Ministra de Comunicación afirmó que esas actitudes configuran una situación "absolutamente delicada" y agudiza el escenario de golpe de Estado que, a su juico, el Gobierno pensaba que podía frenarse con el acuerdo.
A su juicio, el acuerdo podía demostrar que ese era un movimiento solamente económico salarial y que lo otro podría dejarse atrás.
No obstante, dijo que con los reportes de todo el país se constata que esos afanes de desestabilización continúan, que no ha se han frenado, lo que aseguró que el acuerdo económico no era el objetivo, "sino que hay un objetivo político" que continua en marcha.
"Esa es la situación delicada en este momento", complementó y reveló que Cárdenas firmó el acuerdo convencida de ese riesgo de máxima violencia, posición que dijo le "hicieron cambiar" algunos oficiales.
En esa línea, exhortó a los sectores movilizados y a los "partidos políticos que los están apoyando" a asumir su responsabilidad histórica ante el riesgo de que ese escenario de golpe continúe creciendo y de lo que "pase más adelante".
"Exhorto a todas las esposas para que este movimiento no concluya con un derramamiento de sangre, interrumpiendo el proceso democrático porque las bases sociales, las organizaciones sociales, lo hemos escuchado con preocupación que dijeron públicamente que defenderán el proceso democrático y al presidente Evo Morales, que no va a suceder en Bolivia lo que sucedió en Paraguay", complemento.