Rescatan vivos a los nueve mineros peruanos
ICA, Perú, AFP
Socorristas rescataron vivos el miércoles a los nueve mineros atrapados desde hace siete días en un socavón a 250 metros tierra adentro en un túnel horizontal de una mina de cobre en el sureste de Perú, constataron en el lugar periodistas de la AFP.
Los mineros empezaron a salir caminando del socavón uno por uno junto con los socorristas a partir de las 07:00 locales (12h00 GMT), portando cada uno de ellos lentes oscuros para protegerse de la luz solar y abrigados con mantas.
En la víspera, los planes para liberar a los nueve trabajadores atrapados en una mina informal al sureste de Perú sufrieron una demora de varias horas, lo que retrasó su salida hasta hoy miércoles, según dijo anoche el ministro de Energía y Minas Jorge Merino.
"Lo más prudente es que fuese mañana (miércoles) temprano", anticipó Merino, quien se mostró cauto sobre los planes de una inmediata salida (la noche del martes) debido al temor de nuevos derrumbes de rocas al interior de la mina Cabeza de Negro.
Los mineros rescatados son Jacinto Pariona, de 59 años, y su hijo Roger Pariona, de 32; Félix Cucho Aguilar, de 41, Edwin Bellido, de 34, y los hermanos Santiago y Juan Tapia, de 22 y 23 años, respectivamente.
Además, Carlos Huamaní, de 47 años, Jesús Ccapatinta Raymi, de 35, y Julio César Huayta, de quien no se tiene otros datos.
Los nueve mineros estaban encerrados desde hace seis días en un socavón a 250 metros tierra adentro en un túnel horizontal de una mina de cobre y su salud empezó a mostrar alteraciones, como problemas estomacales.
El martes en la mañana los socorristas habían acortado a una distancia de entre dos y tres metros el tramo bloqueado con rocas y tierra que los separa de los mineros, pero los trabajos requieren reforzar con madera la estructura del terreno a modo de un arco para evitar derrumbes.
La jornada prevoa al rescate estuvo marcada por las expectativas generadas ante la posible liberación, lo que llevó al presidente Ollanta Humala a visitar la mina por la noche.
El propio mandatario informó que surgió una demora de "unas cuantas horas" en el rescate. "Ha habido algunos contratiempos por la estructura de una roca, tenemos que esperar una cuantas horas (más)", dijo.
Humala justificó la demora "para que no se produzcan víctimas".
La mina de cobre había sido abandonada en los años 90 pero su entrada no fue dinamitada como exige la ley y, desde entonces, ingresaron los denominados mineros informales sin las adecuadas condiciones de seguridad.
La mina se encuentra encerrada entre altos cerros, desérticos y pedregosos, que hacen que la distancia al primer centro poblado no se pueda recorrer por las ambulancias en menos de tres horas.
Los trasladan a hospital
Los nueve mineros rescatados de la mina “Cabeza de Negro” en la sureña región de Ica fueron llevados a un hospital para que se les aplique un chequeo a fondo, ya que algunos presentan problemas estomacales.
Los hombres, que trabajaban de manera informal, vestían ropa polar para evitar descompensaciones y cubrían sus ojos con lentos oscuros cuando salieron riendo y saludando con sus manos en alto, mientras agitaban una bandera peruana.
“Estoy muy contento y bien de salud (...) muy feliz”, dijo uno de los mineros en sus primeras declaraciones a periodistas, en tanto funcionarios peruanos supervisaban el rescate y traslados de los trabajadores que permanecieron bajo tierra desde el pasado jueves.
“Tarea y misión cumplida”, fue la expresión del presidente de Perú, Ollanta Humala, al anunciar el rescate de mineros e indicó que “gracias a Dios hoy podemos abrazarnos y decir misión cumplida”.
Esto revela las condiciones de peligro en el que trabajan los mineros informales, dijo el jefe de Estado al señalar la urgencia de que sean formalizados.
Roger Pariona, uno de los mineros rescatados, con la voz quebrada le dijo al presidente: “me siento bien agradecido y acá también mis compañeros con el presidente de la República que nos está apoyando”.
Socorristas rescataron vivos el miércoles a los nueve mineros atrapados desde hace siete días en un socavón a 250 metros tierra adentro en un túnel horizontal de una mina de cobre en el sureste de Perú, constataron en el lugar periodistas de la AFP.
Los mineros empezaron a salir caminando del socavón uno por uno junto con los socorristas a partir de las 07:00 locales (12h00 GMT), portando cada uno de ellos lentes oscuros para protegerse de la luz solar y abrigados con mantas.
En la víspera, los planes para liberar a los nueve trabajadores atrapados en una mina informal al sureste de Perú sufrieron una demora de varias horas, lo que retrasó su salida hasta hoy miércoles, según dijo anoche el ministro de Energía y Minas Jorge Merino.
"Lo más prudente es que fuese mañana (miércoles) temprano", anticipó Merino, quien se mostró cauto sobre los planes de una inmediata salida (la noche del martes) debido al temor de nuevos derrumbes de rocas al interior de la mina Cabeza de Negro.
Los mineros rescatados son Jacinto Pariona, de 59 años, y su hijo Roger Pariona, de 32; Félix Cucho Aguilar, de 41, Edwin Bellido, de 34, y los hermanos Santiago y Juan Tapia, de 22 y 23 años, respectivamente.
Además, Carlos Huamaní, de 47 años, Jesús Ccapatinta Raymi, de 35, y Julio César Huayta, de quien no se tiene otros datos.
Los nueve mineros estaban encerrados desde hace seis días en un socavón a 250 metros tierra adentro en un túnel horizontal de una mina de cobre y su salud empezó a mostrar alteraciones, como problemas estomacales.
El martes en la mañana los socorristas habían acortado a una distancia de entre dos y tres metros el tramo bloqueado con rocas y tierra que los separa de los mineros, pero los trabajos requieren reforzar con madera la estructura del terreno a modo de un arco para evitar derrumbes.
La jornada prevoa al rescate estuvo marcada por las expectativas generadas ante la posible liberación, lo que llevó al presidente Ollanta Humala a visitar la mina por la noche.
El propio mandatario informó que surgió una demora de "unas cuantas horas" en el rescate. "Ha habido algunos contratiempos por la estructura de una roca, tenemos que esperar una cuantas horas (más)", dijo.
Humala justificó la demora "para que no se produzcan víctimas".
La mina de cobre había sido abandonada en los años 90 pero su entrada no fue dinamitada como exige la ley y, desde entonces, ingresaron los denominados mineros informales sin las adecuadas condiciones de seguridad.
La mina se encuentra encerrada entre altos cerros, desérticos y pedregosos, que hacen que la distancia al primer centro poblado no se pueda recorrer por las ambulancias en menos de tres horas.
Los trasladan a hospital
Los nueve mineros rescatados de la mina “Cabeza de Negro” en la sureña región de Ica fueron llevados a un hospital para que se les aplique un chequeo a fondo, ya que algunos presentan problemas estomacales.
Los hombres, que trabajaban de manera informal, vestían ropa polar para evitar descompensaciones y cubrían sus ojos con lentos oscuros cuando salieron riendo y saludando con sus manos en alto, mientras agitaban una bandera peruana.
“Estoy muy contento y bien de salud (...) muy feliz”, dijo uno de los mineros en sus primeras declaraciones a periodistas, en tanto funcionarios peruanos supervisaban el rescate y traslados de los trabajadores que permanecieron bajo tierra desde el pasado jueves.
“Tarea y misión cumplida”, fue la expresión del presidente de Perú, Ollanta Humala, al anunciar el rescate de mineros e indicó que “gracias a Dios hoy podemos abrazarnos y decir misión cumplida”.
Esto revela las condiciones de peligro en el que trabajan los mineros informales, dijo el jefe de Estado al señalar la urgencia de que sean formalizados.
Roger Pariona, uno de los mineros rescatados, con la voz quebrada le dijo al presidente: “me siento bien agradecido y acá también mis compañeros con el presidente de la República que nos está apoyando”.