Rasmussen reitera que la OTAN no acelerará su salida de Afganistán
Bruselas, EP
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha rechazado este lunes que los aliados vayan a acelerar la salida de las tropas de Afganistán, al tiempo que ha defendido el refuerzo de las medidas de seguridad adoptadas para impedir la infiltración de insurgentes en las filas de seguridad afganas ante el creciente número de ataques contra las tropas aliadas por policías y soldados afganos.
"No habrá ningún cambio en nuestro calendario. La transición continuará y se completará a finales de 2014", ha explicado en rueda de prensa, precisando en todo caso que los líderes aliados discutirán en la cumbre de mayo en Chicago "cómo gestionamos en detalle esa transición".
Rasmussen ha insistido en que la fecha pactada para completar el relevo en Afganistán a finales de 2014 "fue presentada por el propio presidente afgano en la cumbre de Lisboa" de noviembre de 2010, tras ser interrogado por la insistencia del mandatario afgano en acelerar la salida de las tropas internacionales tras el polémico incidente de la quema de ejemplares del Corán en la base de Bagram y el aumento de ataques contra el personal de la ISAF por fuerzas de seguridad afganas.
Para poder completar la transición en todo el país a finales de 2014, ha explicado, los aliados deberán transferir el control de las últimas provincias y distritos a las autoridades afganas "a mediados de 2013 o como muy tarde en la segunda mitad de 2013" dado que la transición suele completarse de manera "plena" en un periodo de 12-18 meses y ha augurado que "en breve" habrá otra transferencia de nuevos territorios a los afganos.
"Por eso se menciona de repente 2013, pero no se trata de acelerar el proceso de transición", ha recalcado el danés, que ha lamentado que exista "cierta confusión" sobre esta cuestión.
El secretario general aliado ha insistido en que las fuerzas aliadas "ya han comenzado a cambiar de manera gradual a un papel de apoyo" a las fuerzas afganas en aquellos territorios ya transferidos tras recordar que cerca de la mitad de la población afgana reside en provincias y distritos que ya han pasado a estar bajo la responsabilidad "principal" de los afganos y ha insistido en que en todo caso las tropas aliadas mantienen la capacidad de "llevar a cabo operaciones de combate cuando y donde sea necesario".
Las fuerzas de seguridad afganas encabezan ya el 28% de las operaciones especiales contra la insurgencia, participan en el 42% de las operaciones convencionales y ya llevan a cabo el 85% del entrenamiento de las fuerzas del Ejército y de la Policía, según datos del danés. "Esto demuestra que la transición se puede lograr y que es sostenible", ha explicado.
COMPRENDE TEMOR DE LA POBLACIÓN POR FIN DE MISIÓN
Aunque ha reconocido "comprender las preocupaciones" de la población afgana sobre la preparación suficiente de sus fuerzas de seguridad para combatir la amenaza insurgente tras la salida de las tropas internacionales, ha insistido en que la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad afgana (ISAF) que dirige la OTAN en Afganistán "no es una fuerza de ocupación" y no se puede quedarse "para siempre". "Un día terminará", ha recalcado.
"Obviamente no nos podemos quedar en Afganistán para siempre. La ISAF no es una fuerza de ocupación. Estamos allí para ayudar al pueblo afgano a diseñar su propio futuro pero al final debe ser el pueblo afgano el que asuma la responsabilidad plena de su propio país", ha recalcado.
Rasmussen ha dejado claro que los aliados no abandonarán Afganistán a finales de 2014 sin embargo. "En Chicago, planificaremos cómo vamos a completar la transición y de qué manera seguiremos apoyando a Afganistán más allá de 2014. Acordaremos el tipo de misión que la OTAN tendrá después de 2014 para dar entrenamiento, asistencia y apoyo que los afganos necesitarán", ha explicado, confiando en que los aliados se comprometerán a financiar "su parte" para sostener a las fuerzas afganas a largo plazo.
PROGRESOS PESE A DESAFÍOS
"Pese a los desafíos vemos progresos sobre el terreno", ha insistido. Por un lado, constatan una reducción del 22% del número de ataques de la insurgencia en enero y febrero en comparación con el año anterior y, desde mayo, nunca se habían registrado tantos meses consecutivos en que éstos disminuyen.
"Y cada día las fuerzas de seguridad afganas demuestran una mayor capacidad", ha insistido el danés, que ha confiado en que los aliados dejarán "unas fuerzas de seguridad afganas muy fuertes que serán capaces de proteger al pueblo afgano de los ataques enemigos" manteniendo "el entrenamiento, educación y asesoramiento" de los aliados más allá de 2014.
Por ello, ha insistido en que los talibán cometerían un error si piensan que puedan ganar "esperando a ver cuándo abandonan las tropas internacionales Afganistán". "Si piensan así, no tienen en cuenta que dejaremos atrás unas fuerzas de seguridad afganas muy fuertes", ha insistido.
También ha defendido las "medidas reforzadas" de seguridad a la hora de reclutar a los efectivos afganos y reforzar la Inteligencia sobre los mismos para "impedir" los ataques "desafortunados" de soldados y policías afganos contra las fuerzas internacionales. "Ya hemos introducido un paquete de medidas con vistas a impedir tales incidentes", ha recalcado.
Además, Rasmussen ha dejado claro que la OTAN respeta "plenamente" las decisiones del Parlamento paquistaní, que ha defendido reabrir las líneas de suministro terrestres para las tropas internacionales a través de Pakistán pero sólo para material no letal. "Espero que podamos encontrar soluciones apropiadas a esta cuestión", ha explicado.
PROYECTOS CONJUNTOS
Por otra parte, ha confiado en que los aliados acepten desarrollar capacidades de defensa conjuntas para sortear la crisis y los recortes en Defensa en áreas como los aviones de vigilancia marítima, mantenimiento conjunto de helicópteros y para adquirir robots para proteger contra los artefactos explosivos improvisados, entre otros, tras acordar desarrollar de esta manera conjunta el Sistema de Vigilancia Terrestre de la OTAN. También ha confiado en que declaren la capacidad interina del nuevo escudo antimisiles.
"Tenemos mucho trabajo que hacer para garantizar que la OTAN se mantiene fuerte y capaz en 2020 y más allá", ha zanjado el danés, que también ha confiado en que los líderes aliados refuercen en Chicago la colaboración con terceros países y organismos regionales para atender a los desafíos de seguridad futuros.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha rechazado este lunes que los aliados vayan a acelerar la salida de las tropas de Afganistán, al tiempo que ha defendido el refuerzo de las medidas de seguridad adoptadas para impedir la infiltración de insurgentes en las filas de seguridad afganas ante el creciente número de ataques contra las tropas aliadas por policías y soldados afganos.
"No habrá ningún cambio en nuestro calendario. La transición continuará y se completará a finales de 2014", ha explicado en rueda de prensa, precisando en todo caso que los líderes aliados discutirán en la cumbre de mayo en Chicago "cómo gestionamos en detalle esa transición".
Rasmussen ha insistido en que la fecha pactada para completar el relevo en Afganistán a finales de 2014 "fue presentada por el propio presidente afgano en la cumbre de Lisboa" de noviembre de 2010, tras ser interrogado por la insistencia del mandatario afgano en acelerar la salida de las tropas internacionales tras el polémico incidente de la quema de ejemplares del Corán en la base de Bagram y el aumento de ataques contra el personal de la ISAF por fuerzas de seguridad afganas.
Para poder completar la transición en todo el país a finales de 2014, ha explicado, los aliados deberán transferir el control de las últimas provincias y distritos a las autoridades afganas "a mediados de 2013 o como muy tarde en la segunda mitad de 2013" dado que la transición suele completarse de manera "plena" en un periodo de 12-18 meses y ha augurado que "en breve" habrá otra transferencia de nuevos territorios a los afganos.
"Por eso se menciona de repente 2013, pero no se trata de acelerar el proceso de transición", ha recalcado el danés, que ha lamentado que exista "cierta confusión" sobre esta cuestión.
El secretario general aliado ha insistido en que las fuerzas aliadas "ya han comenzado a cambiar de manera gradual a un papel de apoyo" a las fuerzas afganas en aquellos territorios ya transferidos tras recordar que cerca de la mitad de la población afgana reside en provincias y distritos que ya han pasado a estar bajo la responsabilidad "principal" de los afganos y ha insistido en que en todo caso las tropas aliadas mantienen la capacidad de "llevar a cabo operaciones de combate cuando y donde sea necesario".
Las fuerzas de seguridad afganas encabezan ya el 28% de las operaciones especiales contra la insurgencia, participan en el 42% de las operaciones convencionales y ya llevan a cabo el 85% del entrenamiento de las fuerzas del Ejército y de la Policía, según datos del danés. "Esto demuestra que la transición se puede lograr y que es sostenible", ha explicado.
COMPRENDE TEMOR DE LA POBLACIÓN POR FIN DE MISIÓN
Aunque ha reconocido "comprender las preocupaciones" de la población afgana sobre la preparación suficiente de sus fuerzas de seguridad para combatir la amenaza insurgente tras la salida de las tropas internacionales, ha insistido en que la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad afgana (ISAF) que dirige la OTAN en Afganistán "no es una fuerza de ocupación" y no se puede quedarse "para siempre". "Un día terminará", ha recalcado.
"Obviamente no nos podemos quedar en Afganistán para siempre. La ISAF no es una fuerza de ocupación. Estamos allí para ayudar al pueblo afgano a diseñar su propio futuro pero al final debe ser el pueblo afgano el que asuma la responsabilidad plena de su propio país", ha recalcado.
Rasmussen ha dejado claro que los aliados no abandonarán Afganistán a finales de 2014 sin embargo. "En Chicago, planificaremos cómo vamos a completar la transición y de qué manera seguiremos apoyando a Afganistán más allá de 2014. Acordaremos el tipo de misión que la OTAN tendrá después de 2014 para dar entrenamiento, asistencia y apoyo que los afganos necesitarán", ha explicado, confiando en que los aliados se comprometerán a financiar "su parte" para sostener a las fuerzas afganas a largo plazo.
PROGRESOS PESE A DESAFÍOS
"Pese a los desafíos vemos progresos sobre el terreno", ha insistido. Por un lado, constatan una reducción del 22% del número de ataques de la insurgencia en enero y febrero en comparación con el año anterior y, desde mayo, nunca se habían registrado tantos meses consecutivos en que éstos disminuyen.
"Y cada día las fuerzas de seguridad afganas demuestran una mayor capacidad", ha insistido el danés, que ha confiado en que los aliados dejarán "unas fuerzas de seguridad afganas muy fuertes que serán capaces de proteger al pueblo afgano de los ataques enemigos" manteniendo "el entrenamiento, educación y asesoramiento" de los aliados más allá de 2014.
Por ello, ha insistido en que los talibán cometerían un error si piensan que puedan ganar "esperando a ver cuándo abandonan las tropas internacionales Afganistán". "Si piensan así, no tienen en cuenta que dejaremos atrás unas fuerzas de seguridad afganas muy fuertes", ha insistido.
También ha defendido las "medidas reforzadas" de seguridad a la hora de reclutar a los efectivos afganos y reforzar la Inteligencia sobre los mismos para "impedir" los ataques "desafortunados" de soldados y policías afganos contra las fuerzas internacionales. "Ya hemos introducido un paquete de medidas con vistas a impedir tales incidentes", ha recalcado.
Además, Rasmussen ha dejado claro que la OTAN respeta "plenamente" las decisiones del Parlamento paquistaní, que ha defendido reabrir las líneas de suministro terrestres para las tropas internacionales a través de Pakistán pero sólo para material no letal. "Espero que podamos encontrar soluciones apropiadas a esta cuestión", ha explicado.
PROYECTOS CONJUNTOS
Por otra parte, ha confiado en que los aliados acepten desarrollar capacidades de defensa conjuntas para sortear la crisis y los recortes en Defensa en áreas como los aviones de vigilancia marítima, mantenimiento conjunto de helicópteros y para adquirir robots para proteger contra los artefactos explosivos improvisados, entre otros, tras acordar desarrollar de esta manera conjunta el Sistema de Vigilancia Terrestre de la OTAN. También ha confiado en que declaren la capacidad interina del nuevo escudo antimisiles.
"Tenemos mucho trabajo que hacer para garantizar que la OTAN se mantiene fuerte y capaz en 2020 y más allá", ha zanjado el danés, que también ha confiado en que los líderes aliados refuercen en Chicago la colaboración con terceros países y organismos regionales para atender a los desafíos de seguridad futuros.