Di Matteo quiere que no haya sanciones en la final
Londres, EFE
El entrenador del Chelsea, Roberto Di Matteo, pidió hoy a la UEFA un cambio en la normativa de sanciones por acumulación de tarjetas amarillas, motivo por el que tres de sus jugadores se perderán la final de la Liga de Campeones.
La legislación vigente del máximo organismo futbolístico europeo establece que los jugadores que vean tres amonestaciones durante el campeonato deberán cumplir un partido de sanción.
A causa de esta normativa, tres jugadores del Chelsea -Branislav Ivanovic, Raul Meireles y Ramires-, y tres del Bayern de Múnich -Luiz Gustavo, David Alaba y Holger Badstuber- se perderán la final del próximo 19 de mayo, además del capitán del conjunto londinense, John Terry, que fue expulsado en la vuelta de las semifinales ante el Barcelona por un rodillazo al chileno Alexis Sánchez.
Por ello, varias voces, entre ellas la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) o la del propio Di Matteo, han pedido a la UEFA que aplique la misma regla utilizada en la Copa del Mundo de Sudáfrica, donde los jugadores quedaron limpios de tarjetas al alcanzar las semifinales del torneo.
"Sería lo ideal. La UEFA debería revisar estas leyes de cara al futuro. Lo mejor para los dos equipos sería tener a toda la plantilla disponible para la final, sería la mejor medida", declaró hoy el técnico italiano en la rueda de prensa previa al encuentro de este fin de semana ante el QPR.
En el caso de cambiar la normativa, el exentrenador del West Bromwich y antiguo ayudante del portugués André Villas-Boas podría contar con todos sus efectivos a excepción de Terry y de los futbolistas lesionados en la final del mes que viene en Múnich.
Di Matteo también celebró que el central inglés, a pesar de estar sancionado, pueda recoger el trofeo como capitán del equipo si el Chelsea supera al Bayern, que contará con la ventaja de disputar la final en estadio, el Allianz Arena.
El italiano, que subrayó que no le importa que los alemanes cuenten con el factor campo a su favor, advirtió del potencial del equipo bávaro, que venció al Real Madrid el pasado miércoles en la tanda de penaltis.
"Son un club histórico con mucha tradición en los torneos europeos y que jugarán en su estadio. Va a ser tan difícil o incluso más que si nos hubiéramos enfrentado al Madrid", concluyó el técnico.
El entrenador del Chelsea, Roberto Di Matteo, pidió hoy a la UEFA un cambio en la normativa de sanciones por acumulación de tarjetas amarillas, motivo por el que tres de sus jugadores se perderán la final de la Liga de Campeones.
La legislación vigente del máximo organismo futbolístico europeo establece que los jugadores que vean tres amonestaciones durante el campeonato deberán cumplir un partido de sanción.
A causa de esta normativa, tres jugadores del Chelsea -Branislav Ivanovic, Raul Meireles y Ramires-, y tres del Bayern de Múnich -Luiz Gustavo, David Alaba y Holger Badstuber- se perderán la final del próximo 19 de mayo, además del capitán del conjunto londinense, John Terry, que fue expulsado en la vuelta de las semifinales ante el Barcelona por un rodillazo al chileno Alexis Sánchez.
Por ello, varias voces, entre ellas la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) o la del propio Di Matteo, han pedido a la UEFA que aplique la misma regla utilizada en la Copa del Mundo de Sudáfrica, donde los jugadores quedaron limpios de tarjetas al alcanzar las semifinales del torneo.
"Sería lo ideal. La UEFA debería revisar estas leyes de cara al futuro. Lo mejor para los dos equipos sería tener a toda la plantilla disponible para la final, sería la mejor medida", declaró hoy el técnico italiano en la rueda de prensa previa al encuentro de este fin de semana ante el QPR.
En el caso de cambiar la normativa, el exentrenador del West Bromwich y antiguo ayudante del portugués André Villas-Boas podría contar con todos sus efectivos a excepción de Terry y de los futbolistas lesionados en la final del mes que viene en Múnich.
Di Matteo también celebró que el central inglés, a pesar de estar sancionado, pueda recoger el trofeo como capitán del equipo si el Chelsea supera al Bayern, que contará con la ventaja de disputar la final en estadio, el Allianz Arena.
El italiano, que subrayó que no le importa que los alemanes cuenten con el factor campo a su favor, advirtió del potencial del equipo bávaro, que venció al Real Madrid el pasado miércoles en la tanda de penaltis.
"Son un club histórico con mucha tradición en los torneos europeos y que jugarán en su estadio. Va a ser tan difícil o incluso más que si nos hubiéramos enfrentado al Madrid", concluyó el técnico.