Siete heridos por un atentado en Afganistán, cuatro de ellos soldados de la OTAN
Afganistán, AFP
Cuatro soldados de la OTAN, uno de sus traductores y un policía afgano resultaron heridos este viernes en un atentado suicida con una moto bomba lanzada contra su convoy al sur de Afganistán, anunció el gobernador de la provincia de Kandahar.
La fuerza internacional de la OTAN (ISAF) confirmó a la AFP el ataque de uno de sus convoyes y anunció que no hubo muertos que deplorar.
"Un kamikaze precipitó su moto bomba contra un convoy de tropas de la OTAN en el distrito de Dand (provincia de Kandahar), e hirió cuatro soldados extranjeros, un policía, un traductor y un civil", declaró por teléfono a la AFP Toryalaï Weesa, gobernador de la provincia. La ISAF no reveló la nacionalidad de los soldados heridos pero los estadounidenses forman más de dos tercios de la fuerza internacional y la casi totalidad en la provincia de Kandahar.
Este nuevo ataque se produce diez días después que ejemplares del Corán fueron incinerados en la mayor base estadounidense del país, provocando cinco días de motines anti-estadounidenses y atentados mortíferos en todo el país, con los talibanes que llamaron a los afganos a matar "más" soldados extranjeros.
Cuatro soldados de la OTAN, uno de sus traductores y un policía afgano resultaron heridos este viernes en un atentado suicida con una moto bomba lanzada contra su convoy al sur de Afganistán, anunció el gobernador de la provincia de Kandahar.
La fuerza internacional de la OTAN (ISAF) confirmó a la AFP el ataque de uno de sus convoyes y anunció que no hubo muertos que deplorar.
"Un kamikaze precipitó su moto bomba contra un convoy de tropas de la OTAN en el distrito de Dand (provincia de Kandahar), e hirió cuatro soldados extranjeros, un policía, un traductor y un civil", declaró por teléfono a la AFP Toryalaï Weesa, gobernador de la provincia. La ISAF no reveló la nacionalidad de los soldados heridos pero los estadounidenses forman más de dos tercios de la fuerza internacional y la casi totalidad en la provincia de Kandahar.
Este nuevo ataque se produce diez días después que ejemplares del Corán fueron incinerados en la mayor base estadounidense del país, provocando cinco días de motines anti-estadounidenses y atentados mortíferos en todo el país, con los talibanes que llamaron a los afganos a matar "más" soldados extranjeros.