Unas 6.000 personas se concentran para pedir la dimisión del Gobierno húngaro
Budapest, EP
Unas 6.000 personas se han manifestado frente al Parlamento de Hungría para pedir la dimisión del primer ministro, Victor Orban y su gobierno de centro-derecha que, dicen, ha socavado los valores democráticos y debilitado la economía.
"Hoy debemos decir con decisión y con claridad que Viktor Orban y su cuadrilla deben ser retirados tan pronto como sea posible en unas elecciones", ha dicho el líder del Movimiento de Solidaridad de Hungría, Peter Konya, ante cerca los asistentes.
El partido de Orban, la Unión Cívica Húngara (Fidesz), ha restado importancia a la manifestación diciendo que ha comenzado a restaurarse la estabilidad económica y que ha trabajado con éxito para preservar la estabilidad política en el proceso.
"No ha habido una protesta masiva contra las reformas sociales que puedan obligar a los poderes del Gobierno a dar marcha atrás", ha señaladado en un comunicado por correo electrónico la portavoz de Fidesz Gabriella Selmeczi.
La economía húngara es la más endeudada de Europa del Este y ha tenido una serie de desacuerdos con la UE, algunos de ellos en relación a la independencia del banco central, el sistema judicial y la protección de datos, que han retrasado el inicio de las conversaciones para negociar un paquete de ayudas de la UE y del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El apoyo al partido se ha visto profundamente reducido a la inversa que las críticas por las políticas de recorte que ha llevado a cabo desde su victoria en las elecciones de 2010.
Unas 6.000 personas se han manifestado frente al Parlamento de Hungría para pedir la dimisión del primer ministro, Victor Orban y su gobierno de centro-derecha que, dicen, ha socavado los valores democráticos y debilitado la economía.
"Hoy debemos decir con decisión y con claridad que Viktor Orban y su cuadrilla deben ser retirados tan pronto como sea posible en unas elecciones", ha dicho el líder del Movimiento de Solidaridad de Hungría, Peter Konya, ante cerca los asistentes.
El partido de Orban, la Unión Cívica Húngara (Fidesz), ha restado importancia a la manifestación diciendo que ha comenzado a restaurarse la estabilidad económica y que ha trabajado con éxito para preservar la estabilidad política en el proceso.
"No ha habido una protesta masiva contra las reformas sociales que puedan obligar a los poderes del Gobierno a dar marcha atrás", ha señaladado en un comunicado por correo electrónico la portavoz de Fidesz Gabriella Selmeczi.
La economía húngara es la más endeudada de Europa del Este y ha tenido una serie de desacuerdos con la UE, algunos de ellos en relación a la independencia del banco central, el sistema judicial y la protección de datos, que han retrasado el inicio de las conversaciones para negociar un paquete de ayudas de la UE y del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El apoyo al partido se ha visto profundamente reducido a la inversa que las críticas por las políticas de recorte que ha llevado a cabo desde su victoria en las elecciones de 2010.