Rasmussen dice que aliados europeos deben reequilibrar su peso con EEUU en la OTAN
Bruselas, EP
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha insistido este viernes en que "los aliados europeos deben estar preparados y ser capaces de asumir un mayor liderazgo" en el seno de la Alianza Atlántica frente a Estados Unidos a la hora de contribuir a la seguridad colectiva y contribuir a la seguridad internacional y ha confiado en que 'el reequilibrio' se produzca en el horizonte de 2020.
"Necesitamos una relación transatlántica reequilibrada", ha asegurado el danés en una conferencia organizada por el 'think thank' Brussels Forum, en la que ha desglosado su visión de lo que debe ser la OTAN en el horizonte de 2020.
Rasmussen ha confiado en que los europeos "pueden hacerlo" tras recordar su peso, junto con Canadá, en la reciente operación en Libia, el liderazgo claro de Alemania en Kosovo desde hace años y su importante contribución en Afganistán, aunque ha lamentado los recortes en Defensa de 20 aliados entre 2008 y 2011, mientras que Rusia doblará su presupuesto en la próxima década y la región de Asia superará "por primera vez" el gasto de los aliados europeos en su conjunto este año.
"Estas disminuciones en los presupuestos de Defensa europeos son una preocupación porque todos los recortes de hoy tendrán consecuencias para la seguridad del mañana y de lo que podamos hacer como Alianza", ha alertado sin embargo.
"Europa necesita reforzar sus responsabilidades globales junto a Estados Unidos. Porque cuando los tiempos son difíciles, nos necesitamos mucho más que nunca. Todos tenemos interés en mantener fuerte a cada uno de nosotros. Y tanto en los buenos tiempos como en los malos, no tenemos alternativa viable a una relación de seguridad atlántica fuerte", ha recalcado, insistiendo la necesidad de lograr en 2020 "la responsabilidad compartida y el liderazgo compartido" en el seno de la Alianza.
En todo caso, ha dejado claro que no comparte que la revisión de la estrategia de Defensa de la Administración de Barack Obama, que prevé una reducción de las fuerzas y bases estadounidenses en Europa y un mayor peso en el Pacífico asiático, "vaya a ser a expensas de Europa y de la relación transatlántica" como algunos temen, porque se trata de una región estratégica también para los europeos.
CAPACIDADES QUE FALTAN
De cara al futuro, ha recordado que hacen falta más capacidades de reabastecimiento en vuelo, inteligencia, vigilancia y reconocimiento y municiones inteligentes como ha demostrado la operación en Libia y ha defendido los beneficios de proyectos multinacionales para desarrollar capacidades conjuntas como el Sistema de Vigilancia Terrestre (AGS) en el que 13 aliados adquirirán cinco aviones no tripulados que ofrecerán "toda la imagen de lo que sucede sobre el terreno" en las operaciones o la creación del escudo antimisiles en la próxima década.
"En 2020, la OTAN deben poder estar preparada para responder a una amplia variedad de tareas de seguridad. Necesitaremos seguir siendo capaces de articular operaciones conjuntas complejas y en poco tiempo, con un elevado impacto y alta precisión. Esto significa que necesitaremos fuerzas flexibles, rápidamente desplegables. Y la combinación correcta de las capacidades militares", ha concluido.
El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, ha insistido este viernes en que "los aliados europeos deben estar preparados y ser capaces de asumir un mayor liderazgo" en el seno de la Alianza Atlántica frente a Estados Unidos a la hora de contribuir a la seguridad colectiva y contribuir a la seguridad internacional y ha confiado en que 'el reequilibrio' se produzca en el horizonte de 2020.
"Necesitamos una relación transatlántica reequilibrada", ha asegurado el danés en una conferencia organizada por el 'think thank' Brussels Forum, en la que ha desglosado su visión de lo que debe ser la OTAN en el horizonte de 2020.
Rasmussen ha confiado en que los europeos "pueden hacerlo" tras recordar su peso, junto con Canadá, en la reciente operación en Libia, el liderazgo claro de Alemania en Kosovo desde hace años y su importante contribución en Afganistán, aunque ha lamentado los recortes en Defensa de 20 aliados entre 2008 y 2011, mientras que Rusia doblará su presupuesto en la próxima década y la región de Asia superará "por primera vez" el gasto de los aliados europeos en su conjunto este año.
"Estas disminuciones en los presupuestos de Defensa europeos son una preocupación porque todos los recortes de hoy tendrán consecuencias para la seguridad del mañana y de lo que podamos hacer como Alianza", ha alertado sin embargo.
"Europa necesita reforzar sus responsabilidades globales junto a Estados Unidos. Porque cuando los tiempos son difíciles, nos necesitamos mucho más que nunca. Todos tenemos interés en mantener fuerte a cada uno de nosotros. Y tanto en los buenos tiempos como en los malos, no tenemos alternativa viable a una relación de seguridad atlántica fuerte", ha recalcado, insistiendo la necesidad de lograr en 2020 "la responsabilidad compartida y el liderazgo compartido" en el seno de la Alianza.
En todo caso, ha dejado claro que no comparte que la revisión de la estrategia de Defensa de la Administración de Barack Obama, que prevé una reducción de las fuerzas y bases estadounidenses en Europa y un mayor peso en el Pacífico asiático, "vaya a ser a expensas de Europa y de la relación transatlántica" como algunos temen, porque se trata de una región estratégica también para los europeos.
CAPACIDADES QUE FALTAN
De cara al futuro, ha recordado que hacen falta más capacidades de reabastecimiento en vuelo, inteligencia, vigilancia y reconocimiento y municiones inteligentes como ha demostrado la operación en Libia y ha defendido los beneficios de proyectos multinacionales para desarrollar capacidades conjuntas como el Sistema de Vigilancia Terrestre (AGS) en el que 13 aliados adquirirán cinco aviones no tripulados que ofrecerán "toda la imagen de lo que sucede sobre el terreno" en las operaciones o la creación del escudo antimisiles en la próxima década.
"En 2020, la OTAN deben poder estar preparada para responder a una amplia variedad de tareas de seguridad. Necesitaremos seguir siendo capaces de articular operaciones conjuntas complejas y en poco tiempo, con un elevado impacto y alta precisión. Esto significa que necesitaremos fuerzas flexibles, rápidamente desplegables. Y la combinación correcta de las capacidades militares", ha concluido.