La oposición en Argentina pedirá un juicio político al vicepresidente
Buenos Aires, EFE
Diputados opositores de Argentina solicitarán este lunes la apertura de un juicio político con fines de destitución contra el vicepresidente argentino, Amado Boudou, al que acusan de haber intercedido como funcionario en favor de una empresa privada.
Fuentes parlamentarias confirmaron hoy a Efe que la presentación será realizada por los diputados Patricia Bullrich (Unión por Todos), Federico Pinedo (Propuesta Republicana, Pro) y Eduardo Amadeo (Peronismo Federal, disidente).
Los legisladores opositores acusan a Boudou de haber utilizado sus influencias en 2010, cuando era ministro de Economía, en favor de Ciccone, una empresa privada dedicada a la impresión de dinero.
"Si hay un funcionario cuyas actuaciones son incompatibles con sus funciones, no puede seguir en su cargo", había dicho este sábado Bullrich en declaraciones a una radio local.
Desde el oficialismo, con mayoría en ambas Cámaras del Congreso, ya anticiparon que rechazarán el pedido que harán este lunes los legisladores opositores.
Medios locales revelaron que Ciccone es dirigida por Alejandro Vandenbroele, con vínculos con José María Núñez Carmona, socio de Boudou.
Ante el escándalo del "caso Ciccone", que es investigado por la Justicia, el viernes pasado, el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, negó en rueda de prensa que Boudou hubiera intercedido para pedir el levantamiento de la quiebra de la empresa.
El jefe del Fisco precisó que en julio de 2010 un juzgado del fuero comercial declaró la quiebra de Ciccone a petición de la AFIP por deudas impositivas.
Dijo que asimismo la Justicia levantó la quiebra en septiembre de 2010 por solicitud de la propia empresa, que luego pidió a la AFIP un plan de pagos para saldar sus deudas.
Pero reconoció la existencia de una nota a la AFIP en la que Boudou se manifiesta a favor de darle a la firma facilidades para saldar sus deuda impositiva.
"Consideramos oportuno avanzar en el pedido de juicio político. La gota que rebasó el vaso fue la nota que Boudou manda a la AFIP pidiéndole un régimen especialísimo para una empresa, una excepción, en favor de sus amigos", consideró Bullrich.
La Casa de la Moneda, encargada oficial de la impresión de billetes en Argentina, informó en enero pasado al Banco Central que preveía contratar a Ciccone para imprimir billetes de 100 pesos (23 dólares), un negocio que medios locales calcularon en cerca de 50 millones de dólares.
La también opositora Coalición Cívica dijo la semana pasada que también planea solicitar el juicio político contra el vicepresidente para determinar su "responsabilidad política" en el "caso Ciccone" y el "posible ejercicio irregular de sus funciones".
Boudou ha asegurado al canal público de la televisión argentina que las denuncias en su contra por el caso Ciccone "no tienen el menor asidero" y afirmó que no ha hecho "nada que esté fuera de las normativas o dentro de algún abuso personal".
Diputados opositores de Argentina solicitarán este lunes la apertura de un juicio político con fines de destitución contra el vicepresidente argentino, Amado Boudou, al que acusan de haber intercedido como funcionario en favor de una empresa privada.
Fuentes parlamentarias confirmaron hoy a Efe que la presentación será realizada por los diputados Patricia Bullrich (Unión por Todos), Federico Pinedo (Propuesta Republicana, Pro) y Eduardo Amadeo (Peronismo Federal, disidente).
Los legisladores opositores acusan a Boudou de haber utilizado sus influencias en 2010, cuando era ministro de Economía, en favor de Ciccone, una empresa privada dedicada a la impresión de dinero.
"Si hay un funcionario cuyas actuaciones son incompatibles con sus funciones, no puede seguir en su cargo", había dicho este sábado Bullrich en declaraciones a una radio local.
Desde el oficialismo, con mayoría en ambas Cámaras del Congreso, ya anticiparon que rechazarán el pedido que harán este lunes los legisladores opositores.
Medios locales revelaron que Ciccone es dirigida por Alejandro Vandenbroele, con vínculos con José María Núñez Carmona, socio de Boudou.
Ante el escándalo del "caso Ciccone", que es investigado por la Justicia, el viernes pasado, el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray, negó en rueda de prensa que Boudou hubiera intercedido para pedir el levantamiento de la quiebra de la empresa.
El jefe del Fisco precisó que en julio de 2010 un juzgado del fuero comercial declaró la quiebra de Ciccone a petición de la AFIP por deudas impositivas.
Dijo que asimismo la Justicia levantó la quiebra en septiembre de 2010 por solicitud de la propia empresa, que luego pidió a la AFIP un plan de pagos para saldar sus deudas.
Pero reconoció la existencia de una nota a la AFIP en la que Boudou se manifiesta a favor de darle a la firma facilidades para saldar sus deuda impositiva.
"Consideramos oportuno avanzar en el pedido de juicio político. La gota que rebasó el vaso fue la nota que Boudou manda a la AFIP pidiéndole un régimen especialísimo para una empresa, una excepción, en favor de sus amigos", consideró Bullrich.
La Casa de la Moneda, encargada oficial de la impresión de billetes en Argentina, informó en enero pasado al Banco Central que preveía contratar a Ciccone para imprimir billetes de 100 pesos (23 dólares), un negocio que medios locales calcularon en cerca de 50 millones de dólares.
La también opositora Coalición Cívica dijo la semana pasada que también planea solicitar el juicio político contra el vicepresidente para determinar su "responsabilidad política" en el "caso Ciccone" y el "posible ejercicio irregular de sus funciones".
Boudou ha asegurado al canal público de la televisión argentina que las denuncias en su contra por el caso Ciccone "no tienen el menor asidero" y afirmó que no ha hecho "nada que esté fuera de las normativas o dentro de algún abuso personal".