Policía bahreiní dispersa a manifestantes y el Rey llama a la cohesión
DUBÁI, AFP
Una mujer escapa de los gases de la policíaLas fuerzas antimotines bahreiníes dispersaron violentamente este martes a manifestantes que conmemoraban el aniversario del inicio de las protestas contra el régimen, cuya represión sumió a este pequeño reino del Golfo en un atolladero político.
En un discurso en el que no aludió al aniversario del levantamiento, el rey Hamad Ben Isa Al Jalifa llamó a la "cohesión" entre las comunidades chiita y sunita, hoy más que nunca divididas.
La policía, desplegada en las principales arterias, intervino para dispersar a cientos de manifestantes que trataron de acercarse a la plaza de la Perla, símbolo de la contestación en Manama.
Según testigos, la policía detuvo a varios manifestantes entre los cuales mujeres que trataron de acercarse a la plaza, totalmente cercada y custodiada por tanques.
Las autoridades multiplicaron las restricciones con motivo del aniversario del levantamiento, absteniéndose en particular de otorgar visa a los corresponsales de la prensa extranjera.
Algunos de los jóvenes manifestantes, provenientes de los poblados chiitas de los alrededores de Manama, pudieron llegar hasta unos 500 metros de la plaza de la Perla, a pesar del importante dispositivo de seguridad que la rodeaba, indicaron los testigos.
"Abajo el rey Hamad", gritaban los jóvenes, algunos de los cuales vestidos con un sudario blanco, para declarar su disposición al martirio, y enarbolando la bandera rojo y blanco de Bahréin.
La policía lanzó granadas lacrimógenas y ensordecedoras para dispersar a los jóvenes, que manifestaban al llamado de la coalición "Jóvenes del 14 de febrero", grupo radical que utiliza las redes sociales para sus movilizaciones.
La coalición había proclamado el martes "jornada del retorno" a la plaza de la Perla.
Desde el domingo, los militantes tratan de desafiar a la policía y avanzar hacia la plaza donde los opositores había efectuado una sentada desde el 14 de febrero hasta mediados de marzo de 2011 antes de ser violentamente expulsados por las autoridades, que destruyeron el monumento central de la plaza.
Pero los partidos de la oposición tradicional dirigidos por el Wefaq, no apoyaron el llamado a marchar hasta la plaza.
Esta plaza "se ha "convertido en un símbolo del movimiento de reivindicación" pero no es el único lugar de manifestaciones, anunciaron en un comunicado.
"Todas la plazas y las calles de nuestro país son lugares donde renovamos nuestro compromiso de continuar la lucha hasta obtener satisfacción a nuestras reivindicaciones", agregaron, reiterando su demanda de un parlamento con plenos poderes y un gobierno resultado de una elección.
Sin evocar la conmemoración de la contestación, en un discurso, el rey Hamad llamó a "un espíritu de cohesión y de reunificación entre todos los componentes del pueblo de Bahréin".
"El proceso de reformas, de desarrollo y de modernización de nuestro país continuará con una participación popular más amplia, que se expresará mediante una Asamblea elegida para ejercer su papel de control sobre la acción del gobierno", prometió.
Estados Unidos había llamado el lunes a la "moderación" en Bahréin, sede de la Quinta Flota , llamando a todas las partes a "evitar la violencia" y "a encontrar el medio de iniciar un verdadero diálogo sobre el futuro político" del país.
Una mujer escapa de los gases de la policíaLas fuerzas antimotines bahreiníes dispersaron violentamente este martes a manifestantes que conmemoraban el aniversario del inicio de las protestas contra el régimen, cuya represión sumió a este pequeño reino del Golfo en un atolladero político.
En un discurso en el que no aludió al aniversario del levantamiento, el rey Hamad Ben Isa Al Jalifa llamó a la "cohesión" entre las comunidades chiita y sunita, hoy más que nunca divididas.
La policía, desplegada en las principales arterias, intervino para dispersar a cientos de manifestantes que trataron de acercarse a la plaza de la Perla, símbolo de la contestación en Manama.
Según testigos, la policía detuvo a varios manifestantes entre los cuales mujeres que trataron de acercarse a la plaza, totalmente cercada y custodiada por tanques.
Las autoridades multiplicaron las restricciones con motivo del aniversario del levantamiento, absteniéndose en particular de otorgar visa a los corresponsales de la prensa extranjera.
Algunos de los jóvenes manifestantes, provenientes de los poblados chiitas de los alrededores de Manama, pudieron llegar hasta unos 500 metros de la plaza de la Perla, a pesar del importante dispositivo de seguridad que la rodeaba, indicaron los testigos.
"Abajo el rey Hamad", gritaban los jóvenes, algunos de los cuales vestidos con un sudario blanco, para declarar su disposición al martirio, y enarbolando la bandera rojo y blanco de Bahréin.
La policía lanzó granadas lacrimógenas y ensordecedoras para dispersar a los jóvenes, que manifestaban al llamado de la coalición "Jóvenes del 14 de febrero", grupo radical que utiliza las redes sociales para sus movilizaciones.
La coalición había proclamado el martes "jornada del retorno" a la plaza de la Perla.
Desde el domingo, los militantes tratan de desafiar a la policía y avanzar hacia la plaza donde los opositores había efectuado una sentada desde el 14 de febrero hasta mediados de marzo de 2011 antes de ser violentamente expulsados por las autoridades, que destruyeron el monumento central de la plaza.
Pero los partidos de la oposición tradicional dirigidos por el Wefaq, no apoyaron el llamado a marchar hasta la plaza.
Esta plaza "se ha "convertido en un símbolo del movimiento de reivindicación" pero no es el único lugar de manifestaciones, anunciaron en un comunicado.
"Todas la plazas y las calles de nuestro país son lugares donde renovamos nuestro compromiso de continuar la lucha hasta obtener satisfacción a nuestras reivindicaciones", agregaron, reiterando su demanda de un parlamento con plenos poderes y un gobierno resultado de una elección.
Sin evocar la conmemoración de la contestación, en un discurso, el rey Hamad llamó a "un espíritu de cohesión y de reunificación entre todos los componentes del pueblo de Bahréin".
"El proceso de reformas, de desarrollo y de modernización de nuestro país continuará con una participación popular más amplia, que se expresará mediante una Asamblea elegida para ejercer su papel de control sobre la acción del gobierno", prometió.
Estados Unidos había llamado el lunes a la "moderación" en Bahréin, sede de la Quinta Flota , llamando a todas las partes a "evitar la violencia" y "a encontrar el medio de iniciar un verdadero diálogo sobre el futuro político" del país.