Los talibán atentan contra fuerzas de la OTAN y matan a dos militares de EE.UU
Madrid, EP
Los talibán han atentado este sábado contra la misión de la OTAN en Afganistán (ISAF), matando a dos militares estadounidenses, como represalia por la quema de ejemplares del Corán en la base militar de Bagram, que desencadenó una ola de protestas generalizadas que dura ya cinco días.
El ataque perpetrado por los milicianos talibán ha tenido lugar dentro de la sede del Ministerio del Interior afgano en Kabul y en el que han fallecido un comandante y un coronel que trabajaban en calidad de instructores de la ISAF.
Según informa Al Yazira, los dos militares estadounidenses se encontraban en una zona utilizada solo por los asesores extranjeros. Los únicos afganos con acceso a esa zona son traductores, indica la cadena.
Pocas horas después del atentado la OTAN ordenaba a todo su personal que abandonase los ministerios afganos y el Gobierno británico seguía su ejemplo ordenando la retirada de su plantilla en las instituciones afganas en Kabul como medida de seguridad.
"Por razones obvias y para la protección de nuestras fuerzas, he tomado medidas inmediatas para llamar a todo el personal de la ISAF que está trabajando en los ministerios que se encuentran en el interior y a las afueras de Kabul", ha explicado el comandante de la misión de la ISAF, el general John Allen.
"Como medida de seguridad temporal, la Embajada ha retirado a los mentores civiles y a sus asesores de las instituciones en el interior de Kabul", anunciaba por su parte el Ministerio de Asuntos Exteriores británico en un comunicado recogido por la cadena Sky News.
El corresponsal de Al Yazira ha informado de que la ISAF ha cerrado el acceso a su centro control en el que los dos cuerpos fueron encontrados. "Los afganos no participan en la investigación sobre la muerte de los dos asesores de alto nivel", ha afirmado el corresponsal.
Un portavoz talibán, Zabiulá Muyahid, ha explicado que un cómplice del interior del Ministerio ayudó al atacante, un hombre llamado Abdul Rahman, a acceder al edificio. Además, Muyahid ha afirmado que son cuatro las personas que han muerto en el ataque. "Después del ataque, Rahman nos informó por teléfono de que había conseguido matar a cuatro altos asesores estadounidenses", dijo Mujahid.
Por otro lado, en las protestas celebradas este sábado en las provincias de Kunduz y Logar, por lo menos cuatro manifestantes han muerto y 34 han resultado heridos.
En Kunduz, tres manifestantes han muerto frente a un complejo de Naciones Unidas y otros 30 han resultado heridos, según fuentes médicas citadas por Al Yazira. La protesta dio un giro violento después de que los manifestantes arrojaran piedras contra edificios oficiales y contra la oficina de la ONU, según ha explicado el portavoz de la Policía provincial, Sarwer Hussaini, quién también ha confirmado que la Policía había lanzado disparos al aire.
Una portavoz de la misión de Naciones Unidas en Afganistan (UNAMA),
Denise Jeanmonod, ha confirmado el incidente y ha dicho que la organización está ya "evaluando la situación en el lugar".
En Logar, una provincia situada al sur de Kabul, otro manifestante ha muerto y cuatro han resultado heridos después de que cientos de manifestantes salieran a las calles y se enfrentaran con las fuerzas de seguridad.
También se han producido hoy protestas en otras provincias de Afganistán como en Sar-e-pol y en Nangarhar. En la provincia de Laghman
la manifestación también ha estado marcada por la violencia, unas 1.000 personas han arrojado piedras a la Policía y han intentado tomar por asalto la casa del gobernador. Al Yazira afirma que hay más victimas por esta protesta pero señala que no se ha confirmado el número de heridos.
Las cuatro personas fallecidas este sábado elevan a más de 30 personas la cifra total de muertos desde que comenzó la ola de protestas por la quema de ejemplares del Corán hace cinco días. Esta cifra incluye a otros dos soldados estadounidenses que murieron tiroteados el jueves en el este de Afganistán.
Los talibán han atentado este sábado contra la misión de la OTAN en Afganistán (ISAF), matando a dos militares estadounidenses, como represalia por la quema de ejemplares del Corán en la base militar de Bagram, que desencadenó una ola de protestas generalizadas que dura ya cinco días.
El ataque perpetrado por los milicianos talibán ha tenido lugar dentro de la sede del Ministerio del Interior afgano en Kabul y en el que han fallecido un comandante y un coronel que trabajaban en calidad de instructores de la ISAF.
Según informa Al Yazira, los dos militares estadounidenses se encontraban en una zona utilizada solo por los asesores extranjeros. Los únicos afganos con acceso a esa zona son traductores, indica la cadena.
Pocas horas después del atentado la OTAN ordenaba a todo su personal que abandonase los ministerios afganos y el Gobierno británico seguía su ejemplo ordenando la retirada de su plantilla en las instituciones afganas en Kabul como medida de seguridad.
"Por razones obvias y para la protección de nuestras fuerzas, he tomado medidas inmediatas para llamar a todo el personal de la ISAF que está trabajando en los ministerios que se encuentran en el interior y a las afueras de Kabul", ha explicado el comandante de la misión de la ISAF, el general John Allen.
"Como medida de seguridad temporal, la Embajada ha retirado a los mentores civiles y a sus asesores de las instituciones en el interior de Kabul", anunciaba por su parte el Ministerio de Asuntos Exteriores británico en un comunicado recogido por la cadena Sky News.
El corresponsal de Al Yazira ha informado de que la ISAF ha cerrado el acceso a su centro control en el que los dos cuerpos fueron encontrados. "Los afganos no participan en la investigación sobre la muerte de los dos asesores de alto nivel", ha afirmado el corresponsal.
Un portavoz talibán, Zabiulá Muyahid, ha explicado que un cómplice del interior del Ministerio ayudó al atacante, un hombre llamado Abdul Rahman, a acceder al edificio. Además, Muyahid ha afirmado que son cuatro las personas que han muerto en el ataque. "Después del ataque, Rahman nos informó por teléfono de que había conseguido matar a cuatro altos asesores estadounidenses", dijo Mujahid.
Por otro lado, en las protestas celebradas este sábado en las provincias de Kunduz y Logar, por lo menos cuatro manifestantes han muerto y 34 han resultado heridos.
En Kunduz, tres manifestantes han muerto frente a un complejo de Naciones Unidas y otros 30 han resultado heridos, según fuentes médicas citadas por Al Yazira. La protesta dio un giro violento después de que los manifestantes arrojaran piedras contra edificios oficiales y contra la oficina de la ONU, según ha explicado el portavoz de la Policía provincial, Sarwer Hussaini, quién también ha confirmado que la Policía había lanzado disparos al aire.
Una portavoz de la misión de Naciones Unidas en Afganistan (UNAMA),
Denise Jeanmonod, ha confirmado el incidente y ha dicho que la organización está ya "evaluando la situación en el lugar".
En Logar, una provincia situada al sur de Kabul, otro manifestante ha muerto y cuatro han resultado heridos después de que cientos de manifestantes salieran a las calles y se enfrentaran con las fuerzas de seguridad.
También se han producido hoy protestas en otras provincias de Afganistán como en Sar-e-pol y en Nangarhar. En la provincia de Laghman
la manifestación también ha estado marcada por la violencia, unas 1.000 personas han arrojado piedras a la Policía y han intentado tomar por asalto la casa del gobernador. Al Yazira afirma que hay más victimas por esta protesta pero señala que no se ha confirmado el número de heridos.
Las cuatro personas fallecidas este sábado elevan a más de 30 personas la cifra total de muertos desde que comenzó la ola de protestas por la quema de ejemplares del Corán hace cinco días. Esta cifra incluye a otros dos soldados estadounidenses que murieron tiroteados el jueves en el este de Afganistán.