Falcioni discutió con Riquelme y se quiere ir
Buenos Aires, Clarín
Pasado el mediodía, después de una noche y un vuelo muy calientes, el plantel de Boca volvió a Buenos Aires, tras el deslucido 0-0 con el Zamora en Venezuela. Y, parece, que tocó tierra sin técnico, porque Julio César Falcioni estaría dispuesto a renunciar luego de una fuerte discusión con Juan Román Riquelme. Esta tarde, según lo confirmó el presidente Daniel Angelici, habrá una reunión clave con el entrenador.
“Esperemos que continúe. Tiene nuestro respaldo. En el transcurso del día nos reuniremos con él”, dijo Angelici, apenas salió del aeropuerto. Y aclaró: “Falcioni no renunció”. Además, contó que con Riquelme no habló y que también tendrá una reunión “con los jugadores”.
¿Qué motivó todo esto? La verdad la tienen los protagonistas y sólo ellos la conocen. Pero los rumores indican que todo se habría generado por la salida de la cancha de Darío Cvitanich, quien le habría planteado su disconformidad al propio DT. Tras la conferencia de prensa que Falcioni les dio a los periodistas, fue al vestuario y allí apareció Riquelme para, se cree, cuestionarle esa modificación, ya que para él tendría que haber salido un volante para que ingresara Mouche y no el otro delantero del equipo.
Al técnico no le habría gustado este cuestionamiento y por eso no dudó en plantearse que juntos no podrán convivir en el equipo, mientras sigan esos reclamos tácticos. En el avión también se vio el producto de esa discusión: Falcioni sentado en la fila 5 y Riquelme en la 32, con un técnico solitario y un clima que se asimilaba más a una eliminación que a un empate como visitante.
Al llegar a Buenos Aires, tras un vuelo largo en el que Angelici intentó convencer a Falcioni de que no presentara su renuncia, el técnico y los jugadores optaron por el silencio. Salvo uno: Riquelme. Aunque, claro, evitó agrandar la polémica: "No sé de qué hablan. Recién me bajo del avión. Lo único que dijo el técnico fue que mañana entrenamos 9.30". Ahora, la pelota pasa a Angelici, quien buscará, en las próximas horas, solucionar los problemas del DT para asegurarle un clima pacífico y confirmar su continuidad al frente del equipo campeón de la Argentina. Por las dudas, ya habría un plan B, con dos entrenadores del paladar de Riquelme: Miguel Angel Russo y, claro, Carlos Bianchi.
Pasado el mediodía, después de una noche y un vuelo muy calientes, el plantel de Boca volvió a Buenos Aires, tras el deslucido 0-0 con el Zamora en Venezuela. Y, parece, que tocó tierra sin técnico, porque Julio César Falcioni estaría dispuesto a renunciar luego de una fuerte discusión con Juan Román Riquelme. Esta tarde, según lo confirmó el presidente Daniel Angelici, habrá una reunión clave con el entrenador.
“Esperemos que continúe. Tiene nuestro respaldo. En el transcurso del día nos reuniremos con él”, dijo Angelici, apenas salió del aeropuerto. Y aclaró: “Falcioni no renunció”. Además, contó que con Riquelme no habló y que también tendrá una reunión “con los jugadores”.
¿Qué motivó todo esto? La verdad la tienen los protagonistas y sólo ellos la conocen. Pero los rumores indican que todo se habría generado por la salida de la cancha de Darío Cvitanich, quien le habría planteado su disconformidad al propio DT. Tras la conferencia de prensa que Falcioni les dio a los periodistas, fue al vestuario y allí apareció Riquelme para, se cree, cuestionarle esa modificación, ya que para él tendría que haber salido un volante para que ingresara Mouche y no el otro delantero del equipo.
Al técnico no le habría gustado este cuestionamiento y por eso no dudó en plantearse que juntos no podrán convivir en el equipo, mientras sigan esos reclamos tácticos. En el avión también se vio el producto de esa discusión: Falcioni sentado en la fila 5 y Riquelme en la 32, con un técnico solitario y un clima que se asimilaba más a una eliminación que a un empate como visitante.
Al llegar a Buenos Aires, tras un vuelo largo en el que Angelici intentó convencer a Falcioni de que no presentara su renuncia, el técnico y los jugadores optaron por el silencio. Salvo uno: Riquelme. Aunque, claro, evitó agrandar la polémica: "No sé de qué hablan. Recién me bajo del avión. Lo único que dijo el técnico fue que mañana entrenamos 9.30". Ahora, la pelota pasa a Angelici, quien buscará, en las próximas horas, solucionar los problemas del DT para asegurarle un clima pacífico y confirmar su continuidad al frente del equipo campeón de la Argentina. Por las dudas, ya habría un plan B, con dos entrenadores del paladar de Riquelme: Miguel Angel Russo y, claro, Carlos Bianchi.