Ortega asume hoy con amplio poder su tercer mandato en Nicaragua
MANAGUA, AFP
El líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) gobernará por segundo periodo consecutivo contando con 63 de los 92 diputados en la legistatura instalada este lunes en un ceremonia encabezada por el presidente del Consejo Supreno Electoral (CSE) , Roberto Rivas.
A la investidura, que se celebrará en la tarde de este martes, asistirán, además de Chávez y Ahmadineyad, Ricardo Martinelli (Panamá) ; Porfirio Lobo (Honduras) ; Mauricio Funes (El Salvador) ; Alvaro Colom y el gobernante electo Otto Pérez (Guatemala) ; Desi Bouterse (Surinam) ; Michel Martelly (Haití) ; el príncipe Felipe de Borbón, y otros dignatarios.
Ahmadineyad, quien se encuentra en Caracas y cumple una gira que incluye a Cuba y Ecuador, llegará a Managua este martes, al igual que Chávez.
“Abrimos nuevas páginas para seguir escribiendo esta historia brillante de luz, de verdad, inspirados en valores culturales, religiosos y de fe” , dijo Rosario Murillo, primera dama y portavoz del Gobierno, al valorar como “un día grande en nuestra vidas” el acto de investidura.
Un arco del triunfo, en el extremo norte de la Plaza de la Revolución, remozada para la ocasión, es el escenario preparado para la ceremonia, en tanto que las medidas de seguridad se reforzaron en sitios estratégicos.
Ortega, de 66 años, es el primer presidente reelecto desde el triunfo de la Revolución Sandinista que en 1979 derrocó a la dictadura de más de 40 años de los Somoza.
Los amplios poderes recibidos por Ortega en una aplastante victoria en los comicios del 6 de noviembre del 2011, en la que la oposición denunció fraude, son motivo de preocupación y temor en sectores opositores, que acusan al mandatario de pretender quedarse de forma indefinida en el poder.
El obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio Báez, consideró que, con el poder que concentrará, Ortega tiene el desafío de “garantizar la alternabilidad en el poder, el surgimiento de nuevos liderazgos y el respeto de los derechos humanos” .
Los temores no han disminuido pese a la promesa de Ortega de que no provocará “cambios dramáticos” , y que continuará una alianza con empresarios y trabajadores para impulsar su programa de Gobierno en los próximos cinco años.
El presidente sandinista enfrenta el reto de reducir la pobreza, pese a que Nicaragua, en estos cinco años de gestión, logró un crecimiento económico de alrededor del 4% y rompió récord en exportaciones.
La ayuda de Chávez, de unos 500 millones de dólares al año, será vital para que Ortega atienda las expectativas de la inmensa población pobre que lo reeligió, en un país con el 45% de sus 5.8 millones de habitantes en la pobreza.
El líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) gobernará por segundo periodo consecutivo contando con 63 de los 92 diputados en la legistatura instalada este lunes en un ceremonia encabezada por el presidente del Consejo Supreno Electoral (CSE) , Roberto Rivas.
A la investidura, que se celebrará en la tarde de este martes, asistirán, además de Chávez y Ahmadineyad, Ricardo Martinelli (Panamá) ; Porfirio Lobo (Honduras) ; Mauricio Funes (El Salvador) ; Alvaro Colom y el gobernante electo Otto Pérez (Guatemala) ; Desi Bouterse (Surinam) ; Michel Martelly (Haití) ; el príncipe Felipe de Borbón, y otros dignatarios.
Ahmadineyad, quien se encuentra en Caracas y cumple una gira que incluye a Cuba y Ecuador, llegará a Managua este martes, al igual que Chávez.
“Abrimos nuevas páginas para seguir escribiendo esta historia brillante de luz, de verdad, inspirados en valores culturales, religiosos y de fe” , dijo Rosario Murillo, primera dama y portavoz del Gobierno, al valorar como “un día grande en nuestra vidas” el acto de investidura.
Un arco del triunfo, en el extremo norte de la Plaza de la Revolución, remozada para la ocasión, es el escenario preparado para la ceremonia, en tanto que las medidas de seguridad se reforzaron en sitios estratégicos.
Ortega, de 66 años, es el primer presidente reelecto desde el triunfo de la Revolución Sandinista que en 1979 derrocó a la dictadura de más de 40 años de los Somoza.
Los amplios poderes recibidos por Ortega en una aplastante victoria en los comicios del 6 de noviembre del 2011, en la que la oposición denunció fraude, son motivo de preocupación y temor en sectores opositores, que acusan al mandatario de pretender quedarse de forma indefinida en el poder.
El obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio Báez, consideró que, con el poder que concentrará, Ortega tiene el desafío de “garantizar la alternabilidad en el poder, el surgimiento de nuevos liderazgos y el respeto de los derechos humanos” .
Los temores no han disminuido pese a la promesa de Ortega de que no provocará “cambios dramáticos” , y que continuará una alianza con empresarios y trabajadores para impulsar su programa de Gobierno en los próximos cinco años.
El presidente sandinista enfrenta el reto de reducir la pobreza, pese a que Nicaragua, en estos cinco años de gestión, logró un crecimiento económico de alrededor del 4% y rompió récord en exportaciones.
La ayuda de Chávez, de unos 500 millones de dólares al año, será vital para que Ortega atienda las expectativas de la inmensa población pobre que lo reeligió, en un país con el 45% de sus 5.8 millones de habitantes en la pobreza.