Los Obispos estadounidenses se rebelan contra el programa de salud de Obama
Nueva York, EP
Obispos y sacerdotes estadounidenses han leído en la misa de este domingo cartas de protesta por el programa de salud presentado por la administración del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que obligará a las organizaciones sin ánimo de lucro vinculadas al ámbito religioso a ofrecer cobertura para el control de natalidad a sus empleadas.
Las autoridades religiosas, incluida la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, han condenado esta norma y la han definido como "una violación de la conciencia religiosa y del derecho constitucional a la libertad religiosa".
"No podemos y no cumpliremos esta injusta ley", escribe el obispo de Phoenix, monseñor Thomas J. Olmsted, en una de las cartas que se han leído a lo largo de todo el país este fin de semana. Además, añade que esta normativa es "un ataque a la libertad religiosa protegida en la Constitución de Estados Unidos". "Nuestros padres y abuelos no llegaron a esos extremos para ayudar a construir América, o para alcanzar la prosperidad", continúa.
La decisión no se aplicará a iglesias, sinagogas, mezquitas, templos ni escuelas de afiliación religiosa, que quedan exentas de cumplir la norma pero sí afectará a organizaciones religiosas cuyo principal objetivo no es ofrecer un servicio religioso a sus miembros, como los hospitales de afiliación católica.
La administración Obama ha explicado que este cambio, que se aplicará a estas organizaciones a partir del próximo año, está encaminado a reducir costes de salud, embarazos no deseados y abortos.
Obispos y sacerdotes estadounidenses han leído en la misa de este domingo cartas de protesta por el programa de salud presentado por la administración del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que obligará a las organizaciones sin ánimo de lucro vinculadas al ámbito religioso a ofrecer cobertura para el control de natalidad a sus empleadas.
Las autoridades religiosas, incluida la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, han condenado esta norma y la han definido como "una violación de la conciencia religiosa y del derecho constitucional a la libertad religiosa".
"No podemos y no cumpliremos esta injusta ley", escribe el obispo de Phoenix, monseñor Thomas J. Olmsted, en una de las cartas que se han leído a lo largo de todo el país este fin de semana. Además, añade que esta normativa es "un ataque a la libertad religiosa protegida en la Constitución de Estados Unidos". "Nuestros padres y abuelos no llegaron a esos extremos para ayudar a construir América, o para alcanzar la prosperidad", continúa.
La decisión no se aplicará a iglesias, sinagogas, mezquitas, templos ni escuelas de afiliación religiosa, que quedan exentas de cumplir la norma pero sí afectará a organizaciones religiosas cuyo principal objetivo no es ofrecer un servicio religioso a sus miembros, como los hospitales de afiliación católica.
La administración Obama ha explicado que este cambio, que se aplicará a estas organizaciones a partir del próximo año, está encaminado a reducir costes de salud, embarazos no deseados y abortos.