Liga Árabe pide el cese total de los disparos en Siria
EL CAIRO, AFP
En una conferencia de prensa realizada en El Cairo, Al Arabi afirmó que según los "últimos informes" recibidos por teléfono de los observadores que se encuentran en Siria, "sigue habiendo disparos y francotiradores emboscados" en las ciudades rebeldes.
"Los disparos deben cesar por completo", insistió en sus primeras declaraciones desde el inicio de la misión de observadores árabes.
Al Arabi mencionó también la posibilidad de una próxima reunión de los ministros árabes de Relaciones Exteriores para evaluar esta misión de observadores de la Liga.
Al mismo tiempo se incrementaron las peticiones de que los observadores se retiren desde que llegaron a Damasco, el 26 de diciembre, pues la sangrienta represión del régimen del presidente Bachar al Asad continúa.
Las fuerzas de seguridad mataron a cinco personas, de las cuales un niño de 10 años, en Homs (centro), y otras cuatro resultaron heridas, según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), cuya sede se encuentra en Gran Bretaña.
En esta región, bastión de las protestas contra el régimen de Bashar al Asad, el cuerpo de un hombre detenido el domingo fue entregado a su familia. Tenía rastros de tortura, según el OSDH.
Otras cinco personas murieron en la región de Duma, cerca de Damasco, cuatro de ellos en unos registros de las fuerzas de seguridad y uno por los disparos de las milicias civiles del régimen, afirmó el OSDH, citando a habitantes.
Otra persona murió en la región de Idleb (noroeste) cuando las fuerzas de seguridad dispararon en un retén.
Por su parte, los grupos de observadores efectuaron el lunes giras por Homs, Hama (centro), Deraa (sur), donde comenzó el movimiento de contestación, y en Daraya, cerca de Damasco, para dar cuenta de la situación, según la agencia oficial Sana.
En Homs, los observadores fueron a visitar una fábrica de cemento cerca de Rastan, en lugar de visitar esa ciudad, donde miles de manifestantes fueron dispersados por disparos al aire, destacó el OSDH.
Por su parte, Francia pidió que los observadores tengan los medios necesarios para llevar a cabo su misión. Las condiciones de la misión de los observadores árabes en Siria deben ser "clarificadas", declaró este martes el ministro francés de Relaciones Exteriores, Alain Juppé, quien lamentó que Rusia continúe bloqueando una condena al régimen sirio en las Naciones Unidas.
"Las condiciones en las cuales se desarrolla actualmente esta misión de observadores merecen ser clarificadas", dijo al canal de televisión I-Télé, agregando que tenía "dudas" al respecto. "¿Acaso ellos pueden tener verdaderamente acceso a la información con toda libertad? Nosotros esperamos el informe que harán en los próximos días", agregó el ministro.
Juppé reiteró que "el Consejo de Seguridad no (puede) permanecer silencioso" sobre Siria. "Se ve bien que hay una represión totalmente salvaje, que ese régimen verderamente ya no tiene futuro y que, por lo tanto, le corresponde pronunciarse a la comunidad internacional", insistió.
El ministro francés lamentó que "Rusia continúe bloqueando" una condena al régimen sirio por parte de la ONU. "Llegará el momento en que el régimen se encuentre totalmente aislado", consideró.
"Queremos estar seguros de que tienen la posibilidad de ir a donde quieran para dar testimonio y para llevar a cabo en forma verosímil, objetiva y completa el mandato que recibieron de la Liga Árabe", había declarado el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores francés, Bernard Valero.
El domingo, el presidente del Parlamento Árabe, Salem al Diqbasi, pidió la "retirada inmediata" de los observadores, "pues el régimen sirio continúa matando a civiles inocentes". Además denunció la acción del régimen como "una clara violación del protocolo árabe que prevé proteger al pueblo sirio".
Los Comités Locales de Coordinación (LCC), que organizan la movilización en Siria, señalaron el lunes por la noche la muerte de 390 civiles, entre los cuales había 24 personas que murieron bajo la tortura y 30 niños, desde la llegada de los observadores.
La misión de los observadores árabes es criticada también por los opositores sirios, que acusan al régimen de obstaculizar su misión y expresan preocupación respecto a las "posiciones adoptadas" por su jefe, el general Mohamed Ahmed Mustafa al Dabi.
Su misión forma parte de un plan de la Liga Árabe, que prevé fundamentalmente la libertad de manifestarse, y la retirada de los vehículos militares de las calles.
Algunos cuestionan también la elección del jefe de la misión, "el general Dabi, que pertenece a un ejército que cometió crímenes de guerra en Darfur", afirmó el lunes el diario de capitales saudíes al Hayat, basado en Londres, en un artículo titulado "El escándalo Al Dabi".
Un segundo grupo de observadores llegará el jueves a Siria.
En tanto, Suiza rechazó un visado de entrada a un primo del presidente Asad, Hafez Majluf, jefe de los servicios secretos, que quería reunirse con su abogado en Suiza, según el periódico NZZ Am Sonntag.
En una conferencia de prensa realizada en El Cairo, Al Arabi afirmó que según los "últimos informes" recibidos por teléfono de los observadores que se encuentran en Siria, "sigue habiendo disparos y francotiradores emboscados" en las ciudades rebeldes.
"Los disparos deben cesar por completo", insistió en sus primeras declaraciones desde el inicio de la misión de observadores árabes.
Al Arabi mencionó también la posibilidad de una próxima reunión de los ministros árabes de Relaciones Exteriores para evaluar esta misión de observadores de la Liga.
Al mismo tiempo se incrementaron las peticiones de que los observadores se retiren desde que llegaron a Damasco, el 26 de diciembre, pues la sangrienta represión del régimen del presidente Bachar al Asad continúa.
Las fuerzas de seguridad mataron a cinco personas, de las cuales un niño de 10 años, en Homs (centro), y otras cuatro resultaron heridas, según el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), cuya sede se encuentra en Gran Bretaña.
En esta región, bastión de las protestas contra el régimen de Bashar al Asad, el cuerpo de un hombre detenido el domingo fue entregado a su familia. Tenía rastros de tortura, según el OSDH.
Otras cinco personas murieron en la región de Duma, cerca de Damasco, cuatro de ellos en unos registros de las fuerzas de seguridad y uno por los disparos de las milicias civiles del régimen, afirmó el OSDH, citando a habitantes.
Otra persona murió en la región de Idleb (noroeste) cuando las fuerzas de seguridad dispararon en un retén.
Por su parte, los grupos de observadores efectuaron el lunes giras por Homs, Hama (centro), Deraa (sur), donde comenzó el movimiento de contestación, y en Daraya, cerca de Damasco, para dar cuenta de la situación, según la agencia oficial Sana.
En Homs, los observadores fueron a visitar una fábrica de cemento cerca de Rastan, en lugar de visitar esa ciudad, donde miles de manifestantes fueron dispersados por disparos al aire, destacó el OSDH.
Por su parte, Francia pidió que los observadores tengan los medios necesarios para llevar a cabo su misión. Las condiciones de la misión de los observadores árabes en Siria deben ser "clarificadas", declaró este martes el ministro francés de Relaciones Exteriores, Alain Juppé, quien lamentó que Rusia continúe bloqueando una condena al régimen sirio en las Naciones Unidas.
"Las condiciones en las cuales se desarrolla actualmente esta misión de observadores merecen ser clarificadas", dijo al canal de televisión I-Télé, agregando que tenía "dudas" al respecto. "¿Acaso ellos pueden tener verdaderamente acceso a la información con toda libertad? Nosotros esperamos el informe que harán en los próximos días", agregó el ministro.
Juppé reiteró que "el Consejo de Seguridad no (puede) permanecer silencioso" sobre Siria. "Se ve bien que hay una represión totalmente salvaje, que ese régimen verderamente ya no tiene futuro y que, por lo tanto, le corresponde pronunciarse a la comunidad internacional", insistió.
El ministro francés lamentó que "Rusia continúe bloqueando" una condena al régimen sirio por parte de la ONU. "Llegará el momento en que el régimen se encuentre totalmente aislado", consideró.
"Queremos estar seguros de que tienen la posibilidad de ir a donde quieran para dar testimonio y para llevar a cabo en forma verosímil, objetiva y completa el mandato que recibieron de la Liga Árabe", había declarado el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores francés, Bernard Valero.
El domingo, el presidente del Parlamento Árabe, Salem al Diqbasi, pidió la "retirada inmediata" de los observadores, "pues el régimen sirio continúa matando a civiles inocentes". Además denunció la acción del régimen como "una clara violación del protocolo árabe que prevé proteger al pueblo sirio".
Los Comités Locales de Coordinación (LCC), que organizan la movilización en Siria, señalaron el lunes por la noche la muerte de 390 civiles, entre los cuales había 24 personas que murieron bajo la tortura y 30 niños, desde la llegada de los observadores.
La misión de los observadores árabes es criticada también por los opositores sirios, que acusan al régimen de obstaculizar su misión y expresan preocupación respecto a las "posiciones adoptadas" por su jefe, el general Mohamed Ahmed Mustafa al Dabi.
Su misión forma parte de un plan de la Liga Árabe, que prevé fundamentalmente la libertad de manifestarse, y la retirada de los vehículos militares de las calles.
Algunos cuestionan también la elección del jefe de la misión, "el general Dabi, que pertenece a un ejército que cometió crímenes de guerra en Darfur", afirmó el lunes el diario de capitales saudíes al Hayat, basado en Londres, en un artículo titulado "El escándalo Al Dabi".
Un segundo grupo de observadores llegará el jueves a Siria.
En tanto, Suiza rechazó un visado de entrada a un primo del presidente Asad, Hafez Majluf, jefe de los servicios secretos, que quería reunirse con su abogado en Suiza, según el periódico NZZ Am Sonntag.