La ONU lanza una masiva operación para atender a las víctimas de la violencia en Sudán del Sur
Ginebra, EFE
Naciones Unidas ha lanzado una "masiva operación humanitaria de emergencia" para hacer frente a la crisis desatada por la violencia interétnica en la región de Jonglei, en Sudán del Sur.
La operación pretende ayudar a unas 50.000 personas que han sido víctimas de los enfrentamientos tribales ocurridos en los últimos días en la región de Jonglei, uno de los diez estados que integran el país africano.
El plan es organizado por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), y en él participan Unicef, el Fondo Mundial de Alimentos (PAM), la Organización para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Según comentaron en rueda de prensa los portavoces de estas instituciones, el principal problema es acceder a las víctimas, dado que la mayoría, huyendo de la violencia, se han refugiado en una amplia zona boscosa de muy difícil acceso.
Por esa misma razón la ONU no ha querido dar cifras, tan siquiera estimaciones, sobre el número de muertos ante la imposibilidad de contabilizarlos.
No obstante, los retornos comienzan a producirse y unas 4.700 persona han vuelto a sus casas, la mayoría de ellas arrasadas por el fuego durante los enfrentamientos.
Hasta el momento, se han evacuado a 46 heridos, aunque esta cifra podría elevarse en las próximas horas.
El PAM estima que podrá alimentar a unas 7.000 personas en los próximos días, aunque advierte que, dada la situación de inseguridad alimentaria en el recién creado país, se calcula que en 2012 debería dar comida a unos 2,7 millones de personas.
De hecho, según los datos de Unicef, un 8 por ciento de la población sufre severa malnutrición, un 21 por ciento moderada malnutrición, un tercio de la población no tiene acceso a agua potable y un 15 por ciento no cuenta con saneamiento adecuado.
Unicef señaló que se ha denunciado el secuestro de al menos 8 niños y que se han encontrado 45 menores no acompañados.
Por su parte, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), António Guterres, viajará a Sudán del Sur este fin de semana, y posteriormente visitará Sudán entre el 10 y el 13 de enero.
El llamamiento humanitario de la ONU para Sudán del Sur en 2012 asciende a 763 millones y hasta la fecha está cubierto en un 8 por ciento.
Naciones Unidas ha lanzado una "masiva operación humanitaria de emergencia" para hacer frente a la crisis desatada por la violencia interétnica en la región de Jonglei, en Sudán del Sur.
La operación pretende ayudar a unas 50.000 personas que han sido víctimas de los enfrentamientos tribales ocurridos en los últimos días en la región de Jonglei, uno de los diez estados que integran el país africano.
El plan es organizado por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), y en él participan Unicef, el Fondo Mundial de Alimentos (PAM), la Organización para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Según comentaron en rueda de prensa los portavoces de estas instituciones, el principal problema es acceder a las víctimas, dado que la mayoría, huyendo de la violencia, se han refugiado en una amplia zona boscosa de muy difícil acceso.
Por esa misma razón la ONU no ha querido dar cifras, tan siquiera estimaciones, sobre el número de muertos ante la imposibilidad de contabilizarlos.
No obstante, los retornos comienzan a producirse y unas 4.700 persona han vuelto a sus casas, la mayoría de ellas arrasadas por el fuego durante los enfrentamientos.
Hasta el momento, se han evacuado a 46 heridos, aunque esta cifra podría elevarse en las próximas horas.
El PAM estima que podrá alimentar a unas 7.000 personas en los próximos días, aunque advierte que, dada la situación de inseguridad alimentaria en el recién creado país, se calcula que en 2012 debería dar comida a unos 2,7 millones de personas.
De hecho, según los datos de Unicef, un 8 por ciento de la población sufre severa malnutrición, un 21 por ciento moderada malnutrición, un tercio de la población no tiene acceso a agua potable y un 15 por ciento no cuenta con saneamiento adecuado.
Unicef señaló que se ha denunciado el secuestro de al menos 8 niños y que se han encontrado 45 menores no acompañados.
Por su parte, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), António Guterres, viajará a Sudán del Sur este fin de semana, y posteriormente visitará Sudán entre el 10 y el 13 de enero.
El llamamiento humanitario de la ONU para Sudán del Sur en 2012 asciende a 763 millones y hasta la fecha está cubierto en un 8 por ciento.