La Liga Árabe acusa a partidarios de Al Assad y a detractores de atacar a sus observadores
Madrid, EP
El secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elaraby, ha denunciado este martes que algunos de los observadores que ha enviado esta organización a Siria han sido atacados tanto por partidarios del presidente, Bashar al Assad, como por detractores del mismo y ha recordado a Damasco que es "responsable" de la seguridad de los integrantes de la misión de observación.
En un comunicado, ha indicado que algunos de los observadores han sido víctimas de "actos de violencia por elementos leales al Gobierno sirio en Latakia y Deir al Zor", mientras que otros lo fueron por "elementos de la oposición en otras áreas".
Como consecuencia de ello, algunos sufrieron heridas y también se han producido "importantes daños" en sus equipos, ha precisado. Un responsable de la Liga Árabe había indicado previamente a Reuters que once observadores habían resultado heridos de carácter leve en Latakia.
Así las cosas, la Liga Árabe ha condenado "los actos irresponsables de violencia contra la misión y los observadores", de los que ha elogiado su "frialdad y su disposición a seguir realizando su misión de forma responsable, profesional e independiente bajo las inusuales circunstancias".
Por otra parte, Elaraby ha recordado al Gobierno sirio que es "plenamente responsable de la protección de los observadores" en virtud del acuerdo alcanzado el mes pasado para el despliegue de la misión y que el hecho de que no se ofrezca una "protección adecuada en Latakia y otras zonas" constituye una "violación seria de sus obligaciones".
Pese a todo, el secretario general ha expresado el "compromiso" de la Liga Arabe a "continuar su misión en un entorno seguro para su personal y que éste no se vea obligado a suspender su trabajo en caso de temer por sus vidas".
Asimismo, ha rechazado "cualquier presión o provocación por ninguna de partes, tanto Gobierno como oposición, o cualquier intento de disuadir a la misión de realizar su trabajo o de detenerlo". En este sentido, ha reclamado tanto a Gobierno como oposición que detengan la "campaña de incitación" en contra de los observadores para que estos puedan culminar la misión que se les ha encomendado.
El secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elaraby, ha denunciado este martes que algunos de los observadores que ha enviado esta organización a Siria han sido atacados tanto por partidarios del presidente, Bashar al Assad, como por detractores del mismo y ha recordado a Damasco que es "responsable" de la seguridad de los integrantes de la misión de observación.
En un comunicado, ha indicado que algunos de los observadores han sido víctimas de "actos de violencia por elementos leales al Gobierno sirio en Latakia y Deir al Zor", mientras que otros lo fueron por "elementos de la oposición en otras áreas".
Como consecuencia de ello, algunos sufrieron heridas y también se han producido "importantes daños" en sus equipos, ha precisado. Un responsable de la Liga Árabe había indicado previamente a Reuters que once observadores habían resultado heridos de carácter leve en Latakia.
Así las cosas, la Liga Árabe ha condenado "los actos irresponsables de violencia contra la misión y los observadores", de los que ha elogiado su "frialdad y su disposición a seguir realizando su misión de forma responsable, profesional e independiente bajo las inusuales circunstancias".
Por otra parte, Elaraby ha recordado al Gobierno sirio que es "plenamente responsable de la protección de los observadores" en virtud del acuerdo alcanzado el mes pasado para el despliegue de la misión y que el hecho de que no se ofrezca una "protección adecuada en Latakia y otras zonas" constituye una "violación seria de sus obligaciones".
Pese a todo, el secretario general ha expresado el "compromiso" de la Liga Arabe a "continuar su misión en un entorno seguro para su personal y que éste no se vea obligado a suspender su trabajo en caso de temer por sus vidas".
Asimismo, ha rechazado "cualquier presión o provocación por ninguna de partes, tanto Gobierno como oposición, o cualquier intento de disuadir a la misión de realizar su trabajo o de detenerlo". En este sentido, ha reclamado tanto a Gobierno como oposición que detengan la "campaña de incitación" en contra de los observadores para que estos puedan culminar la misión que se les ha encomendado.