Fernández sigue "de cerca" la gestión y se prepara para retomar sus funciones
Buenos Aires, EFE
La presidenta argentina, Cristina Fernández, sigue "muy de cerca las cuestiones" del Gobierno y se prepara para retomar esta semana sus funciones luego de una licencia de 20 días por una operación de tiroides, afirmó el ministro del Interior, Florencio Randazzo, en una entrevista divulgada hoy.
"Seguramente el 24 de enero terminará la licencia y se reincorporará. La operación fue exitosa y el pueblo argentino fue muy solidario respecto de la salud de la presidenta", señaló Randazzo en un reportaje con el periódico Miradas al Sur, difundido por la web oficial del Gobierno.
El ministro indicó que habló "algunas veces" con la mandataria durante su licencia y la notó "muy bien", tras la operación a la que se sometió el pasado 4 de enero, en la que se le extirpó la glándula tiroidea por un diagnóstico inicial de cáncer que finalmente fue descartado.
Fernández, de 58 años, "está siguiendo muy de cerca las cuestiones de la gestión. Repasamos temas concretos del Ministerio" durante los intercambios, relató Randazzo.
La jefa de Estado viajó el pasado viernes con sus hijos, Máximo y Florencia Kirchner, a la residencia oficial de Chapadmalal, vecina a la ciudad balneario de Mar del Plata, donde descansa este fin de semana en los últimos días de su licencia médica.
Se trató de su primera salida de la residencia presidencial de Olivos, en la periferia de Buenos Aires, desde la intervención a la que fue sometida en el hospital bonaerense Austral.
Medios locales indican que la mandataria se dedicó al "cine y la lectura" durante su estadía en la residencia de Chapadmalal, custodiada por un operativo de seguridad montado para la llegada de Fernández.
Randazzo también se refirió a la polémica que desató el cambio de diagnóstico de la presidenta, al considerar que "hubo algunas actitudes poco felices" de sectores de la oposición, que criticaron la difusión de un cuadro médico que luego fue modificado.
El primer diagnóstico de la mandataria había indicado que padecía un carcinoma papilar en la tiroides, pero el último análisis médico, difundido el pasado día 7, minutos antes de que Fernández recibiera el alta del sanatorio, reveló que la glándula tiroidea que le fue extraída presentaba "adenomas foliculares", es decir, tumores benignos.
"La salud de la primera mandataria es un tema de interés nacional. Pensar que hubo especulaciones detrás de eso sólo cabe en un pensamiento muy pequeño", evaluó Randazzo.
"Nosotros nos quedamos con el apoyo de las mayorías, de los que comparten este proyecto político y de los que no, pero que igual se alegraron por cómo le fue a Cristina con su salud", añadió.
La licencia médica de la mandataria concluye el 24 de enero, aunque se desconoce aún si la jefa de Estado reanudará sus funciones ese mismo día o en la jornada siguiente.
A raíz de la licencia de Fernández, el vicepresidente Amado Boudou se encuentra al frente del Poder Ejecutivo y desde ese cargo cumple con "las instrucciones" de Fernández, según dijo días atrás el propio funcionario.
La presidenta argentina, Cristina Fernández, sigue "muy de cerca las cuestiones" del Gobierno y se prepara para retomar esta semana sus funciones luego de una licencia de 20 días por una operación de tiroides, afirmó el ministro del Interior, Florencio Randazzo, en una entrevista divulgada hoy.
"Seguramente el 24 de enero terminará la licencia y se reincorporará. La operación fue exitosa y el pueblo argentino fue muy solidario respecto de la salud de la presidenta", señaló Randazzo en un reportaje con el periódico Miradas al Sur, difundido por la web oficial del Gobierno.
El ministro indicó que habló "algunas veces" con la mandataria durante su licencia y la notó "muy bien", tras la operación a la que se sometió el pasado 4 de enero, en la que se le extirpó la glándula tiroidea por un diagnóstico inicial de cáncer que finalmente fue descartado.
Fernández, de 58 años, "está siguiendo muy de cerca las cuestiones de la gestión. Repasamos temas concretos del Ministerio" durante los intercambios, relató Randazzo.
La jefa de Estado viajó el pasado viernes con sus hijos, Máximo y Florencia Kirchner, a la residencia oficial de Chapadmalal, vecina a la ciudad balneario de Mar del Plata, donde descansa este fin de semana en los últimos días de su licencia médica.
Se trató de su primera salida de la residencia presidencial de Olivos, en la periferia de Buenos Aires, desde la intervención a la que fue sometida en el hospital bonaerense Austral.
Medios locales indican que la mandataria se dedicó al "cine y la lectura" durante su estadía en la residencia de Chapadmalal, custodiada por un operativo de seguridad montado para la llegada de Fernández.
Randazzo también se refirió a la polémica que desató el cambio de diagnóstico de la presidenta, al considerar que "hubo algunas actitudes poco felices" de sectores de la oposición, que criticaron la difusión de un cuadro médico que luego fue modificado.
El primer diagnóstico de la mandataria había indicado que padecía un carcinoma papilar en la tiroides, pero el último análisis médico, difundido el pasado día 7, minutos antes de que Fernández recibiera el alta del sanatorio, reveló que la glándula tiroidea que le fue extraída presentaba "adenomas foliculares", es decir, tumores benignos.
"La salud de la primera mandataria es un tema de interés nacional. Pensar que hubo especulaciones detrás de eso sólo cabe en un pensamiento muy pequeño", evaluó Randazzo.
"Nosotros nos quedamos con el apoyo de las mayorías, de los que comparten este proyecto político y de los que no, pero que igual se alegraron por cómo le fue a Cristina con su salud", añadió.
La licencia médica de la mandataria concluye el 24 de enero, aunque se desconoce aún si la jefa de Estado reanudará sus funciones ese mismo día o en la jornada siguiente.
A raíz de la licencia de Fernández, el vicepresidente Amado Boudou se encuentra al frente del Poder Ejecutivo y desde ese cargo cumple con "las instrucciones" de Fernández, según dijo días atrás el propio funcionario.