El Mundo recibió el 2012


Samoa y las islas Tokelau, de Nueva Zelanda, fueron los primeros territorios en recibir el nuevo año. Hubo festejos masivos en Australia, Japón, China y Europa. En Río de Janeiro y San Pablo, cientos de miles salieron a las calles. El tradicional descenso de la bola de cristal en Times Square, Nueva York, fue encabezado por Lady Gaga.
Comenzando por los pequeños estados de Samoa y Kiribati, en Oceanía, el 2012 ya llegó a todo el mundo. Y la constante, con sus matices locales, fue de masivos festejos.


Samoa y las islas Tokelau, en el Pacífico Sur, hicieron historia este año al pasar de ser los últimos en celebrar el Año Nuevo a ser los primeros porque en la medianoche del 29 de diciembre cambiaron de uso horario y pasaron a la franja horaria del Pacífico, dando un salto hacia adelante de 24 horas y eliminando un día de su calendario.


En la ciudad de Auckland, la mayor de Nueva Zelanda, tuvo lugar con motivo del Año Nuevo un espectáculo de fuegos artificiales de cinco minutos de duración, pero en Wellington, la capital, las autoridades cancelaron los festejos debido al mal tiempo.


En la ciudad australiana de Sidney, miles de personas se habían congregado a media tarde en los alrededores del emblemático edificio de la Casa de la Opera para celebrar allí la llegada del Año Nuevo. Un show de 20 minutos de fuegos artificiales iluminó el cielo.


Más tarde llegó el nuevo año en Japón. Habitantes de Tokio salieron a las calles y dieron la bienvenida al 2012 soltando globos al aire. Saludaron al 2012, el “año del Dragón”, con 108 campanadas que representan los 108 deseos para el nuevo año o los 108 males que no acaben.


Millones de personas acudieron a templos y santuarios de todas las partes del país para pedir la bendición de los dioses y que 2012 sea un año mejor. El 2011 no fue un año grato para ellos. Sufrieron un fuerte terremoto el 11 de marzo.


China recibió el 2012 con un espectáculo con láser en el centenario Templo del Cielo en Pekín: es la primera vez que intenta emular así las celebraciones de fin de año de metrópolis como Nueva York, Londres o Berlín. Hubo 3 mil invitados elegidos cuidadosamente que pudieron disfrutar, a pesar del frío, del espectáculo al aire libre.


En Nueva York, cientos de miles de personas se reunieron para presenciar el descenso de una bola de cristal con más de 30.000 luces en Times Square, a la medianoche. Lady Gaga y el alcalde Michael Bloomberg encabezaron la cuenta regresiva del último minuto.


Cientos de miles de personas se congregaron en la Puerta de Brandemburgo, en Berlín, para una fiesta amenizada por la banda de rock Scorpions y por otras agrupaciones, y coronada por un despliegue atronador de fuegos artificiales.

En Europa, unos 80.000 escoceses y extranjeros participaron de una fiesta callejera e interpretaron al llegar el 2012 la canción tradicional Auld Lang Syne. En Londres, unas 250.000 personas se reunieron para escuchar las 12 campanadas del Big Ben, y la pólvora se encendió en el cielo, con cohetes lanzados desde el Ojo de Londres, la rueda gigantesca ubicada en la margen sur del Támesis.

Los españoles devoraron las 12 uvas al tiempo que el reloj de la Puerta del Sol marcaba la llegada del 2012 en Madrid, una tradición observada por millones en este país, quienes interrumpen la fiesta y encienden el televisor para escuchar la docena de campanadas.


En Brasil, la fuerte lluvia no detuvo las fiestas y hasta 2 millones de personas se reunieron en la playa de Copacabana de Río de Janeiro y casi la misma cantidad en la principal avenida de San Pablo. Masivas exhibiciones de fuegos artificiales e importantes actos musicales animaron los escenarios en todo el país.

Entradas populares