Los habitantes de Wukan ponen varias condiciones para desconvocar su protesta
Wukan, EPLos habitantes de Wukan, una localidad del sureste de China que se rebeló contra las autoridades del Partido Comunista hace más de una semana, se reunirán con miembros de las autoridades y pondrán una serie de condiciones para desconvocar su protesta, según ha informado este martes uno de los organizadores.
La población de Wukan, en la provincia de Guangdong, ha amenazado con realizar una marcha para quejarse por la expropiación de terrenos y por la sospechosa muerte de uno de los organizadores de las protestas, Xue Jinbo, mientras estaba bajo custodia.
Aunque la rebelión se limita a una localidad, ha generado mucho interés y es un desaire al Partido Comunista, que valora la estabilidad por encima de todo.
Yang Semao, un representante de la población, ha declarado a la agencia Reuters que tres delegados de Wukan irán a Lufeng, un centro urbano cercano, para reunirse con el Gobierno y explicar cuáles son sus condiciones para desconvocar la marcha a Lufeng prevista para este miércoles.
CONDICIONES
Yang ha subrayado que las autoridades deben retirar las barricadas que ha colocado la Policía en torno a la localidad, permitir que los periodistas vean el cadáver de Xue y crear una comisión que aborde las disputas que existen en Wukan. "Si lo aceptan, cancelaremos la petición de que se manifiesten mañana", ha añadido.
Sin embargo, mientras Yang explicaba las demandas, otro habitante se ha metido en la conversación. "Seguiremos adelante con la marcha. Ellos (las autoridades) no aceptarán (las condiciones) hoy", ha dicho.
La población local ha expulsado a las autoridades y a la Policía y ha llevado a cabo varias protestas por la muerte de Xue, cuya familia no se cree la versión oficial de que falleció por causas naturales. Lo que afirman los familiares y los habitantes de Wukan es que lo maltrataron físicamente.
NEGOCIAR CON LA PROMOTORA
'Southern Daily', el periódico oficial de Guangdong, ha indicado que el Gobierno de la ciudad de Shanwei, próxima a Wukan, se ha ofrecido a negociar con la promotora inmobiliaria que ha recibido los terrenos expropiados para que devuelva 165 hectáreas e indemnice a la población.
Zheng Yanxiong, el jefe del Partido Comunista en Shanwei --que administra Wukan y Lufeng--, ha asegurado que el Gobierno "garantizará los intereses de los habitantes", según el diario.
Pero los manifestantes de Wukan han dicho que no se creen las palabras de Zheng. "Es un idiota y un corrupto", ha declarado un residente apellidado Wu.
"Si quisiese afrontar la realidad, habría hecho algo antes y habría resuelto nuestro problema rápidamente, en vez de esperar hasta ahora. No le creo", ha agregado. Otra persona ha dicho que "todo son mentiras" y que Zheng "dice una cosa pero luego hará otra".
En China, las protestas se han convertido en algo relativamente común y suelen estar motivadas por problemas como la corrupción, la contaminación, los sueldos y la expropiación ilegal de tierras. Las autoridades intentan justificar esas expropiaciones diciendo que son para fomentar desarrollo.
