Portugal arrolló a Bosnia y se clasificó a la Euro 2012
Lisboa, EFE
Portugal selló este martes su clasificación al Europeo de 2012 al masacrar a una Bosnia que acabó con uno menos (6-2) con tantos de un soberbio Cristiano Ronaldo -dos goles-, Postiga (dos), Nani y Miguel Veloso.
Los lusos, que venían de un empate a cero en la ida, arrollaron a sus rivales liderados por el jugador del Real Madrid, presente en todas las acciones peligrosas, y disputarán su cuarto campeonato europeo consecutivo.
Dos años después no hubo "vendetta" bosnia. Portugal disipó los nubarrones que se ceñían sobre su juego y eliminó a su rival de otra gran competición internacional aupado por el tridente del Real Madrid.
Un hiperactivo Ronaldo, secundado por la solidez de Pepe y la verticalidad de Fábio Coentrao, lideró el combinado portugués, muy bien apoyado por el medio Joao Moutinho.
A gritos de "Messi, Messi" de los cerca de tres mil bosnios que asistieron al estadio de La Luz, la estrella merengue se motivó y firmó una de las mejores exhibiciones que se le recuerdan con la camiseta de "las quinas".
Escorado en la izquierda, pero con tendencia a ir hacia el centro, Ronaldo capitalizó las embestidas lusas y provocó varias faltas peligrosas. Así ocurrió en el minuto siete, cuando llegó al primer gol al ejecutar magistralmente un libre a unos 30 metros del arco que por su velocidad y potencia se asemejó a un obús.
Lo más complicado ya estaba hecho y la tensión acumulada en los días previos al desafío empezó librarse. Primero por el seleccionador local, Paulo Bento, y después por la bulliciosa afición portuguesa, que vibró cada vez que Ronaldo tocaba el cuero.
De la otra parte del frente apenas llegaban noticias. Muy presionados por el asfixiante esquema de Bento -jugó con la defensa adelantada y atacó la posesión rival desde el delantero centro-, los bosnios buscaron a su estilete Dzeko con pelotas con poco sentido.
La escuadra lusa atacó insistentemente por el flanco izquierdo, el de Ronaldo y Coentrao, y generó varias ocasiones claras, más por intensidad que por absoluto control de juego.
Después de una excelente jugada colectiva, la estrella del Real Madrid avisó con un disparo que repelió Begovic. Minutos más tarde, se repitieron los protagonistas, pero esta vez fue otra falta la que puso a prueba los reflejos del guardameta.
El buen trabajo portugués encontró de nuevo recompensa. El extremo Nani, muy apagado en la primera fase del parte, anotó en el 23 el segundo con un imponente derechazo desde el balcón del área.
El dos cero pareció tumbar definitivamente a Bosnia que, sin capacidad de reacción, estuvo a punto de sufrir el tercero después de una internada de Moutinho -que regateó al portero, pero escoró demasiado- y de un supuesto penalti no pitado al ariete del Zaragoza Hélder Postiga.
Sin embargo, la selección balcánica se engrasó en la fase final de la primera parte.
Primero Dzeko, con una cabezazo, y a continuación Misimovic alertaron de que todavía estaban vivos. Una discutida mano de Coentrao dentro del área y el penalti consiguiente, lanzado por el propio Misimovic, dio aire a los bosnios.
En el segundo acto, Portugal empezó como en el primero. Subió las líneas, presionó con intensidad y desarboló a la defensa bosnia. El primero en perforarla fue el omnipresente Ronaldo, que recibió un pase de entre líneas de Moutinho, arrancó en velocidad y regateó a Begovic para marcar el tercero.
El tanto desesperó a los jugadores bosnios -reclamaron fuera de juego- y el medio Lulic fue expulsado por protestar. Dzeko, que se enfrentó verbalmente a Pepe en varias ocasiones, recriminó la actitud de su colega de equipo y se intercambiaron empujones.
En inferioridad numérica, Bosnia logró recortar distancias. Spahic, central del Sevilla, aprovechó la indecisión portuguesa para poner el 3-2 a la salida de un córner.
No obstante, los hombres de Bento, muy críticos con la actuación arbitral del alemán Stark, no se amilanaron y atacaron con insistencia ante la debilidad de su oponente. Rúben Micael dio un pase interior a su colega en el Zaragoza Postiga que fusiló a Begovic en el 70.
Los bosnios bajaron los brazos y Portgual se aprovechó para aumentar el marcador. En los últimos diez minutos, Miguel Veloso de falta y Postiga, de nuevo, cerraron la goleada lusa en una de las mejores noches que se recuerdan de la selección portuguesa.
Portugal selló este martes su clasificación al Europeo de 2012 al masacrar a una Bosnia que acabó con uno menos (6-2) con tantos de un soberbio Cristiano Ronaldo -dos goles-, Postiga (dos), Nani y Miguel Veloso.
Los lusos, que venían de un empate a cero en la ida, arrollaron a sus rivales liderados por el jugador del Real Madrid, presente en todas las acciones peligrosas, y disputarán su cuarto campeonato europeo consecutivo.
Dos años después no hubo "vendetta" bosnia. Portugal disipó los nubarrones que se ceñían sobre su juego y eliminó a su rival de otra gran competición internacional aupado por el tridente del Real Madrid.
Un hiperactivo Ronaldo, secundado por la solidez de Pepe y la verticalidad de Fábio Coentrao, lideró el combinado portugués, muy bien apoyado por el medio Joao Moutinho.
A gritos de "Messi, Messi" de los cerca de tres mil bosnios que asistieron al estadio de La Luz, la estrella merengue se motivó y firmó una de las mejores exhibiciones que se le recuerdan con la camiseta de "las quinas".
Escorado en la izquierda, pero con tendencia a ir hacia el centro, Ronaldo capitalizó las embestidas lusas y provocó varias faltas peligrosas. Así ocurrió en el minuto siete, cuando llegó al primer gol al ejecutar magistralmente un libre a unos 30 metros del arco que por su velocidad y potencia se asemejó a un obús.
Lo más complicado ya estaba hecho y la tensión acumulada en los días previos al desafío empezó librarse. Primero por el seleccionador local, Paulo Bento, y después por la bulliciosa afición portuguesa, que vibró cada vez que Ronaldo tocaba el cuero.
De la otra parte del frente apenas llegaban noticias. Muy presionados por el asfixiante esquema de Bento -jugó con la defensa adelantada y atacó la posesión rival desde el delantero centro-, los bosnios buscaron a su estilete Dzeko con pelotas con poco sentido.
La escuadra lusa atacó insistentemente por el flanco izquierdo, el de Ronaldo y Coentrao, y generó varias ocasiones claras, más por intensidad que por absoluto control de juego.
Después de una excelente jugada colectiva, la estrella del Real Madrid avisó con un disparo que repelió Begovic. Minutos más tarde, se repitieron los protagonistas, pero esta vez fue otra falta la que puso a prueba los reflejos del guardameta.
El buen trabajo portugués encontró de nuevo recompensa. El extremo Nani, muy apagado en la primera fase del parte, anotó en el 23 el segundo con un imponente derechazo desde el balcón del área.
El dos cero pareció tumbar definitivamente a Bosnia que, sin capacidad de reacción, estuvo a punto de sufrir el tercero después de una internada de Moutinho -que regateó al portero, pero escoró demasiado- y de un supuesto penalti no pitado al ariete del Zaragoza Hélder Postiga.
Sin embargo, la selección balcánica se engrasó en la fase final de la primera parte.
Primero Dzeko, con una cabezazo, y a continuación Misimovic alertaron de que todavía estaban vivos. Una discutida mano de Coentrao dentro del área y el penalti consiguiente, lanzado por el propio Misimovic, dio aire a los bosnios.
En el segundo acto, Portugal empezó como en el primero. Subió las líneas, presionó con intensidad y desarboló a la defensa bosnia. El primero en perforarla fue el omnipresente Ronaldo, que recibió un pase de entre líneas de Moutinho, arrancó en velocidad y regateó a Begovic para marcar el tercero.
El tanto desesperó a los jugadores bosnios -reclamaron fuera de juego- y el medio Lulic fue expulsado por protestar. Dzeko, que se enfrentó verbalmente a Pepe en varias ocasiones, recriminó la actitud de su colega de equipo y se intercambiaron empujones.
En inferioridad numérica, Bosnia logró recortar distancias. Spahic, central del Sevilla, aprovechó la indecisión portuguesa para poner el 3-2 a la salida de un córner.
No obstante, los hombres de Bento, muy críticos con la actuación arbitral del alemán Stark, no se amilanaron y atacaron con insistencia ante la debilidad de su oponente. Rúben Micael dio un pase interior a su colega en el Zaragoza Postiga que fusiló a Begovic en el 70.
Los bosnios bajaron los brazos y Portgual se aprovechó para aumentar el marcador. En los últimos diez minutos, Miguel Veloso de falta y Postiga, de nuevo, cerraron la goleada lusa en una de las mejores noches que se recuerdan de la selección portuguesa.