Manchester City goleó en la visita a Villarreal y lo eliminó
Madrid, EFE
El Manchester City no le dio opción a un Villarreal plagado de bajas, al que goleó 3-0 en un partido en el que el equipo local no pudo plantarle cara a su rival, que le eliminó de la UEFA Champions League.
Con cero puntos tras cuatro partidos, al Villarreal sólo le queda el objetivo de la remota posibilidad de lograr el tercer puesto en su grupo y disputar la Europa League.
Fue un partido marcado por la superioridad visitante ante un Villarreal que en algunos momentos se mostró impotente, que nunca dio la sensación de poder discutirle el triunfo al equipo inglés y que, además, se vio hundido tras el penal que supuso el 0-2 en la última jugada del primer periodo.
El City manejó el partido en la primera mitad, aunque sin excesiva profundidad. Sus aproximaciones al arco de Diego López no fueron frecuentes, pero la pelota estuvo casi siempre en poder de sus jugadores.
Enfrente, el Villarreal trataba de tener alguna opción en balones largos hacia el joven Joselu (delantero del equipo ante las ausencias por lesión de Rossi, Nilmar y Ruben), pero el equipo de Juan Carlos Garrido no fue capaz de llegar al arco del equipo inglés en el primer período.
El dominio del Manchester era infructuoso hasta el punto de que el primer disparo al arco del equipo inglés a la media hora de juego se resolvió con el 0-1 marcado por Touré Yaya.
Tras ese gol, el Manchester mejoró. Manejó el balón más cerca del arco de López, sin dar opción a la salida del Villarreal, que no se aproximó al de Hart.
Sin embargo, una acción de Balotelli y Musacchio fue resuelta por el árbitro con la señalización de un penal muy protestado por los locales en el último minuto del primer periodo. El propio Balotello hizo el 0-2 con el que el encuentro llegó al descanso.
El segundo tiempo dio comienzo con un ambiente en el que se respiraba que todo estaba resuelto. El Villarreal no encontró la forma de meterse en el partido y al Manchester City, sin esforzarse, le bastaba con controlar el balón y dejar pasar los minutos para llegar al final con el objetivo cumplido.
El partido ya no tenía interés cuando Touré Yaya hizo el 0-3 y sólo ofreció algún aliciente a la afición cuando entró en el terreno de juego Sergio Agüero.
El público le abucheó permanentemente, ya que no olvidaba la polémica que se suscitó en el anterior partido, cuando el argentino marcó el gol de la victoria local y tuvo un rifirrafe con los jugadores del Villarreal al final del encuentro.
El partido languideció hacia su conclusión sin que unos y otros se aproximaran a la portería del equipo rival y el partido acabó con un 0-3 que se convirtió en un castigo excesivo para el equipo local, que no pudo hacer más de lo que hizo.
Este partido disputado en el campo de El Madrigal, ante 20.000 espectadores, tuvo un terreno de juego en buenas condiciones.