Elecciones en España / Rajoy gana el debate a Rubalcaba por la mínima
El líder del PP supera a Rubalcaba por tan solo cinco puntos (46% a 41%) y mejora las previsiones
Madrid, El País
El candidato del PP a la presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha impuesto por la mínima ante el aspirante socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, en el cara a cara celebrado esta noche. El líder de la oposición supera por cinco puntos, según un sondeo flash realizado por Metroscopia para EL PAÍS, a su rival en la carrera hacia La Moncloa, con un 46% ante un 41%.
Tras un debate celebrado en un contexto marcado por los datos de encuestas recientes que vaticinan una clara victoria del PP en las próximas elecciones del 20-N, los españoles que piensan que el vencedor de esta confrontación televisiva ha sido Rajoy son casi los mismos que dan como ganador a Rubalcaba. Se trata de cifras que no quedan muy lejos de un empate, aunque solo un 13% concluye de forma explícita y específica que el debate haya terminado en tablas. Eso sí, cada electorado considera ganador a su candidato, si bien los votantes del PP lo piensan respecto de Rajoy en mayor medida que los votantes socialistas de Rubalcaba (90% frente a 71%). Entre los votantes de otros partidos, en cambio, el candidato socialista es percibido como el ganador. En cambio quienes en 2008 se abstuvieron dan como vencedor a Rajoy.
Después de un sondeo similar a este llevado a cabo el 26 de febrero de 2008, después del primer de los dos debates que enfrentaron al presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, con Mariano Rajoy los resultados también se acercaron a un empate: 46% frente al 42%. Entonces, como ha ocurrido ahora, los votantes populares dieron la victoria a su candidato en mayor medida que los votantes socialistas al suyo (84% frente a 74%). Sin embargo, tras el segundo debate, que se celebró unos días después, a principios de marzo, el veredicto ciudadano se decantó ya de forma mayoritaria (53% a 38%) a favor del aspirante socialista, y en esta ocasión el apoyo de los votantes del PSOE a Zapatero no solo igualó sino que llegó incluso a superar el de los votantes populares a Rajoy (88% frente a 86%).
Rubalcaba mejora las previsiones
Estos resultados, que se ciñen al debate electoral, mejoran en cualquier caso las previsiones de otros sondeos, ya que el contexto en el que se ha producido esta confrontación es el más aciago de la última década para el partido socialista. Las expectativas de ventajas para el PP el próximo 20-N superan, en efecto, todas las que se han registrado hasta ahora. Las mismas encuestas de Metroscopia situaban la diferencia en favor de Mariano Rajoy en 15 puntos porcentuales ya desde hace meses, un dato que empeora incluso el de 2000, cuando la diferencia entre José María Aznar y el candidato socialista, Joaquín Almunia, alcanzó el 10,43.
A la base de estos números hay otros, que recogen todos los institutos de análisis, y que están sobrevolando la campaña como una herencia maldita. Un sondeo de Metroscopia de la semana pasada dejaba claro que para el 93% de los españoles la situación es mala, mientras que el 90% esperaba que se alcanzasen los cinco millones de parados, como dio a conocer la última Encuesta de Población Activa.
La última encuesta electoral del CIS también confirmaría esa tendencia, ya que pronostica unos resultados (190-195 escaños para el PP, 116-121 para el PSOE), lo que supondría quedarse debajo de los 125 diputados, esto es, que fue la cifra llevó a Almunia a la dimisión después de las generales de 2000. En relación con los puntos de diferencia entre los dos candidatos Mariano Rajoy quedaría, según el CIS, a 16,7 puntos de distancia de Alfredo Pérez Rubalcaba. Eso supone que los populares habrían más que duplicado su ventaja respecto a los datos ofrecidos por el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas del pasado julio, el último que recogía intención de voto, cuando los populares aventajaban a sus adversarios socialistas en 7,1 puntos.
¿Qué ha precipitado estas cifras desde entonces? En primer lugar, el empeoramiento de la situación económica, que además no tiene visos de mejorar a corto plazo (con la crisis griega y el bloqueo político en la Unión Europea), el Gobierno de Zapatero se embarcó en pleno agosto en una reforma de la Constitución pactada con el PP y sin consultar a los ciudadanos y, por último, ETA ha anunciado oficialmente que renuncia a las armas.
Esta última noticia, que es también la única positiva para el candidato socialista, que ha estado al frente de la lucha antiterrorista desde el Ministerio del Interior, ha tenido una mínima incidencia en el sondeo del CIS, pues este se realizó entre el 6 y el 23 de octubre y la banda terrorista anunció su adiós el 20, con lo que solo los encuestados los tres últimos días conocían la noticia.
El candidato del PP a la presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha impuesto por la mínima ante el aspirante socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, en el cara a cara celebrado esta noche. El líder de la oposición supera por cinco puntos, según un sondeo flash realizado por Metroscopia para EL PAÍS, a su rival en la carrera hacia La Moncloa, con un 46% ante un 41%.
Tras un debate celebrado en un contexto marcado por los datos de encuestas recientes que vaticinan una clara victoria del PP en las próximas elecciones del 20-N, los españoles que piensan que el vencedor de esta confrontación televisiva ha sido Rajoy son casi los mismos que dan como ganador a Rubalcaba. Se trata de cifras que no quedan muy lejos de un empate, aunque solo un 13% concluye de forma explícita y específica que el debate haya terminado en tablas. Eso sí, cada electorado considera ganador a su candidato, si bien los votantes del PP lo piensan respecto de Rajoy en mayor medida que los votantes socialistas de Rubalcaba (90% frente a 71%). Entre los votantes de otros partidos, en cambio, el candidato socialista es percibido como el ganador. En cambio quienes en 2008 se abstuvieron dan como vencedor a Rajoy.
Después de un sondeo similar a este llevado a cabo el 26 de febrero de 2008, después del primer de los dos debates que enfrentaron al presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, con Mariano Rajoy los resultados también se acercaron a un empate: 46% frente al 42%. Entonces, como ha ocurrido ahora, los votantes populares dieron la victoria a su candidato en mayor medida que los votantes socialistas al suyo (84% frente a 74%). Sin embargo, tras el segundo debate, que se celebró unos días después, a principios de marzo, el veredicto ciudadano se decantó ya de forma mayoritaria (53% a 38%) a favor del aspirante socialista, y en esta ocasión el apoyo de los votantes del PSOE a Zapatero no solo igualó sino que llegó incluso a superar el de los votantes populares a Rajoy (88% frente a 86%).
Rubalcaba mejora las previsiones
Estos resultados, que se ciñen al debate electoral, mejoran en cualquier caso las previsiones de otros sondeos, ya que el contexto en el que se ha producido esta confrontación es el más aciago de la última década para el partido socialista. Las expectativas de ventajas para el PP el próximo 20-N superan, en efecto, todas las que se han registrado hasta ahora. Las mismas encuestas de Metroscopia situaban la diferencia en favor de Mariano Rajoy en 15 puntos porcentuales ya desde hace meses, un dato que empeora incluso el de 2000, cuando la diferencia entre José María Aznar y el candidato socialista, Joaquín Almunia, alcanzó el 10,43.
A la base de estos números hay otros, que recogen todos los institutos de análisis, y que están sobrevolando la campaña como una herencia maldita. Un sondeo de Metroscopia de la semana pasada dejaba claro que para el 93% de los españoles la situación es mala, mientras que el 90% esperaba que se alcanzasen los cinco millones de parados, como dio a conocer la última Encuesta de Población Activa.
La última encuesta electoral del CIS también confirmaría esa tendencia, ya que pronostica unos resultados (190-195 escaños para el PP, 116-121 para el PSOE), lo que supondría quedarse debajo de los 125 diputados, esto es, que fue la cifra llevó a Almunia a la dimisión después de las generales de 2000. En relación con los puntos de diferencia entre los dos candidatos Mariano Rajoy quedaría, según el CIS, a 16,7 puntos de distancia de Alfredo Pérez Rubalcaba. Eso supone que los populares habrían más que duplicado su ventaja respecto a los datos ofrecidos por el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas del pasado julio, el último que recogía intención de voto, cuando los populares aventajaban a sus adversarios socialistas en 7,1 puntos.
¿Qué ha precipitado estas cifras desde entonces? En primer lugar, el empeoramiento de la situación económica, que además no tiene visos de mejorar a corto plazo (con la crisis griega y el bloqueo político en la Unión Europea), el Gobierno de Zapatero se embarcó en pleno agosto en una reforma de la Constitución pactada con el PP y sin consultar a los ciudadanos y, por último, ETA ha anunciado oficialmente que renuncia a las armas.
Esta última noticia, que es también la única positiva para el candidato socialista, que ha estado al frente de la lucha antiterrorista desde el Ministerio del Interior, ha tenido una mínima incidencia en el sondeo del CIS, pues este se realizó entre el 6 y el 23 de octubre y la banda terrorista anunció su adiós el 20, con lo que solo los encuestados los tres últimos días conocían la noticia.