Al menos 15 muertos en una explosión en una base militar al oeste de Teherán
Teherán, EFE
Al menos 15 personas han resultado muertas y un número indeterminado heridas en una fuerte explosión registrada en un polvorín de una base militar del Cuerpo de Guardianes de la Revolución situada al noroeste de Teherán, informó la agencia sindical iraní, ILNA.
El jefe del Departamento de Relaciones Públicas de los Guardianes de la Revolución, general Ramazan Sharif, confirmó las 15 muertes y dijo que había un numero indeterminado de heridos, algunos de ellos en estado crítico.
Según el general Sharif, la fuerte deflagración en el polvorín tuvo lugar cuando se realizaban labores de traslado de explosivos en las instalaciones.
Un responsable del Ministerio de Sanidad, Mochtaba Jaledí, indicó también a ILNA que el número de heridos asciende al menos a 12 y que uno de ellos sufre quemaduras en más del 60 por ciento del cuerpo.
Por su parte, la página web "Kaleme", ligada al dirigente político opositor Mir Husein Musaví, ha afirmado que los muertos son al menos cuarenta, aunque esa cifra no la han confirmado las autoridades.
Diversos medios han precisado que dos explosiones consecutivas se produjeron, sobre las 13.30 hora local (10.00 GMT) de hoy, en el polvorín de la base militar de los Guardianes de la Revolución de Bidgoneh, en el pueblo de Malard, 45 kilómetros al noroeste de Teherán, en la provincia de Alborz Norte, limítrofe con la capital.
Las poblaciones de Malard y la cercana Shahriar han sido las más afectadas por la explosión, que ha causado la ruptura de cristales en numerosos edificios, aunque la base no tiene viviendas u otros edificios en su entorno inmediato.
Las Fuerzas Armadas, Policía y Bomberos, además del Creciente Rojo Iraní, los Servicios de Urgencias de Teherán y Alborz y otras agencias han enviado personal de recate y asistencia con perros de búsqueda, ambulancias, helicópteros y otros equipos al lugar del suceso.
En principio, las labores se retrasaron debido al peligro que suponía el acceso a un polvorín incendiado, donde aún no se han acabado de extinguir las llamas y de donde sale una enorme humareda, por el riesgo de alguna nueva explosión.
Sobre las 16.00 hora local (12.30 GMT), los helicópteros pudieron empezar a actuar y evacuar heridos, mientras las ambulancias se encontraron con graves problemas de acceso, debido al atasco de circulación en la zona y las vías que llevan a esa base militar, siempre muy congestionadas.
Una diputada de Teherán, Fatemeh Alia, dijo a ILNA que aún se desconocen las causas de la explosión y que se investiga si se ha tratado de un accidente o un atentado.
Según la agencia Mehr, otro diputado de Shahriar, Husein Garuzi, indicó que ya se ha formado un comité para estudiar los motivos del suceso.
Al menos 15 personas han resultado muertas y un número indeterminado heridas en una fuerte explosión registrada en un polvorín de una base militar del Cuerpo de Guardianes de la Revolución situada al noroeste de Teherán, informó la agencia sindical iraní, ILNA.
El jefe del Departamento de Relaciones Públicas de los Guardianes de la Revolución, general Ramazan Sharif, confirmó las 15 muertes y dijo que había un numero indeterminado de heridos, algunos de ellos en estado crítico.
Según el general Sharif, la fuerte deflagración en el polvorín tuvo lugar cuando se realizaban labores de traslado de explosivos en las instalaciones.
Un responsable del Ministerio de Sanidad, Mochtaba Jaledí, indicó también a ILNA que el número de heridos asciende al menos a 12 y que uno de ellos sufre quemaduras en más del 60 por ciento del cuerpo.
Por su parte, la página web "Kaleme", ligada al dirigente político opositor Mir Husein Musaví, ha afirmado que los muertos son al menos cuarenta, aunque esa cifra no la han confirmado las autoridades.
Diversos medios han precisado que dos explosiones consecutivas se produjeron, sobre las 13.30 hora local (10.00 GMT) de hoy, en el polvorín de la base militar de los Guardianes de la Revolución de Bidgoneh, en el pueblo de Malard, 45 kilómetros al noroeste de Teherán, en la provincia de Alborz Norte, limítrofe con la capital.
Las poblaciones de Malard y la cercana Shahriar han sido las más afectadas por la explosión, que ha causado la ruptura de cristales en numerosos edificios, aunque la base no tiene viviendas u otros edificios en su entorno inmediato.
Las Fuerzas Armadas, Policía y Bomberos, además del Creciente Rojo Iraní, los Servicios de Urgencias de Teherán y Alborz y otras agencias han enviado personal de recate y asistencia con perros de búsqueda, ambulancias, helicópteros y otros equipos al lugar del suceso.
En principio, las labores se retrasaron debido al peligro que suponía el acceso a un polvorín incendiado, donde aún no se han acabado de extinguir las llamas y de donde sale una enorme humareda, por el riesgo de alguna nueva explosión.
Sobre las 16.00 hora local (12.30 GMT), los helicópteros pudieron empezar a actuar y evacuar heridos, mientras las ambulancias se encontraron con graves problemas de acceso, debido al atasco de circulación en la zona y las vías que llevan a esa base militar, siempre muy congestionadas.
Una diputada de Teherán, Fatemeh Alia, dijo a ILNA que aún se desconocen las causas de la explosión y que se investiga si se ha tratado de un accidente o un atentado.
Según la agencia Mehr, otro diputado de Shahriar, Husein Garuzi, indicó que ya se ha formado un comité para estudiar los motivos del suceso.