Tropas del nuevo régimen sirio toman posiciones estratégicas en Sirte
SIRTE, AFP
Las fuerzas del nuevo régimen libio tomaron este domingo el control de la Universidad y del centro de conferencias de Sirte, dos posiciones claves en el avance hacia el centro de la ciudad, uno de los últimos bastiones de los combatientes de Muamar Gadafi que desde hace semanas ofrecen una feroz resistencia.
"Controlamos el centro de Uagadugu al 100%. La vía está ahora libre para tomar toda la ciudad", afirmó Mohamed al Faya, jefe militar del nuevo régimen del Consejo Nacional de Transición (CNT).
"Estamos muy cerca del centro, es una cuestión de horas", añadió, a la vez que precisó que ahora todo dependería del tiempo de coordinación entre los combatientes del frente oeste (los llegados de Misrata) y del frente este (los llegados de Bengasi).
El ruido de los combates seguía retumbando, pero se había desplazado al menos a 500 metros al norte, en el centro de la ciudad, según un periodista de AFP.
Construido en el sur de Sirte para acoger cumbres panafricanas, el centro de conferencias era uno de los mayores objetivos de las tropas del CNT desde el inicio de la gran ofensiva sobre la ciudad el pasado 15 de septiembre, dado que numerosos soldados gadafistas se habían atrincherado en él.
Pocas horas antes, las tropas del CNT habían tomado también el control de la Universidad, en el sureste de Sirte, otro de los principales focos de resistencia de los gadafistas en la ciudad natal del coronel Muamar Gadafi.
"Hemos tomado la universidad. Nosotros hemos entrado por el este y los combatientes de Misrata por el oeste. Los combates han sido duros, había muchos francotiradores atrincherados", declaró un comandante leal al Consejo Nacional de Transición (CNT), Naser Zamud.
"Hemos liberado la zona de los perros de Gadafi", añadió, cuando cientos de combatientes recorrían el domingo por la mañana el campus de la Universidad y el adyacente de la "nueva universidad", un inmensa obra con decenas de edificios en construcción, según un periodista de AFP.
Situado en el sureste de Sirte, el campus ha sido durante semanas un bastión de los fieles del antiguo régimen de Muamar Gadafi. Desde esta posición, amenazaban a los vehículos de las fuerzas del CNT que entraba en el este de Sirte y tenían en el punto de mira la principal rotonda de entrada al sureste de la ciudad.
En los últimos días, francotiradores atrincherados en los edificios en construcción han provocado graves pérdidas en las filas adversas. No se hizo ningún balance completo en un primer momento, pero según el personal de un hospital de campaña instalado al oeste de Sirte, 18 combatientes del CNT murieron y unos 300 resultaron heridos, solamente en el frente oeste.
"Las últimas batallas son siempre las más terribles", estimó el sábado el presidente del CNT, Mustafá Abdeljalil. El CNT pretende proclamar la "liberación" del país cuando caiga el conjunto de la región de Sirte, situada al este de Trípoli.
El domingo por la mañana, combatientes del CNT agitaban su bandera roja, negra y verde ante un inmensa pancarta con la inscripción "Bienvenido a Sirte", situado en la gran avenida que lleva a la universidad del centro de la ciudad.
Otros estaban ocupados en romper retratos de Gadafi y en arrancar las banderas verdes del antiguo régimen en el campus devastado por los combates: impactos de balas y de explosiones, restos de obús por el suelo, etc.
En la carretera en el oeste de la ciudad, las familias seguían huyendo de los combates. "He puesto todo en el coche y nos fuimos cuando todavía era de noche, de madrugada", explicó Naser Hamid, que huyó con su mujer, tres hijos y su sobrina.
"Los voluntarios pro-Gadafi dicen que están hartos, ya no quieren luchar. Tiran sus armas a la basura", aseguró su esposa, Salima Ali Omar.
Según la Cruz Roja internacional, varios miles de civiles siguen bloqueados en Sirte y solo algunos médicos siguen en el hospital Ibn Sina, justo al lado del Centro de Uagadugu.
Más al sur, los combatientes del CNT que asedian desde hace un mes el oasis de Bani Walid, otro bastión pro-Gadafi en el desierto, a 170 km al sureste de Trípoli, manifestaron su frustración, asegurando haber recibido la orden de esperar la caída de Sirte antes de lanzar una ofensiva mayor.
Las fuerzas del nuevo régimen libio tomaron este domingo el control de la Universidad y del centro de conferencias de Sirte, dos posiciones claves en el avance hacia el centro de la ciudad, uno de los últimos bastiones de los combatientes de Muamar Gadafi que desde hace semanas ofrecen una feroz resistencia.
"Controlamos el centro de Uagadugu al 100%. La vía está ahora libre para tomar toda la ciudad", afirmó Mohamed al Faya, jefe militar del nuevo régimen del Consejo Nacional de Transición (CNT).
"Estamos muy cerca del centro, es una cuestión de horas", añadió, a la vez que precisó que ahora todo dependería del tiempo de coordinación entre los combatientes del frente oeste (los llegados de Misrata) y del frente este (los llegados de Bengasi).
El ruido de los combates seguía retumbando, pero se había desplazado al menos a 500 metros al norte, en el centro de la ciudad, según un periodista de AFP.
Construido en el sur de Sirte para acoger cumbres panafricanas, el centro de conferencias era uno de los mayores objetivos de las tropas del CNT desde el inicio de la gran ofensiva sobre la ciudad el pasado 15 de septiembre, dado que numerosos soldados gadafistas se habían atrincherado en él.
Pocas horas antes, las tropas del CNT habían tomado también el control de la Universidad, en el sureste de Sirte, otro de los principales focos de resistencia de los gadafistas en la ciudad natal del coronel Muamar Gadafi.
"Hemos tomado la universidad. Nosotros hemos entrado por el este y los combatientes de Misrata por el oeste. Los combates han sido duros, había muchos francotiradores atrincherados", declaró un comandante leal al Consejo Nacional de Transición (CNT), Naser Zamud.
"Hemos liberado la zona de los perros de Gadafi", añadió, cuando cientos de combatientes recorrían el domingo por la mañana el campus de la Universidad y el adyacente de la "nueva universidad", un inmensa obra con decenas de edificios en construcción, según un periodista de AFP.
Situado en el sureste de Sirte, el campus ha sido durante semanas un bastión de los fieles del antiguo régimen de Muamar Gadafi. Desde esta posición, amenazaban a los vehículos de las fuerzas del CNT que entraba en el este de Sirte y tenían en el punto de mira la principal rotonda de entrada al sureste de la ciudad.
En los últimos días, francotiradores atrincherados en los edificios en construcción han provocado graves pérdidas en las filas adversas. No se hizo ningún balance completo en un primer momento, pero según el personal de un hospital de campaña instalado al oeste de Sirte, 18 combatientes del CNT murieron y unos 300 resultaron heridos, solamente en el frente oeste.
"Las últimas batallas son siempre las más terribles", estimó el sábado el presidente del CNT, Mustafá Abdeljalil. El CNT pretende proclamar la "liberación" del país cuando caiga el conjunto de la región de Sirte, situada al este de Trípoli.
El domingo por la mañana, combatientes del CNT agitaban su bandera roja, negra y verde ante un inmensa pancarta con la inscripción "Bienvenido a Sirte", situado en la gran avenida que lleva a la universidad del centro de la ciudad.
Otros estaban ocupados en romper retratos de Gadafi y en arrancar las banderas verdes del antiguo régimen en el campus devastado por los combates: impactos de balas y de explosiones, restos de obús por el suelo, etc.
En la carretera en el oeste de la ciudad, las familias seguían huyendo de los combates. "He puesto todo en el coche y nos fuimos cuando todavía era de noche, de madrugada", explicó Naser Hamid, que huyó con su mujer, tres hijos y su sobrina.
"Los voluntarios pro-Gadafi dicen que están hartos, ya no quieren luchar. Tiran sus armas a la basura", aseguró su esposa, Salima Ali Omar.
Según la Cruz Roja internacional, varios miles de civiles siguen bloqueados en Sirte y solo algunos médicos siguen en el hospital Ibn Sina, justo al lado del Centro de Uagadugu.
Más al sur, los combatientes del CNT que asedian desde hace un mes el oasis de Bani Walid, otro bastión pro-Gadafi en el desierto, a 170 km al sureste de Trípoli, manifestaron su frustración, asegurando haber recibido la orden de esperar la caída de Sirte antes de lanzar una ofensiva mayor.