Rousseff: la UE puede contar con Brasil para salir de la crisis de la deuda
Bruselas, AFP
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aseguró este martes que la UE "puede contar" con su país para salir de la crisis, y explicó a los europeos que "por experiencia propia", un aumento de medidas de austeridad equivale a más desempleo y desigualdad social.
La UE "puede contar con Brasil", dijo Rousseff en una rueda de prensa conjunta con el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en el segundo día de la V cumbre Brasil-UE.
La mandataria brasileña señaló que es "fundamental la coordinación política de los países" para enfrentar este momento.
Rousseff informó que los ministros de Economía de Unasur "se reunirán en los próximos días" para coordinar sus posiciones", de cara a la cumbre de los países emergentes e industrializados del G20 que se celebra en la ciudad francesa de Cannes los próximos 3 y 4 de noviembre.
"Esto es un diálogo en el cual debe participar también toda América del Sur", indicó la presidenta, al referirse a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que integran Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
"La historia nos muestra que la única salida de la crisis es mediante el estímulo al crecimiento económico, con políticas de estabilidad macroeconómica, combinada con políticas sociales", explicó Rousseff.
"No tiene ningún sentido la adopción únicamente de" medidas de austeridad, advirtió, tal como lo demuestra la "experiencia latinoamericana en décadas pasadas".
Los dirigentes de la UE han diseñado planes radicales para salir de la recesión, que incluyen drásticas medidas de austeridad para los países en dificultades, sobre todo para Grecia, pero también en España, cuarta economía europea.
De lo contrario, habrá más "recesión productiva, aumento del desempleo y desigualdad social", alertó.
Brasil forma parte del grupo de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), que recientemente se declaró dispuesto a considerar un apoyo vía FMI u otras instituciones financieras internacionales, para enfrentar los desafíos a la estabilidad financiera mundial.
"Brasil sabe por experiencia propia que sólo el estímulo al crecimiento económico es capaz de generar recursos para pagar la deuda y para el equilibrio de las finanzas públicas".
Rousseff y los dirigentes europeos mostraron su resolución a avanzar en las negociaciones entre el Mercosur y la UE antes de la ronda de negociaciones de comienzos de noviembre en Uruguay, para las que aún deben vencer obstáculos en el sector agrario, sobre todo los temores de productores franceses a una avalancha en las importaciones de carne de la región.
"Renovamos con mucha determinación nuestro plan de avanzar para concluir un acuerdo de asociación entre el Mercorus y la UE, región que tiene lazos históricos y por lo tanto pueden y deben cooperar", señaló la presidenta sin dar más detalles.
La presidenta participará en la tarde de este martes en el V Foro Empresarial Brasil-Unión Europea, que se desarrolla en paralelo a la cumbre, e inaugurará el Festival Europalia que este año tiene a Brasil como principal protagonista.
Como estaba previsto, tanto las autoridades europeas como Rousseff expresaron su particular interés en profundizar el comercio y la inversión bilateral. El gigante sudamericano es el cuarto principal destino de las inversiones europeas y el sexto mayor inversionista en Europa, y en el primer semestre de 2011 se convirtió en el noveno socio comercial de la UE.
Ante la prensa, Brasil y la UE firmaron acuerdos de turismo, política espacial y educación.
"Brasil será siempre una voz solidaria con la Unión Europea", concluyó Rousseff.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, aseguró este martes que la UE "puede contar" con su país para salir de la crisis, y explicó a los europeos que "por experiencia propia", un aumento de medidas de austeridad equivale a más desempleo y desigualdad social.
La UE "puede contar con Brasil", dijo Rousseff en una rueda de prensa conjunta con el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, y el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en el segundo día de la V cumbre Brasil-UE.
La mandataria brasileña señaló que es "fundamental la coordinación política de los países" para enfrentar este momento.
Rousseff informó que los ministros de Economía de Unasur "se reunirán en los próximos días" para coordinar sus posiciones", de cara a la cumbre de los países emergentes e industrializados del G20 que se celebra en la ciudad francesa de Cannes los próximos 3 y 4 de noviembre.
"Esto es un diálogo en el cual debe participar también toda América del Sur", indicó la presidenta, al referirse a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que integran Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
"La historia nos muestra que la única salida de la crisis es mediante el estímulo al crecimiento económico, con políticas de estabilidad macroeconómica, combinada con políticas sociales", explicó Rousseff.
"No tiene ningún sentido la adopción únicamente de" medidas de austeridad, advirtió, tal como lo demuestra la "experiencia latinoamericana en décadas pasadas".
Los dirigentes de la UE han diseñado planes radicales para salir de la recesión, que incluyen drásticas medidas de austeridad para los países en dificultades, sobre todo para Grecia, pero también en España, cuarta economía europea.
De lo contrario, habrá más "recesión productiva, aumento del desempleo y desigualdad social", alertó.
Brasil forma parte del grupo de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), que recientemente se declaró dispuesto a considerar un apoyo vía FMI u otras instituciones financieras internacionales, para enfrentar los desafíos a la estabilidad financiera mundial.
"Brasil sabe por experiencia propia que sólo el estímulo al crecimiento económico es capaz de generar recursos para pagar la deuda y para el equilibrio de las finanzas públicas".
Rousseff y los dirigentes europeos mostraron su resolución a avanzar en las negociaciones entre el Mercosur y la UE antes de la ronda de negociaciones de comienzos de noviembre en Uruguay, para las que aún deben vencer obstáculos en el sector agrario, sobre todo los temores de productores franceses a una avalancha en las importaciones de carne de la región.
"Renovamos con mucha determinación nuestro plan de avanzar para concluir un acuerdo de asociación entre el Mercorus y la UE, región que tiene lazos históricos y por lo tanto pueden y deben cooperar", señaló la presidenta sin dar más detalles.
La presidenta participará en la tarde de este martes en el V Foro Empresarial Brasil-Unión Europea, que se desarrolla en paralelo a la cumbre, e inaugurará el Festival Europalia que este año tiene a Brasil como principal protagonista.
Como estaba previsto, tanto las autoridades europeas como Rousseff expresaron su particular interés en profundizar el comercio y la inversión bilateral. El gigante sudamericano es el cuarto principal destino de las inversiones europeas y el sexto mayor inversionista en Europa, y en el primer semestre de 2011 se convirtió en el noveno socio comercial de la UE.
Ante la prensa, Brasil y la UE firmaron acuerdos de turismo, política espacial y educación.
"Brasil será siempre una voz solidaria con la Unión Europea", concluyó Rousseff.