Israel enfrenta violencia de presuntos judíos extremistas
Jerusalén, AP
Agresores desconocidos, presumiblemente extremistas judíos, atacaron cementerios musulmanes, mezquitas y tierras de cultivo en una serie de actos vandálicos que han puesto al país con los nervios de punta.
Esos ataques, que en días recientes se han propagado de Cisjordania a la propia Israel, han alimentado temores de que aumente la violencia y detonaron llamamientos cada vez más alterados a encontrar y castigar a los agresores. El domingo, líderes israelíes intervinieron con condenas, y la policía dijo que estaba incrementando sus esfuerzos para detener la violencia.
"Es contra todo lo que representa el pueblo judío, como país y como una democracia", dijo el presidente Shimon Peres, un laureado con el Premio Nobel de la Paz. "Estoy seguro de que nuestra policía aprehenderá a todas las personas que hicieron esto, los criminales, y no los dejaremos caminar libremente", señaló.
En el incidente más reciente, vándalos pintaron con aerosol "Muerte a los árabes" en cementerios musulmanes y cristianos en la sección de Jaffa en Tel Aviv. El ataque, descubierto a última hora del sábado después del Yom Kippur, día más sagrado del calendario judío, siguió al incendio de una mezquita la semana pasada en una villa árabe en el norte de Israel. El incendio detonó enfrentamientos violentos entre residentes y la policía en un poblado que ha sido históricamente un modelo de coexistencia.
Los dos incidentes estuvieron entre los primeros que ocurrieron dentro de Israel, donde los residentes árabes, en contraste con sus hermanos palestinos en la vecina Cisjordania, son ciudadanos.
Durante varios años, colonos israelíes han atacado frecuentemente objetivos palestinos en Cisjordania, destrozando mezquitas y arrancando árboles de olivo.
Estos ataques son una manifestación de protesta contra el gobierno israelí por políticas que consideran compasivas hacia los palestinos, quienes esperan convertir a Cisjordania en parte de un Estado independiente. Colonos nacionalistas se oponen a un Estado palestino en lo que ellos dicen es tierra prometida a los judíos en la Biblia.
El domingo, aproximadamente 100 colonos atacaron con palos y piedras a un grupo de aldeanos palestinos en sus campos de olivos cerca de Nablus, en el norte de Cisjordania, dijeron testigos. El ejército dijo que se apresuró a detener el enfrentamiento, permitiendo a los granjeros recoger su cosecha.
Agresores desconocidos, presumiblemente extremistas judíos, atacaron cementerios musulmanes, mezquitas y tierras de cultivo en una serie de actos vandálicos que han puesto al país con los nervios de punta.
Esos ataques, que en días recientes se han propagado de Cisjordania a la propia Israel, han alimentado temores de que aumente la violencia y detonaron llamamientos cada vez más alterados a encontrar y castigar a los agresores. El domingo, líderes israelíes intervinieron con condenas, y la policía dijo que estaba incrementando sus esfuerzos para detener la violencia.
"Es contra todo lo que representa el pueblo judío, como país y como una democracia", dijo el presidente Shimon Peres, un laureado con el Premio Nobel de la Paz. "Estoy seguro de que nuestra policía aprehenderá a todas las personas que hicieron esto, los criminales, y no los dejaremos caminar libremente", señaló.
En el incidente más reciente, vándalos pintaron con aerosol "Muerte a los árabes" en cementerios musulmanes y cristianos en la sección de Jaffa en Tel Aviv. El ataque, descubierto a última hora del sábado después del Yom Kippur, día más sagrado del calendario judío, siguió al incendio de una mezquita la semana pasada en una villa árabe en el norte de Israel. El incendio detonó enfrentamientos violentos entre residentes y la policía en un poblado que ha sido históricamente un modelo de coexistencia.
Los dos incidentes estuvieron entre los primeros que ocurrieron dentro de Israel, donde los residentes árabes, en contraste con sus hermanos palestinos en la vecina Cisjordania, son ciudadanos.
Durante varios años, colonos israelíes han atacado frecuentemente objetivos palestinos en Cisjordania, destrozando mezquitas y arrancando árboles de olivo.
Estos ataques son una manifestación de protesta contra el gobierno israelí por políticas que consideran compasivas hacia los palestinos, quienes esperan convertir a Cisjordania en parte de un Estado independiente. Colonos nacionalistas se oponen a un Estado palestino en lo que ellos dicen es tierra prometida a los judíos en la Biblia.
El domingo, aproximadamente 100 colonos atacaron con palos y piedras a un grupo de aldeanos palestinos en sus campos de olivos cerca de Nablus, en el norte de Cisjordania, dijeron testigos. El ejército dijo que se apresuró a detener el enfrentamiento, permitiendo a los granjeros recoger su cosecha.