Divisiones afectan acciones contra crisis en la eurozona
Bruselas, AP
Los esfuerzos de Europa para resolver el agravamiento de la crisis de su deuda quedaron sumidos el jueves en el caos debido a que Alemania y Francia no superaron a tiempo sus discrepancias para la cumbre del domingo y obligó a ambos países a convocar una segunda reunión.
En principio, la cumbre del domingo redituaría un programa integral para controlar en definitiva los problemas de la deuda de la eurozona mediante el anuncio de nuevos créditos para Grecia, un plan para reforzar los bancos europeos ante las turbulencias de los mercados y el fortalecimiento del fondo de rescate financiero de la región.
Los despachos del presidente francés Nicolas Sarkozy y la canciller alemana Angel Merkel anunciaron que ambos países necesitaban más tiempo ante la imposibilidad de un acuerdo entre las dos mayores economías de la unión monetaria en los puntos principales del plan.
Ambos gobiernos dijeron que todos los elementos en la estrategia contra la crisis de la eurozona serán examinados el domingo "a fin de que puedan ser aprobados en definitiva por los jefes de estado y gobierno en una segunda reunión programada para el miércoles a más tardar".
Sarkozy y Merkel se reunirán el sábado en la noche en antelación a la cumbre de Bruselas con la expectativa de lograr algún avance, según las fuentes.
"La canciller tiene confianza en que en esta forma puedan lograrse medidas buenas y coordinadas para la estabilidad de la eurozona", expresó el portavoz de Merkel, Steffan Seibert, en declaraciones a la prensa en Berlín.
El anunció de una segunda cumbre aumentará con seguridad la preocupación en torno a la capacidad de la eurozona para mantener la unidad y estabilizar la moneda común. La cumbre del domingo había sido aplazada antes de su fecha original de principios de semana, a fin de dar a los gobernantes mayor tiempo para ponerse de acuerdo en los aspectos importantes.
"Persisten la mentalidad localista y la dilación que nos tiene en este desorden", dijo Sony Kappor, director gerente del grupo de expertos financieros Re-Define. "Si los gobernantes de la UE no sacan un conejo del sombrero (una medida mágica), se agravará la crisis profunda político-económica que afronta Europa".
Las autoridades europeas dijeron antes del anuncio que la eurozona continuaba dividida profundamente en partes importantes de su estrategia para atender el endeudamiento de Grecia, la situación de los bancos y el fondo de rescate financiero.
Los esfuerzos de Europa para resolver el agravamiento de la crisis de su deuda quedaron sumidos el jueves en el caos debido a que Alemania y Francia no superaron a tiempo sus discrepancias para la cumbre del domingo y obligó a ambos países a convocar una segunda reunión.
En principio, la cumbre del domingo redituaría un programa integral para controlar en definitiva los problemas de la deuda de la eurozona mediante el anuncio de nuevos créditos para Grecia, un plan para reforzar los bancos europeos ante las turbulencias de los mercados y el fortalecimiento del fondo de rescate financiero de la región.
Los despachos del presidente francés Nicolas Sarkozy y la canciller alemana Angel Merkel anunciaron que ambos países necesitaban más tiempo ante la imposibilidad de un acuerdo entre las dos mayores economías de la unión monetaria en los puntos principales del plan.
Ambos gobiernos dijeron que todos los elementos en la estrategia contra la crisis de la eurozona serán examinados el domingo "a fin de que puedan ser aprobados en definitiva por los jefes de estado y gobierno en una segunda reunión programada para el miércoles a más tardar".
Sarkozy y Merkel se reunirán el sábado en la noche en antelación a la cumbre de Bruselas con la expectativa de lograr algún avance, según las fuentes.
"La canciller tiene confianza en que en esta forma puedan lograrse medidas buenas y coordinadas para la estabilidad de la eurozona", expresó el portavoz de Merkel, Steffan Seibert, en declaraciones a la prensa en Berlín.
El anunció de una segunda cumbre aumentará con seguridad la preocupación en torno a la capacidad de la eurozona para mantener la unidad y estabilizar la moneda común. La cumbre del domingo había sido aplazada antes de su fecha original de principios de semana, a fin de dar a los gobernantes mayor tiempo para ponerse de acuerdo en los aspectos importantes.
"Persisten la mentalidad localista y la dilación que nos tiene en este desorden", dijo Sony Kappor, director gerente del grupo de expertos financieros Re-Define. "Si los gobernantes de la UE no sacan un conejo del sombrero (una medida mágica), se agravará la crisis profunda político-económica que afronta Europa".
Las autoridades europeas dijeron antes del anuncio que la eurozona continuaba dividida profundamente en partes importantes de su estrategia para atender el endeudamiento de Grecia, la situación de los bancos y el fondo de rescate financiero.