Dimite el deán de la catedral de San Pablo por la iniciativa judicial contra los 'indignados'
Londres, EP
El deán de la catedral londinense de San Pablo, Graeme Knowles, ha dimitido este lunes de su cargo en respuesta a la decisión del cabildo catredalicio de solicitar una orden judicial para desalojar el campamento de indignados levantado junto al templo hace más de dos semanas.
La salida de Knowles se suma a la del reverendo Giles Fraser, canciller de la catedral y quien también abandonó su cargado ante el temor de que cualquier medida legal pudiese derivar en incidentes violentos.
"En los últimos días, desde la llegada del campamento de manifestantes junto a la catedral, hemos estado bajo una gran presión y nos hemos enfrentado a lo que podrían considerarse problemas insalvables", ha explicado Knowles a través de un comunicado leído en su nombre. Ahora, confía en que el nuevo deán siga tratando de lograr una solución "rápida y pacífica" al conflicto.
El movimiento 'Occupy the London Stock Exchange' ha generado una crisis interna dentro de las autoridades de la catedral, uno de los símbolos de Londres y que ha permanecido cerrado durante una semana alegando razones de salud y seguridad.
Al frente de la catedral permanecerá de forma provisional el obispo de Londres, Richar Chartres, que el domingo habló con los activistas del campamento, según informa 'The Guardian'. El nombramiento del deán es de tal calado que debe ser refrendado por la reina Isabel II.
Los responsables del templo no han criticado las reivindicaciones de los manifestantes sino la forma en que desarrollan su protesta, con unas 200 tiendas instaladas.
El deán de la catedral londinense de San Pablo, Graeme Knowles, ha dimitido este lunes de su cargo en respuesta a la decisión del cabildo catredalicio de solicitar una orden judicial para desalojar el campamento de indignados levantado junto al templo hace más de dos semanas.
La salida de Knowles se suma a la del reverendo Giles Fraser, canciller de la catedral y quien también abandonó su cargado ante el temor de que cualquier medida legal pudiese derivar en incidentes violentos.
"En los últimos días, desde la llegada del campamento de manifestantes junto a la catedral, hemos estado bajo una gran presión y nos hemos enfrentado a lo que podrían considerarse problemas insalvables", ha explicado Knowles a través de un comunicado leído en su nombre. Ahora, confía en que el nuevo deán siga tratando de lograr una solución "rápida y pacífica" al conflicto.
El movimiento 'Occupy the London Stock Exchange' ha generado una crisis interna dentro de las autoridades de la catedral, uno de los símbolos de Londres y que ha permanecido cerrado durante una semana alegando razones de salud y seguridad.
Al frente de la catedral permanecerá de forma provisional el obispo de Londres, Richar Chartres, que el domingo habló con los activistas del campamento, según informa 'The Guardian'. El nombramiento del deán es de tal calado que debe ser refrendado por la reina Isabel II.
Los responsables del templo no han criticado las reivindicaciones de los manifestantes sino la forma en que desarrollan su protesta, con unas 200 tiendas instaladas.