Berlusconi intentó organizar una "revolución" contra los jueces y la prensa
Roma, EP
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, intentó organizar una "revolución" contra "los jueces de izquierdas" y contra el diario 'La Repubblica', así como contra "toda la prensa de izquierdas, también la prensa extranjera", según una llamada interceptada por el Tribunal de Bari al director del periódico 'Avanti', Valter Lavitola, acusado de intento de extorsión al 'premier' y de mantener una red de prostitución para conseguir favores políticos.
Así, durante una llamada realizada el 20 de octubre de 2009, Berlusconi aseguró a Lavitola que "o lo dejaba" porque "no está bien para nada" u organizaba "la revolución, pero la revolución verdadera". "Llevamos a manifestarse a millones de personas, destruimos el Palacio de Justicia, asediamos la sede de 'Repubblica'", llegó a afirmar. Según el 'premier', no había "otra alternativa".
La interceptación de la llamada ha sido publicada precisamente por 'La Repubblica' este lunes y fue depositada la semana pasada ante el Tribunal de Bari, que investiga una supuesta red de prostitución organizada por el empresario Marco Milanese para conseguir favores políticos, en la que también habría colaborado Lavitola.
Según las investigaciones llevadas a cabo por la Fiscalía de Bari, Milanese y Lavitola habrían conseguido al menos 30 chicas para que se prostituyeran con Berlusconi en las fiestas que celebra en sus villas.
Tras la publicación de la llamada, el líder del partido opositor Italia de los Valores, Antonio Di Pietro, ha asegurado que 'Il Cavaliere' es una persona "desesperada que hace todo en función de su impunidad" y ha afirmado que Berlusconi "utiliza" su papel de jefe de Gobierno "para criminalizar a la magistratura, bloquear las investigaciones y atacar a la prensa".
Por su parte, la presidenta del Partido Democrático en el Senado, Anna Finochiaro, ha calificado las frases pronunciadas por Berlusconi en la llamada de "gravísimas" e "inadmisibles" porque demuestran "un comportamiento subversivo" con respecto "a otros poderes del Estado".
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, intentó organizar una "revolución" contra "los jueces de izquierdas" y contra el diario 'La Repubblica', así como contra "toda la prensa de izquierdas, también la prensa extranjera", según una llamada interceptada por el Tribunal de Bari al director del periódico 'Avanti', Valter Lavitola, acusado de intento de extorsión al 'premier' y de mantener una red de prostitución para conseguir favores políticos.
Así, durante una llamada realizada el 20 de octubre de 2009, Berlusconi aseguró a Lavitola que "o lo dejaba" porque "no está bien para nada" u organizaba "la revolución, pero la revolución verdadera". "Llevamos a manifestarse a millones de personas, destruimos el Palacio de Justicia, asediamos la sede de 'Repubblica'", llegó a afirmar. Según el 'premier', no había "otra alternativa".
La interceptación de la llamada ha sido publicada precisamente por 'La Repubblica' este lunes y fue depositada la semana pasada ante el Tribunal de Bari, que investiga una supuesta red de prostitución organizada por el empresario Marco Milanese para conseguir favores políticos, en la que también habría colaborado Lavitola.
Según las investigaciones llevadas a cabo por la Fiscalía de Bari, Milanese y Lavitola habrían conseguido al menos 30 chicas para que se prostituyeran con Berlusconi en las fiestas que celebra en sus villas.
Tras la publicación de la llamada, el líder del partido opositor Italia de los Valores, Antonio Di Pietro, ha asegurado que 'Il Cavaliere' es una persona "desesperada que hace todo en función de su impunidad" y ha afirmado que Berlusconi "utiliza" su papel de jefe de Gobierno "para criminalizar a la magistratura, bloquear las investigaciones y atacar a la prensa".
Por su parte, la presidenta del Partido Democrático en el Senado, Anna Finochiaro, ha calificado las frases pronunciadas por Berlusconi en la llamada de "gravísimas" e "inadmisibles" porque demuestran "un comportamiento subversivo" con respecto "a otros poderes del Estado".