Un Dios Salvaje triunfa en su presentación en el Festival de Venecia 2011
Cine
La última película del cineasta Roman Polanski, Un Dios Salvaje, se presentó en Venecia 2011 con un gran éxito. La 68 edición de la Mostra de Venecia contó con sus protagonistas luciendo las mejores galas en la alfombra roja. Aunque o así con su director, que sigue acantonado en sin moverse demasiado por el mundo a causa de los problemas legales que la justicia estadunidense aún mantiene abiertos contra él.
Un Dios Salvaje se postula como la película favorita para alzarse con el León de Oro en Venecia 2011. Recibiendo una de las mayores ovaciones de uno de los festivales de mayor relevancia en Europa.
La buena acogida de Un Dios Salvaje se suma a la del último trabajo de George Clooney en la dirección, The Ides of March.
Un Dios Salvaje cuenta la historia de dos parejas. El hijo de una de ellas, de once años, le ha roto dos dientes al hijo de la otra al golpearle con un palo, y ellos se reúnen para tratar de resolver lo más civilizadamente la situación. Pero lo que empieza siendo una velada muy políticamente correcta se convierte con el paso de los minutos en un auténtico volcán donde todos arremeten contra todos, y donde los cuatro sacan ese dios salvaje que el ser humano lleva dentro.
La última película del cineasta Roman Polanski, Un Dios Salvaje, se presentó en Venecia 2011 con un gran éxito. La 68 edición de la Mostra de Venecia contó con sus protagonistas luciendo las mejores galas en la alfombra roja. Aunque o así con su director, que sigue acantonado en sin moverse demasiado por el mundo a causa de los problemas legales que la justicia estadunidense aún mantiene abiertos contra él.
Un Dios Salvaje se postula como la película favorita para alzarse con el León de Oro en Venecia 2011. Recibiendo una de las mayores ovaciones de uno de los festivales de mayor relevancia en Europa.
La buena acogida de Un Dios Salvaje se suma a la del último trabajo de George Clooney en la dirección, The Ides of March.
Un Dios Salvaje cuenta la historia de dos parejas. El hijo de una de ellas, de once años, le ha roto dos dientes al hijo de la otra al golpearle con un palo, y ellos se reúnen para tratar de resolver lo más civilizadamente la situación. Pero lo que empieza siendo una velada muy políticamente correcta se convierte con el paso de los minutos en un auténtico volcán donde todos arremeten contra todos, y donde los cuatro sacan ese dios salvaje que el ser humano lleva dentro.