Tigre tuvo el triunfo, pero Arsenal rescató el empate al final
Buenos Aires, DyN
Tigre, aun sin jugar bien, hizo los méritos necesarios para llevarse la victoria, pero entre errores propios, aciertos de Arsenal y algo de mala suerte, debió conformarse con un empate 2-2 ante el conjunto de Sarandí.
Además del resultado cambiante, el encuentro tuvo un aditamento extra: la actuación del árbitro Diego Abal, a quien la gente de Arsenal le discutió los dos goles de Tigre.
En el primer gol, Abal cobró penal (y acertó) por interpretar que Juan Carlos Blengio tocó intencionalmente la pelota con la mano, mientras que sí se equivocó en el segundo tanto porque Mariano Echeverría estaba adelantado cuando le pegó a la pelota.
Desde el inicio, tanto Tigre, con Diego Castaño y Román Martínez, como Arsenal, con Iván Marcone y Jorge Ortiz, intentaron adueñarse del mediocampo, porque ambas duplas son el motor futbolístico de sus equipos. Pero incluso antes de que ambos equipos se acomodaran, el local tuvo una chance inmejorable para ponerse en ventaja.
A los 4 minutos, Carlos Luna envió un centro desde la izquierda, y en su intento por rechazar, Damián Pérez tocó el balón con la mano. Abal marcó penal, Luna se hizo cargo, pero Cristian Campestrini se arrojó muy bien sobre su derecha y con el pie logró evitar el gol del local. A los 25 y tras una buena combinación entre Morales y Luna, Martínez quedó solo frente al arco pero no pudo impactar bien y la pelota se fue desviada sobre la izquierda.
Cinco minutos más tarde, a los 30, lo tuvo Luna, que le ganó en el cuerpo a cuerpo a Lisandro López, pero su remate dio en el travesaño. Pero cuando menos lo merecía, Arsenal se puso en ventaja. A los 32, Zelaya ingresó solo al área tras recibir un pase de Adrián González, eludió sobre su derecha a Javier García y definió suave y cruzado. Tigre inició el complemento decidido a buscar la igualdad y tuvo una chance clara a los dos minutos, cuando Morales remató fuerte dentro del área pero Campestrini se arrojó muy bien sobre su izquierda y evitó el gol.
Casi como un guiño del destino, y al igual que en el primer tiempo, a los 6 minutos Tigre dispuso de un penal, cuando tras un remate de Morales la pelota dio en el brazo de Burdisso. Fue el propio Morales quien lo canjeó por gol, con un remate suave sobre la izquierda de Campestrini.
En todo momento fue más el local, que a los 15 encontró la merecida ventaja. A la salida de un tiro de esquina, la pelota le quedó a Echeverria, quien con una certera media vuelta estando en posición adelantada ubicó la pelota junto al palo derecho.
En inferioridad numérica por la expulsión de Campestrini a los 26, Arsenal se encontró con la igualdad. Corrían 39 minutos cuando Adrián González envió un centro preciso al área, el cual fue peinado por Burdisso para enviar el balón al fondo de la red.
Tigre tuvo una última chance sobre el final del partido, pero el cabezazo de Ezequiel Maggiolo se estrelló contra el travesaño y privó al local de un triunfo que mereció.
Tigre, aun sin jugar bien, hizo los méritos necesarios para llevarse la victoria, pero entre errores propios, aciertos de Arsenal y algo de mala suerte, debió conformarse con un empate 2-2 ante el conjunto de Sarandí.
Además del resultado cambiante, el encuentro tuvo un aditamento extra: la actuación del árbitro Diego Abal, a quien la gente de Arsenal le discutió los dos goles de Tigre.
En el primer gol, Abal cobró penal (y acertó) por interpretar que Juan Carlos Blengio tocó intencionalmente la pelota con la mano, mientras que sí se equivocó en el segundo tanto porque Mariano Echeverría estaba adelantado cuando le pegó a la pelota.
Desde el inicio, tanto Tigre, con Diego Castaño y Román Martínez, como Arsenal, con Iván Marcone y Jorge Ortiz, intentaron adueñarse del mediocampo, porque ambas duplas son el motor futbolístico de sus equipos. Pero incluso antes de que ambos equipos se acomodaran, el local tuvo una chance inmejorable para ponerse en ventaja.
A los 4 minutos, Carlos Luna envió un centro desde la izquierda, y en su intento por rechazar, Damián Pérez tocó el balón con la mano. Abal marcó penal, Luna se hizo cargo, pero Cristian Campestrini se arrojó muy bien sobre su derecha y con el pie logró evitar el gol del local. A los 25 y tras una buena combinación entre Morales y Luna, Martínez quedó solo frente al arco pero no pudo impactar bien y la pelota se fue desviada sobre la izquierda.
Cinco minutos más tarde, a los 30, lo tuvo Luna, que le ganó en el cuerpo a cuerpo a Lisandro López, pero su remate dio en el travesaño. Pero cuando menos lo merecía, Arsenal se puso en ventaja. A los 32, Zelaya ingresó solo al área tras recibir un pase de Adrián González, eludió sobre su derecha a Javier García y definió suave y cruzado. Tigre inició el complemento decidido a buscar la igualdad y tuvo una chance clara a los dos minutos, cuando Morales remató fuerte dentro del área pero Campestrini se arrojó muy bien sobre su izquierda y evitó el gol.
Casi como un guiño del destino, y al igual que en el primer tiempo, a los 6 minutos Tigre dispuso de un penal, cuando tras un remate de Morales la pelota dio en el brazo de Burdisso. Fue el propio Morales quien lo canjeó por gol, con un remate suave sobre la izquierda de Campestrini.
En todo momento fue más el local, que a los 15 encontró la merecida ventaja. A la salida de un tiro de esquina, la pelota le quedó a Echeverria, quien con una certera media vuelta estando en posición adelantada ubicó la pelota junto al palo derecho.
En inferioridad numérica por la expulsión de Campestrini a los 26, Arsenal se encontró con la igualdad. Corrían 39 minutos cuando Adrián González envió un centro preciso al área, el cual fue peinado por Burdisso para enviar el balón al fondo de la red.
Tigre tuvo una última chance sobre el final del partido, pero el cabezazo de Ezequiel Maggiolo se estrelló contra el travesaño y privó al local de un triunfo que mereció.