EEUU está tratando de impedir que los palestinos acudan a la ONU en septiembre
Washington, EP
Estados Unidos está presionando a los palestinos para que no pidan ser reconocidos como Estado independiente ante la Asamblea General de la ONU para evitar potenciales tensiones diplomáticas con Israel y quedar aislados en su intento de bloquear su petición, según han confirmado diplomáticos y responsables norteamericanos.
La Administración estadounidense ha emprendido un plan para reactivar las conversaciones de paz entre palestinos e israelíes para intentar convencer al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, de que no acuda ante la ONU.
Washington ha aseverado que vetará cualquier petición que realicen los palestinos al Consejo de Seguridad de la ONU que tenga como fin convertirse en un miembro permanente de Naciones Unidas.
Según ha informado el diario 'The New York Times', Estados Unidos carece del apoyo suficiente para bloquear las intenciones palestinas que, entre otras cosas, le permitiría participar en la práctica totalidad de los órganos de la ONU, así como interponer demandas contra Israel ante el Tribunal Penal Internacional (TPI).
Altos cargos norteamericanos y diplomáticos extranjeros han asegurado a este periódico que Washington quiere evitar hacer campaña a favor del veto, ya que podría dejar sólo a Estados Unidos en su intento.
"Si les planteas una alternativa, las circunstancias cambian de repente, así como la dinámica, y eso es lo que estamos tratando de hacer", afirma un responsable gubernamental norteamericano.
Las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos continúan estancadas. Las autoridades palestinas abogan por la vía de la ONU para el reconocimiento de su independencia como Estado, cuyas fronteras serían las mismas que las que delimitaban a la región palestina antes de la Guerra de los Seis Días de 1967.
De hecho, este es el principal punto de disensión entre ambas partes y el más importante de los obstáculos que tienen los palestinos en su camino hacia la independencia. También lo es Estados Unidos, que dispone del derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Israel ha reconocido que no goza de los apoyos suficientes para hacer fracasar la iniciativa palestina, si bien aún alberga esperanzas en que la división en el seno de la UE sobre la cuestión palestina pueda minar de forma definitiva una comparecencia de los palestinos ante la Asamblea General.
Estados Unidos está presionando a los palestinos para que no pidan ser reconocidos como Estado independiente ante la Asamblea General de la ONU para evitar potenciales tensiones diplomáticas con Israel y quedar aislados en su intento de bloquear su petición, según han confirmado diplomáticos y responsables norteamericanos.
La Administración estadounidense ha emprendido un plan para reactivar las conversaciones de paz entre palestinos e israelíes para intentar convencer al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, de que no acuda ante la ONU.
Washington ha aseverado que vetará cualquier petición que realicen los palestinos al Consejo de Seguridad de la ONU que tenga como fin convertirse en un miembro permanente de Naciones Unidas.
Según ha informado el diario 'The New York Times', Estados Unidos carece del apoyo suficiente para bloquear las intenciones palestinas que, entre otras cosas, le permitiría participar en la práctica totalidad de los órganos de la ONU, así como interponer demandas contra Israel ante el Tribunal Penal Internacional (TPI).
Altos cargos norteamericanos y diplomáticos extranjeros han asegurado a este periódico que Washington quiere evitar hacer campaña a favor del veto, ya que podría dejar sólo a Estados Unidos en su intento.
"Si les planteas una alternativa, las circunstancias cambian de repente, así como la dinámica, y eso es lo que estamos tratando de hacer", afirma un responsable gubernamental norteamericano.
Las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos continúan estancadas. Las autoridades palestinas abogan por la vía de la ONU para el reconocimiento de su independencia como Estado, cuyas fronteras serían las mismas que las que delimitaban a la región palestina antes de la Guerra de los Seis Días de 1967.
De hecho, este es el principal punto de disensión entre ambas partes y el más importante de los obstáculos que tienen los palestinos en su camino hacia la independencia. También lo es Estados Unidos, que dispone del derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Israel ha reconocido que no goza de los apoyos suficientes para hacer fracasar la iniciativa palestina, si bien aún alberga esperanzas en que la división en el seno de la UE sobre la cuestión palestina pueda minar de forma definitiva una comparecencia de los palestinos ante la Asamblea General.