Quintana a disposición de Comisión Legislativa para probar injerencia de USAID
La Paz, Abi
El director de la Agencia para el Desarrollo de las Macroregiones y Zonas Fronterizas (ADEMAF), Juan Ramón Quintana, se puso el viernes a disposición de la Comisión Legislativa Multipartidaria para probar la injerencia de USAID en los asuntos internos del país.
"Me he puesto a disposición de la Comisión Multipartidaria para probar la injerencia política y los vínculos de la Agencia de Cooperación para el Desarrollo de Estados Unidos (USAID) para desestabilizar al Gobierno", precisó el funcionario.
Comentó que el jueves se comunicó con el presidente del Senado, René Martínez, para coadyuvar la investigación y probar con datos puntuales los afanes conspirativos de USAID contra el proceso democrático boliviano y la estabilidad del Gobierno.
Develó que los funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Bolivia diseñaron varios programas para cooptar con recursos de USAID a dirigentes indígenas, campesinos y pequeñas organizaciones económicas y construir una plataforma política que le haga frente al Gobierno.
"Los documentos desclasificados del propio Departamento de Estado de Estados Unidos pusieron al descubierto los vínculos de USAID con dirigentes de pueblos indígenas con el objetivo de conspirar contra del Gobierno a través de una centena de Organizaciones no Gubernamentales (ONGs) que reciben un financiamiento de por lo menos 100 millones de dólares", aseveró.
Ratificó que una comunicación interna entre Blanca León y Eduardo Galindo, ambos funcionarios de USAID, desvela que en esa misión diplomática calificaban como aliados a las agrupaciones indígenas cooptadas "para hacerle frente al Gobierno".
Entre esos dirigentes, mencionó a los caciques mayores del Consejo Indígena Yuracaré del río Chapare; del Consejo Indígena del Sur-Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS); Urbano Kano, Consejo Indígena Yuqui-Municipio Chimoré-Puerto Villarroel; José Isetegua, Consejo Indígena de Río Ichilo; y Natalio Anglo y Guillermo Montaño, dirigentes de la Central de Comunidades Indígenas del Pueblo Mojeño del Choré-Yapacaní.
Denunció que los partidos políticos de oposición que no pueden hacerle frente al Gobierno en las urnas, reciben dinero de USAID para conformar un bloque y capacitar a sus dirigentes a través de seminarios en los componentes; paz y seguridad, gobernabilidad con justicia, inversión en capital humano, crecimiento económico y asistencia humanitaria.
Anunció que en su debido momento dará mayores detalles sobre un programa de USAID denominado "Capacitación" de los medios de comunicación.
Al ser consultado sobre la inversión de 250 millones de dólares de USAID en Bolivia, expresó sus dudas de que ese dinero haya servicio realmente al interés nacional.
"No creo que ese dinero haya llegado al país porque del total, solamente el 10 por ciento se somete parcialmente en consulta con el Gobierno, pero el 90 por ciento es administrado unilateralmente", afirmó.
Señaló que, de ese financiamiento, se contratan consultores estadounidenses, administradores de ese país y personas que siguen la línea de la desestabilización.
El director de la Agencia para el Desarrollo de las Macroregiones y Zonas Fronterizas (ADEMAF), Juan Ramón Quintana, se puso el viernes a disposición de la Comisión Legislativa Multipartidaria para probar la injerencia de USAID en los asuntos internos del país.
"Me he puesto a disposición de la Comisión Multipartidaria para probar la injerencia política y los vínculos de la Agencia de Cooperación para el Desarrollo de Estados Unidos (USAID) para desestabilizar al Gobierno", precisó el funcionario.
Comentó que el jueves se comunicó con el presidente del Senado, René Martínez, para coadyuvar la investigación y probar con datos puntuales los afanes conspirativos de USAID contra el proceso democrático boliviano y la estabilidad del Gobierno.
Develó que los funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Bolivia diseñaron varios programas para cooptar con recursos de USAID a dirigentes indígenas, campesinos y pequeñas organizaciones económicas y construir una plataforma política que le haga frente al Gobierno.
"Los documentos desclasificados del propio Departamento de Estado de Estados Unidos pusieron al descubierto los vínculos de USAID con dirigentes de pueblos indígenas con el objetivo de conspirar contra del Gobierno a través de una centena de Organizaciones no Gubernamentales (ONGs) que reciben un financiamiento de por lo menos 100 millones de dólares", aseveró.
Ratificó que una comunicación interna entre Blanca León y Eduardo Galindo, ambos funcionarios de USAID, desvela que en esa misión diplomática calificaban como aliados a las agrupaciones indígenas cooptadas "para hacerle frente al Gobierno".
Entre esos dirigentes, mencionó a los caciques mayores del Consejo Indígena Yuracaré del río Chapare; del Consejo Indígena del Sur-Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS); Urbano Kano, Consejo Indígena Yuqui-Municipio Chimoré-Puerto Villarroel; José Isetegua, Consejo Indígena de Río Ichilo; y Natalio Anglo y Guillermo Montaño, dirigentes de la Central de Comunidades Indígenas del Pueblo Mojeño del Choré-Yapacaní.
Denunció que los partidos políticos de oposición que no pueden hacerle frente al Gobierno en las urnas, reciben dinero de USAID para conformar un bloque y capacitar a sus dirigentes a través de seminarios en los componentes; paz y seguridad, gobernabilidad con justicia, inversión en capital humano, crecimiento económico y asistencia humanitaria.
Anunció que en su debido momento dará mayores detalles sobre un programa de USAID denominado "Capacitación" de los medios de comunicación.
Al ser consultado sobre la inversión de 250 millones de dólares de USAID en Bolivia, expresó sus dudas de que ese dinero haya servicio realmente al interés nacional.
"No creo que ese dinero haya llegado al país porque del total, solamente el 10 por ciento se somete parcialmente en consulta con el Gobierno, pero el 90 por ciento es administrado unilateralmente", afirmó.
Señaló que, de ese financiamiento, se contratan consultores estadounidenses, administradores de ese país y personas que siguen la línea de la desestabilización.